Una ola de refugiados provenientes de la República Democrática de Congo (RDC) que llegaron a Tanzania puso en peligro la seguridad alimentaria de los campamentos de refugiados, cuya reserva de alimentos es limitada, advirtió la Cruz Roja.
La agencia de ayuda humanitaria de Ginebra advirtió que su campamento de Lugufu, situado unos 90 kilómetros al este del puerto de Kigoma, sobre el lago Tanganika, alberga en este momento a cerca de 50.000 personas, pero los alimentos disponibles estaban previstos para unos 40.000.
La existencia de este problema fue confirmada por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), que señaló que el flujo de refugiados es continuo desde agosto del año pasado. Cientos de personas atraviesan el lago Tanganika hacia la costa este cada día.
La cantidad total de refugiados que llegaron desde agosto del año pasado a Tanzania provenientes desde la RDC (donde los rebeldes, apoyados por Ruanda y Uganda, intentan derrocar al presidente Laurent Kabila), llegó a 62.000 según el último informe mensual del ACNUR. Sólo en mayo llegaron 12.000 personas.
La batalla en el este de la RDC se intensificó en la última semana, ya que el gobierno congoleño bombardeó Uvira, un bastión de los rebeldes, por segunda vez en un mes, lo cual llevó al gobierno de Ruanda a retirar su anterior propuesta unilateral de cese del fuego.
Una misión de la Organización de las Naciones Unidas en Kivu, al sur, confirmó los relatos de los refugiados sobre la destrucción de ese pueblo y el desplazamiento masivo de población.
Tanzania, que alberga la mayor cantidad de refugiados de la región, también recibió a más de 360.000 desplazados de Ruanda y de Burundi que viven en los campamentos.
Los ruandeses huyeron de su país luego de abandonar sus hogares en 1994 a causa de la masacre, a manos de milicianos extremistas de la etnia hutu, de al menos 800.000 personas, que eran integrantes de la etnia tutsi y moderados de la propia etnia hutu.
El agua escasea en los campamentos a causa del exceso de refugiados, y existe peligro de que se registren casos de cólera o de sarampión (ya que hay una epidemia de esta última enfermedad en la región).
"El mundo ya casi se olvidó de ellos, pero aquí llegan cada vez más refugiados. Necesitamos fondos con urgencia para ellos", declaró la Cruz Roja.
El Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), que distribuye comida en los campamentos, explicó que el equipo que atiende la región se vio obligado a reducir entre 20 y 30 por ciento las raciones de alimentos debido al exceso de refugiados.
"Esto no podía haber ocurrido en peor momento", dijo Irene Lacy, una representante del PMA en Tanzania.
"La situación nutricional de los refugiados ya ha llegado al límite. En algunos campamentos hay casos de anemia, y si además se contagian de malaria, quedarán en estado grave", advirtió.
El PMA señaló que si se siguen reduciendo las existencias de legumbres, arvejas secas y alubias, podría estallar la violencia en los campamentos.
"Ya tuvimos escándalos en otras ocasiones en que fue preciso reducir las raciones. Una sucesión de reducciones se hace muy peligrosas", explicó Lacy.
El PMA pidió una donación de 13 millones de dólares para mejorar entre junio y septiembre las raciones de alimentos en la región de los Grandes Lagos, integrada por Burundi, RDC, Ruanda, Tanzania y Uganda.
Además de los refugiados en campamentos de Tanzania, en esa región hay unos 900.000 desplazados internos de Burundi, Ruanda y Uganda.
Se planea emplear el dinero para comprar unas 20.000 toneladas de alimentos y pagar los costos de su transporte y distribución. El PMA declaró que necesitará las donaciones en efectivo en julio, para evitar una crisis en agosto.
El pedido surgió apenas dos semanas antes del Día de los Refugiados de Africa, que el 20 de junio de este año será también la conmemoración del 25 aniversario de una convención sobre aspectos específicos del problema de los refugiados africanos, puesta en vigencia por la Organización de la Unidad Africana.
La convención, basada en las leyes internacionales sobre los refugiados, incluye el principio de la repatriación voluntaria y el de la colaboración para asumir la carga económica que implican los refugiados, por el cual los países que los albergan pueden pedir ayuda a sus vecinos.
Africa alberga a 7,6 millones de refugiados y desplazados, más de un tercio del total mundial de 21,2 millones. (FIN/IPS/tra- en/ja/mn/ceb/mp/hd pr ip/99