Mucho antes de que los músicos jamaiquinos Bob Marley y Burning Spear alcanzaran fama internacional, un grupo de rastafaris se reunían en las colinas de esta capital para expresar con sus tambores la tristeza de un pueblo oprimido.
Ese grupo, Mystic Revelation of Rastafari (Revelación Mística de los Rastafaris, conocido como MRR), celebra este año su 50 aniversario.
A diferencia del difunto Marley, de Spear y de los numerosos artistas rastafaris en los que influyó, MRR no tiene gran fama. Por esta razón, no sorprende que el grupo celebre el aniversario con discreción.
Los 50 años de MRR serán la ocasión en enero de un festival indígena de una semana en la ciudad de Portland, en el extremo oriental de Jamaica.
Pero Count Ossie (Oswald Williams), uno de los miembros fundadores del grupo y su antiguo líder, sólo estará presente en espíritu. El músico falleció en octubre de 1976 en un accidente de tránsito, a los 50 años de edad.
Aunque la banda no ha sido demasiado productiva, mantiene una influencia seminal que inspiró a varios músicos populares jamaiquinos, entre ellos Marley y Spear.
Philmore Alvaranga, miembro del grupo, sostuvo que MRR nunca alcanzó la fama internacional de Marley porque se negó a comercializar la cultura rastafari.
El momento de mayor éxito de MRR fue en 1963 con su tema "Oh Carolina", interpretado por los Folkes Brothers.
La nueva versión de la canción realizada en 1994 por el rapero jamaiquino Shaggy vendió más de un millón de copias en todo el mundo.
Aunque la banda tuvo un gran vacío de producción hasta que grabó en los años 70 los álbumes "Tears of Mozambique" y "Grounation", atrajo a los principales músicos jamaiquinos a sus sesiones en las montañas Wareika, sobre la zona de Rockfort, en el extremo oriental de Kingston.
Los mismos acordes que alguna vez inspiraron a florecientes músicos en Rockfort fueron descubiertos por empresarios de Europa que invitaron al grupo a dar conciertos en ese continente.
"Cuando oyen a Mystic oyen algo totalmente diferente e inspirador", declaró Sam Clayton, de 64 años, el guitarrista de la banda. "Escuchan reggae, blues, jazz, música africana, en fin, de todo".
Este renacimiento del interés en MRR llevó al grupo a la realización de varias giras por Europa en los últimos cuatro años.
El grupo conserva cinco de sus integrantes originales e incluye a uno de los 14 hijos de Count Ossie. Completa, la banda tiene 21 miembros.
Clayton conoció a Count Ossie en 1961, en un momento en que la atracción mística de éste crecía en los círculos musicales. Ese mismo año, Clayton y Alvaranga representaron a MRR en una misión del gobierno en seis países africanos.
Alvaranga, al igual que Count Ossie, procede de la isla de St. Thomas. Se volvió rasta luego de leer sobre la lucha del emperador etíope Haile Selassie -considerado un mesías por los rastafaris- contra el ejército fascista de Benito Mussolini en 1930.
Inspirado por las enseñanzas del pionero rastafari Leonard Howell, Albaranga conoció a Count Ossie a comienzos de los años 40, cuando el movimiento rastafari ganaba cada vez más adeptos en Kingston.
Además de compartir la fe rastafari, ambos músicos tenían afinidad por la música. Iban a bailes juntos antes de comenzar a tocar sus ritmos en Rockfort.
"En aquellos días podíamos ir presos por tocar los tambores, por eso debíamos quedarnos en Rockfort", contó Alvaranga.
Las sesiones espontáneas de MRR se extendieron luego a las montañas Wareika y llegaron a oídos de los músicos que luego fundarían la famosa banda Skatalites.
"Siempre venían a tocar, nosotros con los tambores y ellos con las trompetas", recordó Albaranga.
El trabajo de MRR también captó la atención del cantante y productor Cecil Campbell, mejor conocido como Prince Buster.
Junto a los hermanos Folkes y a Buster, la banda produjo un ritmo que ha tenido un efecto perdurable en la cultura jamaiquina.
Aunque las grabaciones de MRR fueron intermitentes en los 15 años siguientes a su éxito "Oh Carolina", el grupo realizó conciertos en destacadas instituciones de Estados Unidos, como las universidades de Howard y Harvard, y pasó tres semanas en Guyana por invitación del gobierno.
Tras la muerte de Count, la actividad de la banda disminuyó, aunque mantuvo su presencia en eventos culturales.
La renovación del interés en MRR produjo un aumento de sus compromisos en el exterior, y es probable que el grupo vuelva a grabar. (FIN/IPS/tra-en/hc/cb/mlm/cr/99