El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Yasser Arafat, rechazó una propuesta del primer ministro de Israel, Ehud Barak, para liberar a 250 presos palestinos a cambio de aplazar la aplicación de los acuerdos de Río Wye.
La propuesta se hizo durante el encuentro entre Arafat y Barak celebrado el martes 27 en el puesto de control de Erez, en la frontera entre los territorios palestinos ocupados e Israel, reveló Nabil Shaath, ministro de Planificación de la ANP.
Las dos horas de conversaciones entre ambos lograron el "único resultado práctico de formar un comité conjunto israelí-palestino para tratar los problemas planteados en la reunión e informar nuevamente a los líderes en unas dos semanas", dijo Shaath.
Arafat aceptó el pedido de Barak de tomar dos semanas para estudiar las propuestas israelíes, pero también exigió la aplicación de los acuerdos.
Los acuerdos de Río Wye, firmados en octubre con la mediación de Estados Unidos, obligaban a Israel a retirarse de 13 por ciento de la Cisjordania ocupada en tres meses, a cambio de que la ANP garantice la seguridad en el territorio, pero el proceso fue congelado por el ex primer ministro Binyamin Netanyahu.
Ambas partes llevan a cabo una intensa campaña diplomática. Barak pretende conseguir el apoyo de Egipto, Rusia y Siria, mientras Arafat y el rey Abdallah de Jordania intentan organizar una cumbre de cinco países árabes, según informes procedentes de Amán.
El domingo, Barak viajó a Moscú para discutir un posible acuerdo de paz con Siria y Arafat se trasladó a El Cairo, donde se reunió con un representante del Frente Popular para la Liberación de Palestina, con sede en Siria, con el fin de lograr la unión nacional antes de que comiencen las negociaciones finales dentro de dos semanas.
Barak anunció en Moscú que Israel reanudará el 1 de octubre el retiro de sus tropas del territorio palestino, pero no especificó a qué ritmo.
Zohdi Al Kodra, el embajador palestino en El Cairo, explicó que el centro de la disputa sigue siendo cuándo y cómo se deben aplicar los acuerdos de Río Wye.
Al Kodra reafirmó el "pleno compromiso de Palestina hacia sus obligaciones por el acuerdo, incluso la 'tolerancia cero a la violencia y el terror' ", ya sea de "palestinos o israelíes", agregó.
El domingo, el gobierno palestino declaró que los acuerdos se deben comenzar a aplicar en tres semanas.
Barak propuso implementar sólo parte de los retiros previstos por ahora, y el resto se harían como parte de un acuerdo final de paz con los palestinos, lo cual incluiría el desmantelamiento de asentamientos judíos en los territorios ocupados.
"Es probable que el comité conjunto sea menos un mecanismo de conciliación que una forma conveniente para que Israel haga tiempo", dijo Mohammed Sid Ahmed, analista egipcio.
"Barak utilizará las dos semanas para hacer campaña para su postura, primero con el presidente (egipcio) Hosni Mubarak… y luego con la secretaria de Estado de Estados Unidos, Madeleine Albright, antes de su viaje al Medio Oriente este ems", agregó.
Durante una conferencia de prensa celebrada con Barak en Alejandría el jueves, Mubarak dijo que había discutido con el primer ministro israelí el cronograma para aplicar los acuerdos.
"Creo que Barak tiene intención de aplicar el acuerdo. No dijo en absoluto que lo modificaría. El primer ministro israelí lo cumplirá, pero quizá haya un retraso de dos o tres semanas, eso es todo", afirmó.
Aunque Egipto apoyó a la ANP al exigir que el acuerdo se aplique de inmediato y sin cambios, el canciller egipcio Amr Moussa declaró que también existe "la determinación general para reavivar el proceso de paz rápidamente y aplicar los acuerdos".
"La posición palestina es que nos oponemos a la combinación de etapas transitivas y permanentes", dijo la semana pasada el principal negociador palestino, Saeb Ereikat, después de reunirse con Moussa.
"Los palestinos rechazan categóricamente los cambios al acuerdo que propuso Barak durante su cumbre con Arafat", destacó.
Pero fuentes diplomáticas árabes sugieren que quizá no sea definitivo el rechazo palestino a "sincronizar" la aplicación del acuerdo de Río Wye con las negociaciones finales sobre el estatuto político de Palestina.
Esas fuentes aseguran que funcionarios de la ANP temen que si no le demuestran a Barak lo que Estados Unidos califica de "estímulo", el primer ministro israelí podría "desertar" indefinidamente de las negociaciones.
"Entonces, Barak se concentraría en llegar a un acuerdo con Siria", señaló una fuente diplomática. (FIN/IPS/tra-en/yt/ak/aq/ip/99