Los negociadores del Mercosur no alcanzaron hoy en la capital de Uruguay soluciones a la crisis que atraviesa el bloque por el enfrentamiento entre Argentina y Brasil, y consideran difícil que los ministros de los cuatro países lo logren este viernes.
Brasil mantuvo a lo largo de toda la jornada de negociación su posición de que sus divergencias con Argentina deberán ser zanjadas de forma bilateral, en el marco del Protocolo de Brasilia, que fija mecanismos para la solución de controversias comerciales en el Mercosur (Mercado Común del Sur).
Fuentes de la negociación informaron a IPS que los cuatro países miembros del bloque (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) presentaron propuestas distintas en la reunión del Grupo Mercado Común, que nuclea a los negociadores técnicos.
Las divergencias entre las propuestas deja una dura tarea a los ministros de Relaciones Exteriores y Economía, que se reunirán este viernes.
De todos modos, los informantes manifestaron su convicción en que es difícil que en esa instancia de alto nivel político se resuelva el conflicto.
El único resultado concreto de las negociaciones de este jueves fue la convocatoria para el 15 de agosto de dos comisiones ad hoc creadas en la última cumbre, celebrada en Asunción en junio. Se trata del subgrupo de trabajo de Análisis de Coyuntura y el de Análisis de Políticas Macroeconómicas.
El director de Integración de la Cancillería uruguaya, Elbio Roselli, explicó que "los cuatro países efectuaron propuestas concretas" distintas "y no hubo acuerdo".
Las relaciones de los dos principales socios comenzaron a deteriorarse a partir de la devaluación del 13 de enero en Brasil.
Desde entonces, el ritmo del comercio de Brasil con Argentina, Uruguay y Paraguay cayó 15 por ciento respecto del año pasado, cuando entre 1991, cuando se institucionalizó el Mercosur, y 1998, se había multiplicado por cinco.
Pero también Argentina vio caer 26,9 por ciento sus ventas hacia el resto del Mercosur, luego de multiplicarlas casi por nueve entre 1991 y 1998.
La crisis se formalizó el 26 de julio, cuando Argentina decidió aplicar medidas de salvagurdia a todos los bienes importados de América Latina, incluso del Mercosur, pero la semana última decidió excluir a los países del bloque, ante la presión de Brasil.
"No vamos a iniciar aquí una larga discusión sobre las causas de la baja producción en tal o cual sector. Tenemos que preocuparnos por el futuro del comercio, por el futuro del Mercosur", dijo a IPS el subsecretario de Integración y jefe de los negociadores de Brasil, José Alfredo Graça Lima.
"Debemos actuar con responsabilidad. Los acuerdos exigen coraje político y determinación más allá de intereses de sectores. Brasil no cree posible que se alteren las reglas de juego ni que se produzcan violaciones por problemas de coyuntura", agregó Graça Lima antes de ingresar a negociación.
El funcionario brasileño sostuvo, pocos minutos antes de sentarse a la mesa de negociaciones, que la posición de su país era inalterable. En ese sentido, dijo no estar dispuesto a admitir salvaguardias y que la única salida era una negociación bilateral con Argentina.
Seis horas después, al terminar la reunión, los negociadores confirmaron que Brasil se mantuvo firme y que no hubo acuerdo. (FIN/IPS/mj/if/99