Desi Bouterse es considerado el político más popular de Suriname, a pesar de que encabezó dos golpes militares y de que la justicia de Holanda lo condenó en ausencia por narcotráfico.
Este ex sargento que derrocó en 1980 al gobierno de Henk Aaron, tras lo cual lideró un régimen al que se atribuyen 200 muertes y desapariciones, se prepara ahora para acompañar el derrumbe del presidente Jules Wijdenbosch, esta vez por medios pacíficos, y acceder al poder en las urnas el año próximo.
Wijdenbosch había accedido a la presidencia tres años atrás con la ayuda del propio Bouterse y su Partido Nacional Democrático (PND), cuya bandera es la concordia entre las etnias surinamesas.
Desiré Delano Bouterse, descendiente de europeos, africanos e indígenas americanos, se unió ahora a las organizaciones que realizan manifestaciones a diario para exigir la designación de un gabinete interino de tecnócratas que sustituya al presidente y sus ministros hasta las próximas elecciones.
Mientras, Bouterse continuará viajando por todo el territorio de Suriname, en campaña presidencial, ya que ahora apela a la ciudadanía para volver al poder.
Las elecciones se celebrarán dentro de nueve meses. Para entonces, se prevé que haya concluido en Holanda el juicio de apelación a la condena de Bouterse a 16 años de cárcel.
El ex gobernante fue hallado culpable en ausencia el 16 de julio del tráfico de unas dos toneladas de cocaína a Holanda y Bélgica.
"Quieren que yo desaparezca, pero eso no me molesta. Lo que me importa es lo que piensa de mí el pueblo de Suriname", declaró a IPS en una entrevista.
Bouterse no acostumbra hablar con los periodistas nacionales ni internacionales.
La posibilidad de que el ex dictador militar se convierta en el próximo presidente de Suriname inquieta a Holanda, potencia colonial de este país hasta su independencia, en 1975.
El líder del PND recalca en sus discursos que Holanda humilló y abusó de Suriname durante 300 años.
"Todos sabemos cuál fue la política de Holanda en nuestra historia, sobre todo en la década del 80, cuando intentamos desarrollar al país a nuestro modo", recordó.
"Tenemos asesores jurídicos en Holanda y en Suriname que hacen bien su trabajo. Yo hago lo que se espera de mí en Suriname. Es decir, trabajo para el desarrollo", declaró este ex comandante del Ejército ya retirado de las armas.
Bouterse, nacido hace 54 años en Suriname, saltó a la fama cuando encabezó el golpe de Estado "de los sargentos" contra el gobierno de Aaron, el 25 de febrero de 1980.
La economía quedó devastada tras el gobierno militar. En 1982, fueron asesinados 15 dirigentes políticos, intelectuales y periodistas, en hechos atribuidos al régimen, que cedió a la presión nacional y extranjera y convocó a elecciones en 1987.
Antes de esos comicios, Bouterse y otros oficiales del ejército fundaron el PND, que obtuvo tres de los 51 escaños parlamentarios.
En la Noche Buena de 1990, Bouterse encabezó otro golpe de Estado, pero pacífico.
En 1991, el PND obtuvo 12 escaños y se convirtió en el partido con mayor representación parlamentaria. En las últimas elecciones, celebrada ene 1996, logró 16 escaños. Bouterse confía en que logrará una votación aun mejor el año próximo.
El PND parece tener la mayoría de los votos en este país sudamericano de medio millón de habitantes.
El Partido Progresista de la Reforma y el Partido Nacional de Suriname, los dos más antiguos, que representan a las comunidades india y africana desde hace varias décadas, perdieron en 1996 la mitad de sus votos, que fueron a dar al PND.
Bouterse suele afirmar que él fue quien dio la mayor contribución para aliviar las tensiones étnicas en este país. Su partido cuenta con afiliados de todas las comunidades surinamesas.
"El partido ya tomó una decisión" sobre la candidatura de Bouterse, declaró Humphrey Hasrat, su ex compañero del ejército y actual embajador de Suriname ante los países del Caribe.
Holanda solicitó a Interpol (Policía Internacional) la captura de Bouterse. Por eso, no se sabe cómo hará el líder del PND para viajar al exterior en caso de ser elegido presidente, pero eso no lo inquieta por ahora.
Diplomáticos de Estados Unidos en Suriname manifestaron dudas sobre la contundencia de las pruebas contra Bouterse, que incluyen la denuncia de la existencia de un laboratorio de cocaína en lo alto de una montaña del interior de este país.
Bouterse recordó que el arroyo Kola, donde, según la justicia holandesa, se ubicaría ese laboratorio, está en las afueras de Paramaribo, en una llanura, cerca del aeropuerto internacional.
"Cuando se habla del interior de Suriname, hay que pensar en selva. La geografía no cuadra. No es un buen lugar para instalar un laboratorio. Todo esto es una batalla con los holandeses. Ahora son drogas. Antes éramos comunistas, pero eso ya no está de moda", ironizó.
El candidato explicó que su riqueza, que incluye una lujosa residencia en el barrio rico del norte de Paramaribo, se origina en las concesiones de oro y madera que tuvo en el pasado, la cual le sirvió también para financiar al PND mientras se mantuvo en la oposición, entre 1987 y 1996.
Parte del dinero procede también de una empresa de transporte marítimo que aún posee, dijo.
Bouterse sostuvo que el actual gobierno fracasó y perdió credibilidad por corrupto e inepto, y por ese motivo él se unió a las organizaciones de la sociedad civil que reclaman la renuncia del presidente Wijdenbosch y de su gabinete, para cambiar antes de que sea demasiado tarde.
Varios empresarios que percibieron la posibilidad de que el PND gane las próximas elecciones obsequiaron bebidas, comida y dinero a Bouterse cuando festejó sus 50 años.
Durante el régimen de Bouterse en los años 80, desaparecieron o murieron más de 200 personas por razones políticas, según Stanlwy Rensh, conductor de Moiwana 86, principal organización de derechos humanos de Suriname.
"Nos gustaría que eso se investigara. Siempre sostuvimos que sólo de ese modo se podrá curar a la sociedad", declaró Rensch a IPS. (FIN/IPS/tra-en/bw/cb/ceb/mj/ip hd/99
