COMERCIO: OMC arriba a difícil compromiso para elegir su director

La Organización Mundial del Comercio (OMC) designará con toda probabilidad esta semana a su nuevo director general mediante una fórmula de transacción satisfactoria para las dos facciones que disputaban el cargo desde hace casi 10 meses.

El entendimiento se logró este martes durante una reunión informal del consejo general de la institución, que otorgó consenso al nombramiento de los dos candidatos en lisa, el neocelandés Mike Moore y el tailandés Supachai Panitchpadki.

El avenimiento establece que el mandato del nuevo director general se dividirá en dos términos de tres años cada uno, que Moore desempeñará primero, a partir del 1 de septiembre próximo, y Supachai a continuación, desde el 1 de septiembre del 2002.

Las bases del acuerdo, que debe ser ratificado esta misma semana, contemplan algunas modalidades novedosas para la OMC que reflejan la capacidad negociadora de los países en desarrollo, en gran medida sostenedores de la candidatura de Supachai.

En el debate sobre la designación de los cuatro vicedirectores generales predominó el principio de lograr un equilibrio geográfico, que introduce en la OMC el criterio de distribución del poder por regiones, vigente en otros foros internacionales.

En una iniciativa que obtuvo amplio respaldo, el representante de Brasil, Celso Amorin, propuso que el reparto de las vicedirecciones se realice de manera balanceada entre países en desarrollo y países industriales.

Nacer Benjelloun-Touimi, jefe de la misión de Marruecos, compartió el criterio de designar cuatro vicedirectores conforme a un equilibrio geográfico en la distribución y reclamó que uno de esos cargos corresponda al continente africano.

El nombramiento de los vicedirectores se efectuará en septiembre, cuando Moore haya asumido las funciones.

Sin embargo, se espera que el actual presidente del consejo general, el tanzanio Ali Said Mchumo, establezca esta misma semana, en una declaración de la presidencia, las pautas para esas designaciones.

El proceso de elección del nuevo director general de la OMC se arrastra desde octubre pasado, cuando se presentaron las candidaturas de Moore y Supachai, junto con las del marroquí Hassan Abuyoub y del canadiense Roy MacLaren.

Una primera selección descartó a MacLaren y Aboyoub, pero las consultas subsiguientes solo consiguieron polarizar a las representaciones de los 134 países miembros de la OMC entre las candidaturas de Moore y Supachai.

Cuando el ex director general, el italiano Renato Ruggiero, abandonó las funciones el 30 de abril pasado, se abrió un período de acefalía en la OMC que comenzó a causar inquietud entre los negociadores comerciales.

Las preocupaciones se agrandaron porque la organización se encuentra en una etapa de preparación de su tercera conferencia ministerial en noviembre próximo, en Seattle, Estados Unidos.

Esas dos circunstancias impusieron la decisión de arribar a la solución salomónica, inédita en las instituciones internacionales, de dividir en dos períodos el mandato de la máxima autoridad y repartirlo entre sendos candidatos.

"Para todos los países era importante llegar a una solución que por lo menos nos permitiera desenvolvernos con el trabajo normal", explicó Federico Cuello, representante de la República Dominicana.

La solución encontrada deja muchas lagunas de naturaleza procesal y legal, admitió Amorin, "pero Brasil no obstaculizará la formación del consenso", método que emplea la OMC para la adopción de sus resoluciones.

La mayoría de las delegaciones compartió en la práctica las objeciones de la representación brasileña, como también la misma resignación a aceptar "el mal menor".

Rita Hayes, jefa de la misión de Estados Unidos, estimó que el texto del acuerdo "no es perfecto", pero debido a que se presentaron candidatos tan calificados "no es difícil entender que se presentaran tantas dificultades para arribar a un compromiso".

El proceso de elección del director general evidenció las falencias legales de la estructura de la OMC, que carece de normas explícitas sobre la designación de ese funcionario.

Amorin aludió a esas lagunas como "un problema estructural". Aunque la OMC es una institución internacional, tiene la estructura de su antecesor, el Acuerdo General de Aranceles Aduaneros y Comercio (GATT), que funcionaba "como un club privado", lamentó el representante brasileño. (FIN/IPS/pc/mj/if/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe