AMERICA: Una de cada cuatro mujeres es golpeada por su compañero

Una de cada cuatro mujeres de América es víctima de violencia doméstica a manos de su pareja, informó Irene Klinger, funcionaria de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

La tasa de violencia intrafamiliar oscila entre 35 y 60 por ciento en seis ciudades latinoamericanas, según un estudio sobre la salud de la mujer divulgado por Klinger en la Novena Conferencia de Esposas de Jefes de Estado y de Gobierno de América realizada en Ottawa la semana pasada.

Las tasas más altas se registraron en Santiago (29 por ciento) y Rio de Janeiro (60 por ciento), pero la violencia contra las mujeres también es un problema grave en América del Norte, señaló.

Más de 25 por ciento de los 5.328 asesinatos de mujeres registrados el año pasado en Estados Unidos fueron cometidos por esposos de las víctimas.

El estudio también reveló que la mortalidad infantil en el hemisferio, que disminuyó de 125 muertes cada 1.000 nacimientos en 1960 a 40 en 1998, es mucho mayor en América Latina y el Caribe que en América del Norte.

La mortalidad infantil en Canadá es de 5,5 muertes cada 1.000 nacimientos, mientras que en el Caribe es de 66.

En la conferencia, la esposa del presidente de Estados Unidos, Hillary Rodham Clinton, anunció una donación de dos millones de dólares para apoyar la investigación sobre enfermedades infeccionsas entre los niños de América Latina y el Caribe.

Aline Chretien, esposa del primer ministro canadiense Jean Chretien, organizó la cumbre, con el objetivo de contribuir a la conciencia acerca del desarrollo en la infancia y la salud de la mujer en América.

"Cada uno de estos niños tiene un enorme potencial, que puede ser liberado en los primeros años de vida o quedar truncado para siempre", dijo Rodham Clinton a las otras 30 esposas e hijas de presidentes y primeros ministros, y otras representantes femeninas de los gobiernos de la región.

"Hay quienes podrían decir que las reuniones donde ministros de Economía, presidentes y primeros ministros discuten asuntos de comercio, seguridad u otros son más importantes que ésta", dijo Rodham.

"Pero creo que si consideramos que lo realmente importante en el siglo XXI será preparar a nuestros niños, invertir en ellos, educarlos y asegurarnos de que reciban los cuidados de salud que necesitan, eso determinará todos los demás asuntos que podríamos discutir", agregó.

Políticos de la oposición canadiense calificaron la reunión como un mero acontecimiento social, pero Rodham Clinton insistió en que la acción del hemisferio sobre lo discutido en cumbres pasadas, como el sarampión o la mortalidad materna, determinaron avances en esas áreas.

"Hoy, a partir de nuestra promesa de reducir la mortalidad materna, los ministerios de salud de todo el hemisferio brindan asistencia prenatal a más mujeres, mejoran las salas de parto y combaten la ignorancia de siglos sobre el embarazo", agregó.

"Luego de que nos fijáramos el objetivo de eliminar el sarampión antes del 2000, el número de casos disminuyó 76 por ciento en el continente, y los niños de las localidades más remotas de toda América están siendo inmunizados contra la mortal enfermedad", señaló.

Las organizaciones no gubernamentales presentes en la conferencia dijeron que muchas de las muertes prematuras de mujeres y niños eran causadas por enfermedades como malaria Y diarrea y también por la contaminación, que podrían prevenirse si los países contaran con los recursos necesarios.

Algunos representantes de organizaciones no gubernamentales invitadas a la conferencia por el gobierno canadiense criticaron a las esposas de los jefes de Estado y de gobierno por no prestarles la suficiente atención.

"El viaje no valió la pena. El dinero utilizado (para realizar la conferencia) habría sido mejor aprovechado por cualquiera de nuestras organizaciones", dijo Susanna Barnetche, directora de Renovaciones, un centro de asistencia infantil de la Ciudad de México.

Los representantes de otro grupo de organizaciones no gubernamentales que defiende la alimentación natural de los bebés protestaron porque no se les permitió colgar ninguno de sus afiches, que muestran a madres amamantando a sus hijos, donde las representantes de los gobiernos pudieran verlos. (FIN/IPS/tra- en/mb/mk/at/hd/99

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