La muerte de varias adolescentes a causa del sida (síndrome de inmundodeficiencia adquirida) en el hospital Connaught, el principal de Sierra Leona, destacó la expansión de la enfermedad en este país desgarrado por la guerra.
Informes de prensa atribuyeron la extensión de la epidemia a las actividades de los insurgentes, que a menudo se caracterizan por "las atrocidades y la violación de adolescentes por parte de pandillas".
"La mayoría de las víctimas contrajeron la enfermedad a causa de la invasión de Freetown por parte de los rebeldes en enero", afirmó el periódico local Para el Pueblo, tras la muerte de las adolescentes a fines del mes pasado.
El médico Andrew Kosia, responsable de Programa Nacional de Control del Sida, sostuvo sin embargo que la difusión de la enfermedad no se debe solamente a la invasión de enero.
Kosia reveló que "sólo entre los combatientes regulares hay 40 por ciento de infectados" por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), que causa el sida, y afirmó que las causas deben atribuirse a "los ocho años que ha durado la guerra civil".
En un país donde existe más de 80 por ciento de analfabetos, y la pobreza y la enfermedad se han vuelto hechos de la vida cotidiana, cabe esperar que el sida se extienda con rapidez.
"Antes de que estallara la guerra en 1991, las víctimas del VIH/sida eran menos de 500 personas, y ahora han llegado a más de 50.000". explicó Kosia.
Se piensa que la epidemia es aun más grave en el interior del país, donde 80 por ciento de la población vive en territorios controlados por los insurgentes.
"Donde los rebeldes gobiernan, es tal la incidencia de la adicción a drogas inyectables, la homosexualidad y las violaciones por parte de pandillas, que la situación podría ser peor que en la capital", dijo una enfermera que escapó hace poco del territorio controlado por los rebeldes.
La mujer, que no quiso ser identificada por razones de seguridad, dijo a IPS esta semana que "hay cientos de portadores del VIH en la población septentrional de Makeni", a unos 150 kilómetros de Freetown.
"Se confirmó mediante exámenes que esas personas son VIH positivas, pero fue poco lo que pudimos hacer al respecto", añadió.
Participantes en campañas contra el sida en la capital señalaron con amargura que todos los avances en el combate a la enfermedad han sido contrarrestados.
"La invasión de enero revirtió los logros del asesoramiento con base en las comunidades, la distribución gratuita de preservativos y los programas de concientización en los centros de enseñanza. Ahora la situación está empeorando", aseguró Kosia.
El Ministerio de Salud y Sanidad declaró que la epidemia es "una emergencia" y las campañas contra el sida se dirigirán ahora, en forma prioritaria, a más de un millón de desplazados internos, alojados en su mayoría en campamentos de refugiados de todo el país.
Tras la invasión de los insurgentes a la capital, que causó la muerte de más de 4.000 personas y el desplazamiento de decenas de miles, la unidad de asesoramiento y las salas de admisión del hospital de Lakka, al oeste de la ciudad, cesaron sus actividades habituales.
Allí se atendía a personas que habían sido mutiladas por los rebeldes y a enfermos de sida.
Los expertos predicen que la extensión masiva del sida será un problema central en la reconstrucción del país tras el conflicto armado, al cual se intenta poner fin en las conversaciones de paz que mantienen en Lomé representantes del gobierno de Sierra Leona y de los rebeldes.
"Espero que la autoridades se ocupen con seriedad del problema candente en que se ha convertido el sida, porque de lo contrario la enfermedad causará estragos en las generaciones más jóvenes", comentó Kosia.
Africa, con sólo diez por ciento de la población mundial, tiene 70 por ciento de los 30,8 millones casos de VIH/sida detectados en el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Cada día se registran 16.000 nuevos casos de VIH/sida en el mundo, y 7.500 de ellos están en el continente africano", informó el médico Ibrahim Samba, director regional de la OMS para Africa.
A fines de 1997 había casi nueve millones de adultos con sida en el continente, incluyendo a cantidades similares de hombres y mujeres, y los niños nacidos con la enfermedad eran 1,5 millones. Unos siete millones de esos adultos y niños murieron desde entonces, añadió Samba.
El conflicto de Sierra Leona comenzó en 1991, cuando Foday Sankoh, un ex cabo del Ejército, se puso al frente de un grupo guerrillero para derrocar al entonces presidente Joseph Momoh.
Desde entonces, más de 30.000 personas murieron en la guerra, y se estima que la cuarta parte de los habitantes del país, que ascendían a un total de 4,5 millones, se dispersaron como refugiados en países vecinos. (FIN/IPS/lf/mn/mp/he ip/99