El acusado del tiroteo en un centro comunitario judío en el estado de California dijo al entregarse a la Oficina Federal de Inteligencia (FBI) que "al matar judíos quería enviar un mensaje a Estados Unidos".
Pero Buford Furrow Jr. no pudo cumplir su misión. Ninguna de las cinco personas, cuatro de ellas niños, a las que disparó el martes en un centro comunitario judío próximo a Los Angeles, murió aún.
Sin embargo, Furrow, de 37 años, también acusado de asesinar a un cartero filipino ese mismo día, sí consiguió llamar la atención a la proliferación de grupos racistas en este país, que no vacilan en disparar a niños de cinco años para "enviar un mensaje".
La policía informó que Furrow dijo, tras entregarse el miércoles, que había matado al cartero debido al color de su piel, por el que supuso que era latino o asiático.
Según investigadores de grupos que promueven el odio, a medida que se acerca el fin de siglo aumenta la actividad de la derecha racista estadounidense.
"Hay personas que abiertamente afirman que el año 2000 tiene mucha importancia", dijo Chip Berlet, analista de Political Research Associates, una organización de Massachusetts que rastrea grupos que promueven el odio.
Para muchos integrantes de la derecha racista, los próximos años serán muy importantes porque consideran que la llegada del milenio significa el advenimiento de una "guerra racial".
Los vínculos de Furrow con la derecha racista estadounidense se detectaron fácilmente.
La foto de Furrow, vestido como oficial de seguridad en una conferencia celebrada por el grupo de extrema derecha Aryan Nations (Naciones Arias), fue publicada en un informe de 1996 divulgado por la Liga Contra la Difamación (ADL), una organización judía con sede en Nueva York.
Los conocidos de Furrow informaron que vivió con Denise Mathews, viuda del fundador del grupo extremista The Order (El Orden), un violento ramal de Aryan Nations, que robaba bancos y colocaba bombas en el oeste de Estados Unidos a comienzos de los años 80.
Se creía que The Order se había disuelto cuando las autoridades arrestaron a la mayoría de sus líderes en 1985, pero el tiroteo de Furrow en Los Angeles, y los posteriores informes acerca de su odio hacia los judíos, dirigieron nuevamente la atención hacia las actividades del grupo.
Berlet afirma que, lejos de ser un vástago extremista de Aryan Nations, The Order es "la forma aplicada de la ideología" de aquel grupo, y muchos aún comparten su violenta actitud.
A varios grupos de derecha estadounidenses les preocupa que miles de estadounidenses blancos continúen participando en Aryan Nations y otros grupos que comparten la ideología de "Identidad Cristiana", una versión expresamente racista del cristianismo.
"El movimiento Identidad Cristiana opina que los judíos son las 'semillas de Satán', que los negros y los latinoamericanos son 'gente de barro', sin alma", dijo Gail Gans, directora del Centro de Información de Derechos Civiles de la Liga Contra la Difamación.
Berlet afirma que la versión de Aryan Nations de las creencias de Identidad Cristiana difiere muy poco de la de los grupos neonazis.
La ideología, formulada por el líder de Aryan Nations, Richard Butler, se relaciona con los escritos antisemitas de Henry Ford y con textos racistas como "El Protocolo de los Sabios de Sión".
Aryan Nations, cuya sede está próxima a Hayden Lake, en el estado de Idaho, es un grupo de Identidad Cristiana que en varias ocasiones estuvo ligado a la violencia, sostiene Gans.
"Hay algunos grupos que son definitivamente peligrosos porque recurren a la violencia" y Aryan Nations, igual que The Order, entran en esa definición, agregó.
En 1996, Aryan Nations publicó su propia versión de la Declaración de Independencia, en la que afirmaba que "la historia del actual Gobierno de Ocupación Sionista de Estados Unidos… es una historia de repetidos perjuicios y usurpaciones".
De acuerdo con eso, el grupo absolvió a sus miembros de la fidelidad al gobierno federal de Estados Unidos y pidió que se formara una nueva nación "libre e independiente" entre sus miembros.
Las autoridades federales creen que Furrow podría estar vinculado a la Orden de Phineas, un grupo armado también relacionado con el movimiento Identidad Cristiana, e involucrado en varios asesinatos y robos en los últimos años.
Quienes aspiren a pertenecer a ese grupo deben participar en actos de violencia armada contra personas que no son blancas.
El Centro Legal contra la Pobreza del Sur vinculó a Byron de la Beckwith, el asesino del líder de derechos civiles Medgar Evers, con la Orden de Phineas y con The Order.
Michael Novick, que rastrea grupos que promueven el odio en la organización Personas Contra el Terror Racista, con sede en California, también vinculó a la Orden de Phineas con Timothy McVeigh, procesado por colocar una bomba en un edificio de la ciudad de Oklahoma en 1995.
Gans dijo que el riesgo que representan los grupos racistas violentos es tan grande que el FBI debería tener la libertad de investigar a todas las organizaciones que abiertamente predican el odio racial e incitan a la violencia.
Actualmente, el FBI sólo puede investigar a las personas que cometieron crímenes dentro de los grupos, pero no puede supervisar las publicaciones o sitios en Internet de los grupos que promueven el odio.
En Estados Unidos, la derecha racista abarcar a unos miles de personas, pero solo unos pocos cientos se inclinan por la violencia, y no podrían detectarse fácilmente en la población mayor de racistas que respetan la ley, comentó.
"No difiere de lo que ocurre en el resto del mundo, con el aumento de los movimientos étnicos nacionalistas", dijo Berlet. Con la cercanía del próximo milenio, el movimiento racista estadounidense está particularmente agitado y podría continuar activo en los próximos meses, advirtió. (FIN/IPS/tra-en/fah/mk/at/aq/hd-ip/99