CARACAS – La administración de justicia en Venezuela quedó sometida a un profundo cambio, con la aplicación a partir de hoy, 1 de julio, de un nuevo código penal.
La presidenta de la Corte Suprema de Justicia, Cecilia Sosa, advirtió que el código reemplazará un sistema que tuvo "poco aprecio por la dignidad humana".
El máximo tribunal venezolano realizó una sesión especial para el lanzamiento de "una nueva cultura judicial", cuya razón de ser es "la protección de la dignidad humana", tanto de las víctimas como de los procesados.
La modernización de la justicia había sido planteada como una necesidad imperante para Venezuela, un país cuyas cárceles albergan a más de 22.000 personas, de las cuales al menos unas 9.000 aún esperan sentencia.
La proporción se redujo ante la llegada del nuevo código, pues el año pasado, 75 por ciento de los presos aún figuraban sólo como "procesados".
Juicios orales, acusadores y defensores públicos, participación ciudadana y, sobre todo, agilización de los procesos, forman parte de la oferta para un sistema en el cual la libertad será la regla y la detención la excepción. —-