Venezuela vivió hoy un ambiente de tormenta política, tras la decisión de las autoridades electorales de sancionar al presidente Hugo Chávez por participar en la campaña para la Asamblea Constituyente, cuando faltan apenas 10 días para los comicios.
"Van a tener que meterme preso", dijo Chávez el miércoles de noche, como primera reacción ante las sanciones. Pero este jueves guardó silencio y, según versiones, estaría dispuesto a acatar los dispuesto por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El CNE ordenó la suspensión de los programas de radio y televisión del presidente, pidió a éste que se abstenga de participar en manifestaciones y le aplicó una multa entre 3.000 y 7.500 dólares por violar las reglas electorales.
Las sanciones fueron anunciadas tras reiteradas denuncias sobre la participación de Chávez en la promoción de sus partidarios entre los candidatos a la Asamblea Constituyente, que será elegida el día 25.
El presidente participó a comienzos de esta semana en una manifestación de sus partidarios frente a la sede del CNE, donde parado sobre una tarima, enseñó a los presentes cómo votar por los aspirantes del oficialista Polo Patriótico.
"Díganme dónde voy a pagar la multa, yo la pagaré", dijo Chávez en su primera y airada respuesta al CNE. "Vengan a ponerme una mordaza en la boca", desafió.
El presidente convocó a sus más cercanos colaboradores este jueves y según se informó, decidió acatar las disposiciones del CNE.
Entretanto, los partidarios de Chávez reaccionaron indignados ante las sanciones, y anunciaron que realizarán una colecta nacional, porque "el pueblo venezolano va a pagar la multa" del mandatario.
El ministro de Relaciones Exteriores, José Vicente Rangel, uno de los principales asesores políticos del presidente, consideró que la prohibición de los programas constituye "una situación surrealista".
"El gobierno no censura a nadie, y ahora vienen a censurar al presidente", dijo Rangel, al referirse al programa televisivo de los jueves "De Frente con el Presidente", y al que se transmite por radio los domingos, "Aló Presidente".
La presidenta del canal estatal Venezolana de Televisión, Mary Pili Hernández, acudió al CNE con grabaciones del programa de Chávez para demostrar que el mandatario no hace campaña, y acusó al consejo de intentar imponer "censura previa".
La participación de Chávez en la campaña electoral ha sido motivo de constante conflicto en el último mes, y el CNE aclaró haber dispuesto las sanciones por considerar que el presidente realiza una "intromisión permanente" en el proceso hacia los comicios.
El CNE ya había prohibido la difusión de algunos especios de propaganda de radio y televisión en los que los aspirantes eran respaldados abiertamente por el presidente.
Y todos los días, los periódicos divulgan el llamado a votar por "las llaves de Chávez", con instrucciones a los ciudadanos para marcar las listas según el lugar en que voten.
El presidente aseguró que "las llaves" de candidatos del Polo Patriótico son presentadas por su esposa Maria Isabel de Chávez, quien también es aspirante a la Constituyente.
La Asamblea Constituyente estará formada por 131 miembros, que deberán redactar una nueva Constitución para comienzos del 2000.
Los electores venezolanos deberán escoger a 128 de esos delegados entre 1.159 candidatos. Los otros tres constituyentes representarán a los pueblos indígenas y serán seleccionados en forma separada, durante una asamblea nacional este fin de semana.
La redacción de una nueva Constitución es el principal proyecto político de Chávez, quien aspira a refundar la democracia venezolana. (FIN/IPS/lc/ff/ip/99