/BOLETIN-DD HH/ PACIFICO SUR: Derechos femeninos contradicen tradición y religión

Ocho de los 12 países independientes del Pacífico Sur evitan ratificar la convención de la ONU sobre derechos femeninos, firmada hace 20 años, pues la consideran contraria a sus tradiciones y creencias religiosas.

De los cuatro países de la región que ratificaron la Convención para la Eliminación de Toda Forma de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW), Fiji lo hizo con reservas. Los otros tres son Papua- Nueva Guinea y Vanuatu, de la Melanesia, y Samoa, de la Polinesia.

Por otra parte, tres territorios franceses de ultramar y tres países libremente asociados a Nueva Zelanda son parte de la Convención porque Francia la ratificó en 1983 y Nueva Zelanda en 1984.

En total, 163 países de los 185 que integran la ONU (Organización de las Naciones Unidas) ratificaron la CEDAW, y el foro mundial se propone conseguir la ratificación universal para el año próximo.

Pero en el Pacífico Sur, e incluso en los países que ratificaron la convención, las mujeres siguen luchando contra la violencia doméstica y las leyes y las diversas prácticas culturales, que a veces entran en colisión con la CEDAW.

"La Convención es sólo un medio para conseguir un fin", declaró Emele Duituturanga, asesora sobre Desarrollo de la Oficina de Recursos para la Mujer del Pacífico.

"La ratificación es apenas el comienzo. En sí misma, no hará que se respeten los derechos de la mujer de la noche a la mañana. Está claro que la implementación es un desafío mayor que la ratificación", sostuvo.

Fiji, cuya Constitución, adoptada el año pasado, establece la creación de una Comisión de Derechos Humanos, cree que la CEDAW podría contradecir sus patrones culturales y sociales, y duda de que las mujeres tengan los mismos derechos que los hombres para adquirir, cambiar o mantener su nacionalidad.

El artículo 5 (a) de la Convención "es contrario a nuestros valores culturales y normas sociales de comportamiento", declaró un funcionario del gobierno, pues en Fiji solo los hombres tienen derecho a convertirse en jefes o "ratu".

Por otra parte, la Constitución trata de manera diferente a los hombres y las mujeres que se casan con extranjeros, lo cual dificulta la adopción del artículo 9 de la Convención.

La esposa extranjera de un hombre de Fiji obtiene la ciudadanía de su marido al casarse, pero no sucede lo mismo para el hombre extranjero que se casa con una mujer de la isla.

Los funcionarios del gobierno se mostraron optimistas en cuanto a la posible revisión de esos puntos, pero la Constitución no hace menciones específicas a los derechos de hombres y mujeres que se casan con extranjeros.

"El Estado no puede hacer eso. El cambio debe proceder de la evolución de la sociedad", declararon los representantes de Fiji en unas jornadas de información y supervisión de la CEDAW, realizadas el año pasado.

Las costumbres son fuente de derecho en muchos países del Pacífico Sur, y será muy difícil hacer que cambien sin que se planteen dudas, advirtieron los expertos.

"Es posible que algunos países del Pacífico Sur tengan temor de que la CEDAW viole su derecho a la libertad de culto", señaló Jane Connors, funcionaria de la Convención, en Nueva York.

"Muchas veces surgen conflictos entre la religión o la cultura y los derechos de la mujer. Es importante mantener todas las prácticas culturales y religiosas buenas, e intentar eliminar aquellas que no respetan los derechos de las mujeres", recomendó Connors.

Otro de los obstáculos para la implementación de la Convención es que muchos en el Pacífico Sur no entienden el sentido de ratificarla. Cerca de 80 por ciento de los habitantes de la región viven en pueblos rurales remotos, ajenos a la discusión sobre asuntos legales e internacionales.

Pero los gobiernos alientan el debate de esos asuntos desde 1994, cuando se celebró la reunión de mujeres líderes en Nueva Caledonia, con la finalidad de adoptar una plataforma de acciones a favor de la mujer.

Los resultados de la reunión fueron presentados al año siguiente en la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, en Beijing.

Los gobiernos de la región comenzaron a crear ministerios u oficinas de la mujer a partir de 1995, y las organizaciones no gubernamentales que defienden los derechos femeninos estuvieron muy activas en los últimos años.

Uno de los problemas más persistentes es la violencia contra las mujeres. En las Islas Cook, un estado libre asociado a Nueva Zelanda, la policía y otros departamentos del gobierno derivaron a la justicia todas las denuncias de violencia doméstica que se hicieron el año pasado.

Las Islas Cook son el único país del Pacífico Sur donde la violencia doméstica es un delito. En el resto de los países, ese tipo de actos entran en el rubro de ataques, lo cual complica la elaboración de estadísticas de mujeres golpeadas por sus maridos en los hogares.

A pesar de esa dificultad, las investigaciones de los trabajadores sociales y las denuncias informales sugieren que golpear a las esposas es una costumbre extendida entre los hombres del Pacífico Sur, pero son muy pocas las mujeres que recurren a la policía.

El Consejo Nacional de la Mujer propuso en 1985 una ley al respecto, ya que entre 1984 y 1991 un alto número de los ataques eran sufridos por mujeres a manos de sus maridos.

La incidencia de maridos golpeadores más baja que se haya registrado fue 11 por ciento, en 1982, pero en otros años llegó a superar 75 por ciento de los ataques.

De 76 ataques intencionales a mujeres que se juzgaron en el tribunal de la capital de Vanuatu, 64 eran hombres que habían golpeado a sus esposas. La población total del país es de 190.000 habitantes.

Una conferencia realizada en febrero en Papua-Nueva Guinea reveló cifras igualmente inquietantes. El Centro de Crisis de la Mujer de Fiji indicó que es probable que una de cada cuatro mujeres de Vanuatu tenga un marido golpeador.

La mitad de las mujeres de Samoa Occidental tienen maridos abusadores, y la violencia contra las mujeres de Fiji aumentó 30 por ciento en los últimos cinco años. (FIN/IPS/tra-en/ap-hd- pr/et/js/ceb/mj/hd/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe