Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay, Uruguay y Venezuela figuran en la lista de Estados Unidos de países observados por piratería de marcas comerciales y de derechos de autor o por no reprimir esa práctica.
El último informe del Representante de Comercio de Estados Unidos, difundido esta semana en La Paz, señala diversos grados de responsabilidad de los países sudamericanos observados.
El Representante de Comercio observa que Bolivia no aplica suficientes medidas legales para combatir la piratería comercial, y urge a las autoridades nacionales a acelerar esas acciones.
"Bolivia se mantiene en la lista de observación porque aún no ha dado los pasos adecuados para combatir la piratería de derechos registrados" ni para revisar su legislación "conforme a los estándares internacionales", señala el informe.
Y, en efecto, la piratería comercial y el desconocimiento de los derechos de autor dan lugar en Bolivia a un rentable negocio.
Siete de cada diez casetes y discos compactos que se venden en el mercado y nueve de cada 10 programas de computación utilizados por las empresas son copias ilegales, asegura la Asociación de Industrias Fonográficas de este país.
. Así mismo, siete de cada 10 prendas 'jean' entre las que se ofrecen en plaza llevan ilegalmente marcas internacionales, según el Viceministerio de Exportaciones, dependiente del Ministerio de Comercio Exterior e Inversiones.
Bolivia es consumidor de copias ilícitas y también país de tránsito de mercadería ilegal, por su situación geográfica, en el centro de América del Sur.
Un millón de discos compactos de música procedentes de Asia fueron incautados a principios de este año en Puerto Suárez, en la frontera con Brasil. El cargamento estaba destinado a Argentina, Brasil, Paraguay y al mercado de este país.
Ahora, el gobierno de Estados Unidos exige a Bolivia apresurar la promulgación de leyes para dar garantías a la industria fonográfica y a los otros sectores afectados por la venta de copias ilícitas.
Bolivia debe conceder "completa protección" a los derechos registrados en materia de grabaciones extranjeras, advirtió el Representante de Comercio, una oficina del Departamento de Estado.
Estados Unidos reconoce esfuerzos del gobierno boliviano para proteger la propiedad intelectual, pero los artistas nacionales dicen que si hay algunos éxitos en esa área se debe a iniciativas del sector privado y de los propios creadores musicales.
"Todo lo que sea lucha contra la piratería lo hacen los empresarios o los artistas, no el gobierno", aseguró el músico Oscar Castro, representante de los compositores e intérpretes de música.
Ilya Fortún, vicepresidente de la Asociación de Industrias Fonográficas, advirtió en declaraciones a IPS, que de no tomarse medidas rápidas contra la piratería, las empresas extranjeras abandonarán el país y el mercado interno de los casetes y discos compactos quedará en manos de los falsificadores.
El Representante de Comercio de Estados Unidos instó a Bolivia a promulgar legislación eficaz para proteger los derechos de autor y a acelerar la aplicación de medidas contra la violación de los derechos registrados.
El gobierno se propone presentar en julio un proyecto de ley para castigar la piratería comercial.
"Será un proyecto de ley absolutamente compatible con nuestra realidad socioeconómica, de manera que el país ingrese a formar parte de las estructuras sólidas del nuevo orden jurídico mundial", dijo el viceministro de Justicia, Juan Chahín.
Estados Unidos también observó a Argentina, por entender que su régimen de patentes no protege de modo adecuado y efectivo los derechos de la industria farmacéutica extranjera.
Así mismo, Brasil no dispone de legislación moderna en materia de propiedad intelectual para proteger los programas informáticos.
Chile, aunque es uno de los países sudamericanos de menor piratería comercial, mantiene normas inconsistentes de protección de patentes, señaló el Representante de Comercio.
En Colombia, las copias ilegales son un problema significativo, a pesar de los esfuerzos y la cooperación de la industria estadounidense.
En Paraguay, el gobierno ha dado importantes pasos, que incluyen un nuevo marco legal para los derechos de autor y la creación de un Consejo Nacional de Propiedad Intelectual. Pero la piratería y la falsificación han alcanzado niveles alarmantes en ese país, dice el informe.
En Uruguay, Estados Unidos observa el estancamiento de las iniciativas contra la falsificación de marcas y la copia de programas de computación.
"La revisión de los derechos registrados y la legislación de la propiedad intelectual de Uruguay ha permanecido indiferente por años. Su revisión es necesaria para que Uruguay acate las obligaciones internacionales", advirtió el Representante de Comercio.
En Venezuela, el informe señala deficiencias en el régimen de patentes de marcas de fábrica y protección inadecuada de patentes farmacéuticas. (FIN/IPS/ac/ff/if/99