Los presidentes del Mercosur resolvieron esta semana imponerse un plazo de cinco años para cerrar un acuerdo de liberalización comercial con la Unión Europea (UE).
La declaración presidencial, al término de la reunión realizada en Asunción el lunes y martes, pone como fecha tope el 2005 para que el acuerdo con la UE esté pactado, en coincidencia con la meta planteada el año pasado en Santiago para la constitución del Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA).
El mismo plazo está incluido en el acuerdo firmado, pero no en aplicación, entre el Mercosur y la Comunidad Andina de Naciones (CAN).
Los presidentes del Mercosur (Mercado Común del Sur) esperan que la cumbre América Latina y el Caribe-UE, a fines de mes en Río de Janeiro, sea una "oportunidad propicia para acordar el inicio del proceso de negociación hacia una asociación económica interregional de carácter político y económico".
Pero puntualizaron que "la agricultura constituye una parte esencial de las economías y del comercio internacional de los países del Mercosur", por lo que las tratativas "deberán comprender la liberalización recíproca de todo el comercio, sin exclusión alguna a priori de sectores o productos".
El presidente de Paraguay, Luis González Macchi, en ejercicio de la presidencia rotativa del Mercosur hasta el martes, pidió a sus pares al darles la bienvenida "un trato solidario para superar los graves desajustes" que produjeron los últimos incidentes políticos en su país.
Dos meses y medio atrás fue asesinado el vicepresidente Luis María Argaña, lo cual generó una crisis institucional que concluyó con la renuncia a la presidencia de Raúl Cubas, quien obtuvo asilo político en Brasil.
Los presidentes ratificaron el martes el carácter democrático de los gobiernos como "condición esencial" para ser miembro del Mercosur.
González Macchi dijo confiar en una amplia armonización de políticas macroeconómicas en la región como "reaseguro regional", en especial como protección de vaivenes cambiarios.
La ejecución de este principio servirá de "plataforma de sostén" que permita a los países "ejecutar su desarrollo", asumiendo que Paraguay "no está al ritmo de los desafíos actuales", agregó.
Ante la devaluación en enero del real, la moneda de Brasil, y la consecuente mejora de la competitividad de los productos de ese país frente a los del resto de la región, González pidió que "los países hermanos sepan dar atención preferente a la eliminación de obstáculos en el comercio externo" .
El comunicado conjunto de los presidentes, que cuenta con 26 puntos, manifiesta satisfacción por "la decisión de crear un grupo de trabajo de alto nivel para analizar las políticas económicas, presentar alternativas efectivas y practicas de coordinación macroeconómica".
Un cronograma de trabajo se confeccionará para "alcanzar en forma gradual la convergencia de políticas internas", a la vez que los demás órganos del Mercosur deberán "lograr avances significativos en la Agenda de Consolidación y Profundización" .
Los presidentes aceptaron la instalación de los tribunales arbitrales en el Edificio de la Municipalidad de Asunción, para aplicar el Protocolo de Brasilia que en 1993 reguló la solución de controversias, pero que aún no había sido implementado. Se trata del segundo organismo que se instala en Asunción.
También destacaron la aprobación del Programa de Asunción sobre Simplificación Operacional de Trámites de Comercio Exterior y de Frontera, y prometieron actuar en "forma conjunta y coordinada en la futura ronda de negociaciones" de la Organización Mundial de Comercio.
Los gobiernos acordaron elaborar un proyecto de marco normativo común sobre compras gubernamentales, para lo cual se extendieron el plazo hasta el 30 de noviembre.
También se comprometieron a destrabar en agosto la discusión sobre la liberalización del comercio intraregional de azúcar, sobre lo cual no existieron reuniones en todo 1999.
El Mercosur acordó derivar la consideración del problema del lavado de dinero, hasta hoy considerado en el Grupo de Triple Frontera, al subgrupo de trabajo sobre Asuntos Financieros
Mientras, los presidentes solicitaron la excepción a los socios del Mercosur de la próxima aplicación del Registro de Productos Alimenticios en Brasil. (FIN/IPS/cm/mj/ip if/99