Muchos países de la Comunidad del Caribe atraviesan dificultades económicas atribuibles al descenso del turismo y la caída de los precios de las materias primas.
El primer ministro granadino Keith Mitchell anunció que el crecimiento económico de Granada llegará al seis por ciento este año, lo cual es una excepción en la región.
La economía de Barbados, que figura entre las más estables de la región, se está enlenteciendo y amenaza aguar la aplastante victoria del gobernante Partido Laborista en las elecciones de enero.
El turismo descendió por primera vez en cuatro años y obligó a modificar a la baja las proyecciones de crecimiento. El presidente del Banco Central, Marion Williams, manifestó su inquietud por la situación.
Williams informó al parlamento de un aumento de 6,5 millones de dólares en las reservas de divisas en el primer trimestre del año y dijo que el incremento esperado este año se deberá "sólo a los préstamos que recibió el gobierno del mercado regional de capitales".
El crecimiento en el sector manufacturero de la isla se frenó, y el sector de la construcción descendió de 20,7 por ciento en el primer trimestre de 1998 a 4,5 en el mismo período de este año.
Así mismo, la economía de Jamaica experimentó un crecimiento negativo promedio de 1,7 por ciento durante los últimos 26 años.
En el último bienio se redujo la actividad de más de 50 instituciones financieras, muchas cerraron sus puertas o fueron intervenidas por el gobierno porque ya no eran viables.
El sector manufacturero también está en descenso tras el cierre de numerosas fábricas de tejidos el año pasado.
"El desafío que enfrentamos todos nosotros como jamaiquinos es la generación de crecimiento económico", escribió Delano Franklyn, consejero del primer ministro Percival Patterson.
Sin embargo, la recuperación económica no es un objetivo alcanzable a corto o mediano plazo. "Para mí, lo próximo es hallar la mejor manera de irme", dijo un gerente financiero.
Eso es lo que hacen muchos de los 123.000 jamaiquinos entre 17 y 30 años de edad que pueden comprar un pasaje de avión a Florida o Nueva York.
"La preocupación por el empleo está al centro de los esfuerzos del gobierno para promover la inversión, el crecimiento y la productividad", escribió Franklyn. "Si crece la economía, tambien emergerán nuevas oportunidades de empleo".
Las fluctuaciones del precio del petróleo obligaron al gobierno de Basdeo Panday, en Trinidad y Tobago, a solicitar la ayuda del Banco Central varias veces en los últimos 12 meses.
Ahora, un mes antes de que el ministro de Finanzas anuncie el nuevo presupuesto gubernamental y a 15 meses de las elecciones generales, el gobierno se enfrenta a la volatilidad del petróleo, los bajos precios de las materias primas y la creciente demanda para que las arcas del Estado satisfagan necesidades sociales.
Con las reservas extranjeras en 1.200 millones de dólares, el ministro de Finanzas Brian Kuei Tung indicó que el país está encaminado hacia el crecimiento, a pesar de la creciente presión de la comunidad empresarial para que bajen los impuestos y se mejore la infraestructura del país.
"Creo que pasamos una etapa y no deberemos retroceder a una situación seriamente deficitaria", dijo Kuei Tong al Senado el mes pasado. "Pero…a veces, con un golpe de pluma, un déficit puede transformarse en superávit, o viceversa".
En Guyana, el nuevo presidente Bharrat Jagdeo, cuya asunción al cargo se produjo hace pocas semanas tras la renuncia de Janet Jagan por razones de salud, está al frente de una economía que avanzó drásticamente al comienzo de la década, pero que se estancó a fines del siglo.
La economía de Guyana descendió el año pasado luego de un crecimiento promedio de 7,1 por ciento desde 1990. El descenso se atribuye a la mala situación comercial, la sequía causada por el fenómeno climático El Niño y los disturbios civiles que siguieron a las elecciones generales de diciembre de 1997.
Al finalizar el primer semestre de 1998, la economía tuvo un crecimiento negativo de 2,4 por ciento.
Un examen del desempeño económico de la región realizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas sugirió que para muchos países latinoamericanos y caribeños "las perspectivas (de desequilibrios fiscales) para 1999 no permiten esperar una mejoría". (FIN/IPS/tra-en/wg/cb/ego/aq/if/99