La oposición política de Malasia lanzó una fuerte ofensiva contra el gobierno de Mahathir Mohamad al nombrar al encarcelado ex viceprimer ministro Anwar Ibrahim como su candidato principal para las próximas elecciones.
El anuncio fue hecho el martes y parece una estrategia para convencer a los malasios de que la oposición, agrupada en una coalición de cuatro partidos llamada Barisan Alternatif (Frente Alternativo), es capaz de gobernar el país con un líder confiable como sustituto de Mahathir.
Los cuatro partidos del Barisan Alternatif son el Partido Islámico (PAS), el keADILan, liderado por la esposa de Anwar, Wan Azizah Wan Ismail, el multiétnico Partido de Acción Democrática de mayoría china, y el pequeño Partido del Pueblo de Malasia, también multiétnico.
La elección de Anwar como candidato significa que el PAS, que pretendía liderar la coalición de gobierno en caso de ganar las elecciones, hizo importantes concesiones.
También confirma el hecho de que ningún partido de oposición podría gobernar sin la colaboración de otros grupos opositores.
De todos modos, los líderes del Barisan Alternatif saben que aunque ganen las elecciones a celebrarse a mediados del 2000, Anwar no podría asumir como primer ministro de inmediato, puesto que desde abril de este año cumple una sentencia de seis años de prisión.
El Barisan Alternatif anunció que nombrará primer ministro interino a cualquier miembro del partido que obtenga el apoyo de la mayoría de los legisladores del Parlamento, lo cual es acorde a la Constitución del país.
El primer ministro interino prepararía el terreno para un gobierno colectivo cuya preocupación central sería la justicia para todos los malasios, aseguran los líderes de los cuatro partidos que integran el Frente, en una declaración del martes.
El Barisan Alternatif prometió ocuparse de que se le haga justicia a Anwar, defendiendo las leyes y protegiendo la legitimidad del proceso judicial.
"Para eso, se hará una investigación judicial sobre la conspiración política que culminó con el encarcelamiento de Anwar. Una vez que se haga justicia, (Anwar) podrá gobernar la nación, si Dios quiere", declararon los políticos.
"La oposición dio un paso más hacia la consolidación de su unidad" al aceptar la candidatura de Anwar como primer ministro, sostuvo la analista Maznah Mohamad.
"Anwar ya era un líder de hecho, un ícono del movimiento reformista", que se formó cuando Mahathir lo destituyó de su cargo y lo procesó, dijo.
Anwar es, de todos los líderes de la oposición, el que representa el término medio para los cuatro partidos del Barisan Alternatif y también para el electorado, que de otro modo no se habría puesto de acuerdo respecto de un buen sustituto para Mahatir, que gobierna desde 1981.
La elección de Anwar podría tranquilizar a quienes temen que el país se convierta en un estado islámico si gana la oposición, debido a la importancia del PAS en la coalición y en la comunidad musulmana.
"Anwar representa al nuevo líder de Malasia por sus creencias islámicas y su posición moderada y modernizadora, algo que quedó claro hace tiempo a través de sus discursos", agregó Maznah.
"Para los que no son malayos es importante tener un líder que todas las facciones de la comunidad malasia puedan aceptar", explicó. Anwar es visto como alguien favorable al mercado y los negocios, y con una posición moderada.
Anwar está detenido desde el 20 de septiembre del año pasado, acusado de corrupción y abuso de poder. A principios de esta semana, Mahathir declaró a la prensa que Anwar es "el preso más libre de la historia de Malasia".
Los abogados de Anwar declararon el 10 de este mes que su cliente había sido envenenado con arsénico, lo cual desencadenó encendidas protestas de los partidarios del movimiento reformista.
Anwar fue internado y se encuentra bajo observación médica desde que sus abogados denunciaron el envenamiento. El lunes, los médicos no le permitieron concurrir al juicio que se desarrolla en su contra por cargos de sodomía.
Más de 10.000 personas hicieron una manifestación en Kuala Lumpur el domingo y el lunes, fecha en la cual se cumplía un año desde que Anwar fue arrestado y golpeado por el entonces jefe de policía.
La policía antidisturbios lanzó gases lacrimógenos contra los manifestantes que protestaban pacíficamente en la Mezquita Nacional.
"La multitud gritó enfurecida al ver a los del FRU (policía antidisturbios) golpeando a algunos integrantes del grupo", relató Sabri Zain, un periodista que escribió sobre el asunto en Internet, la red informática mundial.
"Zapatos, pancartas, banderas y cascos de motociclistas empezaron a volar en dirección a los atacantes, cuando de pronto se oyeron disparos y se vio el humo de las granadas de gas que empezaron a descender sobre la muchedumbre. En pocos segundos, estábamos en el infierno", agregó.
Siete políticos y activistas de la oposición fueron detenidos luego por realizar una reunión ilegal y causar disturbios. El Barisan Alternatif está compuesto de cuatro partidos políticos, pero hay otros, más pequeños, ligados directa o indirectamente al Frente.
La ofensiva de la oposición podría poner en aprietos a Mahathir, según los analistas. Muchos esperaban que llamara a elecciones este mes, pero ahora parecería que se llevarán a cabo en noviembre o el año próximo.
El problema que tendrá el primer ministro si la votación se realiza el año que viene es que habrá más de 600.000 nuevos habilitados para votar, entre los cuales figuran muchos jóvenes desilusionados, que se registraron en abril de este año.
"Para quedarse, Mahathir sólo puede continuar con su estrategia de intimidaciones y riguroso control de los medios de comunicación, además de esperar que la oposición se desintegre", sostuvo Maznah. (FIN/IPS/tra-en/an/js/ceb/aq/ip/99