En sólo 40 segundos se dañaron siglos de historia de México, sacudido este mes por dos sismos que fracturaron numerosos monumentos cuya restauración requerirá millonarias inversiones, según estimaciones iniciales.
El sismo de 6,7 grados en la escala de Richter que el día 15 afectó siete estados y la ciudad de México provocó la muerte de 17 personas y dañó 5.000 inmuebles, de los cuales más de cien forman parte del patrimonio cultural. El segundo, el día 21, de menos de seis grados, acentuó los daños.
Para la reparación de los monumentos históricos se creó un fondo especial con la participación de los gobiernos federal, estatal y municipal, anunció el presidente Ernesto Zedillo.
La reconstrucción de edificios históricos del estado de Puebla, el más afectado por los movimientos telúricos, demandará unos 100 millones de dólares, según un primer balance de autoridades de antropología e historia.
La ciudad de Puebla, capital del estado del mismo nombre, fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) aspira a que el organismo constribuya a la restauración.
El delegado de INAH en Puebla, Francisco Ortiz, informó que se elaboró una lista de los sitios que serán recuperados, según la importancia de los mismos.
Para que la Unesco intervenga en las labores de reconstrucción de la ciudad de Puebla deberá comprobarse primero que su patrimonio se encuentra en grave riesgo.
El secretario general del Comité Internacional de Monumentos y Sitios, Ernesto Becerril, dijo que la capital poblana deberá ser declarada Patrimon0io Mundial en Peligro, para que la Unesco entregue recursos para rehabilitarla.
Un total de 17 zonas o bienes, culturales o naturales de México, forman parte del Patrimonio Cultural de la Humanidad, condición que podría ser otorgada este año a la sudoriental ciudad de Campeche, capital del estado del mismo nombre.
Desde el primer momento, el INAH envió arquitectos, restauradores y catalogadores a los estados de Veracruz, Hidalgo, Tlaxcala, Morelos, Oaxaca, Guerrero y Puebla para efectuar diagnósticos sobre el impacto del temblor.
Pero al INAH compete sólo aprobar y ofrecer asesoría a los proyectos de reestructuración técnica, que estarán a cargo de los organismos que tengan bajo su resguardo las obras del patrimonio nacional dañadas.
El recuento de daños marchaba entre algunas disputas causadas porque autoridades municipales permitieron la entrada de maquinaria pesada en ciertos monumentos para recoger escombros y los riesgos de actos de pillaje en construcciones que quedaron a la interperie.
Los monumentos que requieren intervención con urgencia en Puebla son el palacio de Justicia, las oficinas de Correos, la Biblioteca Palafoxiana, el Museo José Luis Bello y el edificio Carolino, símbolo de la Universidad Autónoma de Puebla construido hace 412 años.
El templo dominico del siglo XVI ubicado en el estado de Oaxaca, en el sur del país, una capilla abierta que posee pinturas de gran valor histórico, resultó dañado junto con otros 18 edificios de la región.
En el estado de Morelos, colindante al sur con la ciudad de México, un número aún no determinado de construcciones, la mayoría iglesias erigidas entre los siglos XVII y XIX, sufrieron daños que van desde fisuras leves hasta caída de cúpulas.
Según el recuento de daños realizado, los sismos fracturaron 18 monumentos en Tlaxcala, dos en Guerrero y 60 en Puebla. (FIN/IPS/pf/ag/cr/99
