Los jefes de Estado y de gobierno de América Latina, el Caribe y la Unión Europea (UE) plantearán este martes un mayor equilibrio de poder entre la Asamblea General de la ONU y el Consejo de Seguridad, acordaron hoy los cancilleres de las tres regiones en esta ciudad de Brasil.
La decisión no fue tomada sobre bases "abstractas o teóricas", sino a raíz de la guerra entablada por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) contra Yugoslavia, d ijo el presidente de la Asamblea General de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), Didier Opertti.
"Kosovo probó que el sistema no ha funcionado y que es necesario restablecerlo", afirmó Opertti, que participa en su carácter de canciller de Uruguay en las instancias previas a la Cumbre de América Latina, el Caribe y la UE, que se celebrará este lunes y martes.
El ministro uruguayo aseguró que su par británico, Robin Cook, fue partícipe activo en el consenso alcanzado en Río de Janeiro. Gran Bretaña integró la fuerza que bombardeó Yugosla via desde el 24 de marzo hasta el 10 de junio.
Los cancilleres de América Latina, el Caribe y la Unión Europea (UE) concluyeron este domingo la elaboración de los dos documentos finales a ser refrendados por los jefes de Estado y de Gobierno este lunes y martes.
La Declaración de Rio, con diez páginas, y el Plan de Acción Conjun ta, con nueve, contendrán los resultados centrales de la Cumbre de América Latina, el Caribe y la UE.
La Declaración y el Plan de Acción que emergerán de la Cumbre de Río de Janeiro son documentos "vivos, no bíblicos, que nos van a permitir fortalecer las relaciones entre nosotros y constituir una asociación estratégica", dijo la canciller de México, Rosario Green.
La promoción de mecanismos que permitan reducir los riesgos y las turbulencias financieras provocadas por los flujos de capitales golondrina es uno de los temas de consenso entre los 33 países de América Latina y el Caribe y los 15 de la UE.
El combate al narcotráfico, sobre la base del concepto de responsabilidad compartida entre países productores, de tránsito y consumidores, también integra del acercamiento interregional, que se pretende impulsar tanto en el comercio y las inversiones, como en las áreas política y social.
El narcotráfico ya constituye un elemento importante en las relaciones entre la UE y los países andinos, que para combatir la producción de cocaína, por ejemplo, tienen mayor acceso al mercado europeo para algunos de sus productos agrícolas, con preferencias especiales.
En esa área como en la ayuda al desarrollo y en el comercio, la UE no impone condicionantes, sino que trata de estimular prácticas que considera correctas, ofreciendo beneficios adiciohnales, explicó Manuel Marín, vicepresidente de la Comisión Europea, principal órgano ejecutivo de la UE.
La Declaración de Río no mencionará la eventual ampliación del Co nsejo de Seguridad, pues se limita a plantear la "reforma de las Naciones Unidas", la cual "no radica en aumentar el número de miembros del Consejo, sino en modificar" las relaciones entre este órgano y la Asamblea General, explic ó Opertti.
Varios países europeos, como Alemania e Italia, así como Japón, han postulado la ampliación del actual Consejo de Seguridad, compuesto por las cinco potencias nucleares (China, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Rusia), como miembros permanentes con poder de veto, y otros 10 miembros rotativos.
La Asamblea General de la ONU estuvo ausente del manejo de la crisis en marzo, cuando se precipitó la guerra en Yugoslavia. Washington y Londres, sus principales impulsores, evitaron pedir autorización al Consejo de Seguridad para lanzar el ataque.
Estados Unidos y Gran Bretaña temían que Rusia, principal aliado de Yugoslavia, y China, también opuesta a la guerra, hicieran uso de su poder de veto si se hubieran puesto a consideración los bombardeos en el Consejo.
Opertti reclamó entonces, sin éxito, la participación en la Asamble a General de la ONU en la búsqueda de solución al conflicto.
Entre los resultados no intencionales de la guerra figuraron la expulsión de 800.000 albaneses de Kosovo y la muerte de 1.200 civiles. Además, quedó destruida la infraestructura mili tar y civil de Yugoslavia.
"No se trata sólo de una agenda económica. Hay algunas concertacione s de naturaleza política de temas que le preocupan al mundo, como el sistema de seguridad internacional", sostuvo Opertti.
El párrafo 36 de la Declaración de Río de Janeiro, que será firmada el martes por 48 jefes de Estado y de gobierno de América Latina, el Caribe y la UE, "se refiere a la necesidad de no abandonar el multilateralismo" y de "fortalecerlo", informó Opertti en rueda de prensa.
La declaración plantea "fortalecer el sistema de Naciones Unidas, favoreciendo la relación interorgánica" entre los distintos cuerpos del foro mundial", explicó.
"La potencialidad de la ONU no puede residir sólo en el Consejo de Seguridad, que está integrado solo por 15 países, sino en una relación dinámica coordinada e institucionalizada entre el Consejo y los demás cuerpos, como la Asamblea General, el órgano más representativo" del foro mundial, agregó.
Hubo un esfuerzo de síntesis, pero salieron extensos, con "mas de 50 párrafos cada uno", reflejando todos "los principios en que hay acuerdo entre las dos regiones", incluso sobre la participación de la sociedad civil, aseguró Green.
En las discusiones al nivel de altos funcionarios, el viernes y sábado, hubo discrepancias en relación a la participación de la sociedad civil, en especial planteadas por Cuba, seg ún trascendidos.
Pero no hubo objecciones entre los cancilleres, dijo Green, sino discusiones limitadas a puntos en que algunos cancilleres querían "mayor precisión", informó Green. El Plan de Acc ión trata todas las áreas de cooperación, añadió.
"Todas las matizaciones de unos y de otros" en la materia "se han tenido en cuenta y al final se ha llevado a un acuerdo", sostuvo el canciller de España, Abel Matutes.
"La incitación, nunca la certificación" es la base de la política europea, al impulsar el combate al narcotráfico, senaló para distinguir esta estrategia de la desarrollada por Estados Unidos, que califica de forma unilateral, año a año, a los países de acuerdo con su colaboración en la materia.
En ese sentido, la UE no apoya la inclusión, en los acuerdos comerciale s de cláusulas sociales que impongan el cumplimiento de compromisos como la erradicación del trabajo infantil, ejemplificó Marín.
En relación al comercio, la Declaración de Rio afirmará el objetivo conjunto de reducir las barreras al intercambio, sin detallar los subsidios agrícolas europeos, blanco de las mayores queja s principalmente de los países miembros del Mercado Común del Sur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay).
Marín, entre otras figuras europeas, manifestó su preocupación por las fuertes desigualdades sociales en América Latina y el Caribe, que constituyen una de las grandes asimetrías entre esta región y la UE, además de las económicas y de nivel de integración.
Perseguir una mayor equidad interesa naturalmente a la región, pero también a la UE, incluso por cuestiones económicas, porque ampliaría el mercado con el cual se desea asociar comercialmente y que hoy tiene 200 millones de personas pobres, gran parte sin ningún poder de consumo.
El canciller de España, Abel Matutes, destacó que se tratará de alc anzar "progresos bilaterales" entre la UE y América Latina en materia comercial, además de los que se alcancen en el marco de la ronda de negociaciones que comenzará en noviembre en Seattle, Estados Unidos. (FIN/IPS/mo- mj/ip if/99)