Los presidentes Carlos Menem, de Argentina, y Fernando Henrique Cardoso, de Brasil, deberán reunirse tres veces en menos de un mes. Pero como tienen mucho de que hablar, añadieron una cuarta cita el lunes próximo en esta capital, en privado y sin temario preestablecido.
No obstante, funcionarios de la cancillería argentina estiman que los mandatarios abordarán algunos asuntos pendientes del Mercado Común del Sur (Mercosur) y la posición del bloque ante la Unión Europea por los subsidios agrícolas.
El azúcar es uno de los temas comerciales más conflictivos del Mercosur, integrado también por Paraguay y Uruguay.
Brasil, uno de los principales productores de azúcar del mundo, aplica subsidios a través de un programa de estímulo a la producción de alcohol de caña para combustible, según demostraron los productores argentinos.
Menem advertirá a Cardoso que, a raíz de la devaluación del real en enero, las economías regionales argentinas se encuentran en crisis, lo que obligará a suspender la desgravación arancelaria anunciada para ir liberalizando el comercio azucarero en los próximos años.
También se afirma que será de la partida el tema del régimen automotor común del Mercosur para el próximo año, que mantiene en reuniones casi permanentes desde hace meses a funcionarios de los dos gobiernos y empresarios del sector y de autocomponentes.
Las quejas por la decisión brasileña de exigir a los productores argentinos de alimentos un registro ante la Secretaría de Salud de Brasil que cuesta entre 1.200 y 3.600 dólares por producto y cuyo trámite se demora siete meses serán parte del diálogo.
Y también se abordará el incumplimiento de Brasil del compromiso asumido en diciembre de reconocer los certificados de calidad emitidos por los organismos de control sanitarios de los dos países.
Estos dos últimos temas son considerados trabas inaceptables al comercio por parte de Argentina.
Menem y Cardoso, que coincidieron el último fin de semana de mayo en México durante la cumbre del Grupo Río, volverán a encontrarse el 12 y 13 de este mes en Asunción, en una cumbre del Mercosur, y del 27 al 29 en Río de Janeiro, en la Cumbre América Latina y Caribe-Unión Europea.
Pese a estas frecuentes citas, que podrían constituirse en oportunidades de diálogo, Menem y Cardoso colocaron en sus nutridas agendas una reunión bilateral en privado el lunes próxmo, que durará dos horas y se llevará a cabo en la residencia presidencial de Olivos, en Buenos Aires.
La confluencia de cuestiones pendientes de resolución en el Mercosur y la aceleración de la crisis financiera en los dos países, decidió a los presidentes a dar una señal de entendimiento a través de un encuentro exclusivo.
La fecha de la reunión, que fue anunciada públicamente por Cardoso en Washington durante una visita oficial a Estados Unidos, tomó por sorpresa a las cancillerías de ambos países.
Según referencias de funcionarios de Argentina, Menem y Cardoso podrían dialogar el lunes sobre la posición que defenderá el Mercosur ante la Unión Europea en la cumbre de Río de Janeiro, en materia agrícola.
Se supo que la Unión Europea no traerá propuestas en ese capítulo, el más sensible a los intereses económicos del Mercosur, que es considerado clave para avanzar en una zona de libre comercio entre los dos bloques.
Cardoso, a quien le restan tres años de gobierno, podría compartir con Menem, que deja el poder en seis meses, su preocupación por la vulnerabilidad de los mercados de ambos países ante los rumores de una devaluación del peso argentino.
Los numerosos temas que circulan en el entorno son considerados clave para avanzar en la integración. Pero en definitiva, sólo Menem y Cardoso saben qué es lo que se definirá en ese encuentro privado, decidido sin la habitual mediación de sus ministros. (FIN/IPS/mv/ag/ip-if/99