SURINAME: Drástica depreciación de la moneda

La drástica devaluación que sufrió la moneda de Suriname esta semana hizo que el Banco Central acusara de especulación a los empresarios, pero otros acusan al gobierno de emitir dinero sin respaldo.

El dólar estadounidense equivale ahora a 1.300 guilders en el país sudamericano, uno de los precios más altos del hemisferio.

"El mercado cambiario está en pleno caos y necesita tranquilidad", declaró Wilbert Stanford, portavoz de la Asociación de Cambistas.

Hace seis meses, el dólar se cambiaba a 680 guilders, y hasta marzo, la equivalencia era de 1.000 guilders por dólar. Pero una devaluación de 100 puntos en un día, como ocurrió la semana pasada, llevó a la moneda a su precio actual.

En 1993, la tasa de cambio oficial era de 1,8 guilders por dólar.

El principal diario del país, De Ware Tijd, señaló en un editorial que las autoridades "no tienen una respuesta adecuada" para la crisis monetaria, y vincularon la depreciación de la moneda al aumento del gasto público debido a la construcción de dos grandes puentes fluviales.

Uno de los puentes une la capital y la región este del país con Guayana Francesa, y el otro enlaza a la parte occidental de Trinidad y Tobago con Guyana y el Caribe.

La depreciación causó el aumento en los precios de los alimentos, lo que incrementó la presión sobre los empleadores para que suban los salarios.

Algunas compañías con graves problemas para adquirir materia prima, que se paga en moneda extranjera, podrían cerrar, advierten los analistas.

"Todos los que tienen dinero en Suriname quieren comprar dólares lo antes posible", anunció el De Ware Tijd.

Los precios debilitados de las principales exportaciones del país, como la bauxita, la madera y el oro, y el reciente cierre de una fundición de bauxita por parte de Suralco, una subsidiaria de la firma estadounidense Aluminium Corporation of America, contribuyeron a agravar la situación.

El gobierno sufrirá una pérdida en sus ingresos de cerca de 40 millones de dólares, y 300 personas perderán sus empleos debido al cierre de la fundición, que operaba en el país desde hacía varias décadas, advirtió Humphrey Hasrat, embajador de Suriname ante el Caribe.

El gobierno, que sobrevivió el año pasado a varias huelgas de empleados públicos, imprimió guilders en secreto para pagar aumentos salariales a los 40.000 funcionarios del Estado, denunciaron observadores. Pero funcionarios del Banco Central rechazaron la acusación.

Winston Calderia, asesor del Ministerio de Finanzas, confirmó que "el gobierno puso gran cantidad de moneda en circulación" para cubrir los altos costos de personal y otros gastos.

Otros señalan que como consecuencia de la pérdida de confianza en la economía, los empresarios y la gente común convirtieron sus guilders en moneda fuerte.

Glenn Gersbie, del Banco Central, acusó a los empresarios de incrementar la especulación para ganar dinero rápidamente, lo que causó la devaluación de la moneda.

Los ciudadanos que viven en el exterior, entre los cuales hay 400.000 en Holanda, envían remesas de dinero en moneda extranjera a Suriname por valor de 400 millones de dólares por año. Muchas personas no quieren cambiar sus divisas a guilders.

Por su parte, el Banco Central empezó hace pocos días a pagar a los mineros el oro que extraen con moneda fuerte, con la esperanza de que vendan su producción dentro del país en vez de a los compradores de Brasil, que también pagan en moneda fuerte.

El presidente del Banco, Henk Goedschalk, declaró que esperan que ese dinero vuelva a entrar en el sistema, ya que los mineros tendrán que convertirlo a guilders para hacer sus compras.

Esto también podría alentar a los mineros a invertir la mayor parte de los 500 kilogramos de oro que se calcula produce por año la pequeña brigada de mineros del interior del país.

Pero la caída de la moneda continúa a pesar de las gestiones del gobierno. La negativa de algunos parlamentarios opositores a discutir un plan quinquenal de desarrollo nacional tampoco ayuda a mejorar la situación.

El clima ecónomico del país también se vio afectado por la destitución el mes pasado del ex presidente y asesor de gobierno, Desi Bouterse.

El presidente Jules Wijdenbosch pidió la renuncia de Bouterse, presidente del Partido Nacional Democrático, el más grande de la coalición de gobierno, luego de los desacuerdos públicos que se suscitaron entre ambos en los últimos tiempos.

Bouterse sigue presidiendo la coalición, pero ya no tiene un cargo oficial en el gobierno.

El gobierno espera que la recuperación económica provenga de las inversiones en madera y la industria del oro. Pero eso aún no sucedió.

Golden Star Resources de Estados Unidos, y Cambior Inc., de Canadá, suspendieron las obras en la mina Gross Rosebel, situada en el centro de Suriname.

La mina puede producir un mínimo de 2,4 millones de onzas de oro durante su período inicial de 10 años, pero la compañía espera que aumente el precio del oro para seguir con sus actividades.

Una onza de oro se vende a 282 dólares. Los funcionarios de la firma esperan que el precio aumente a 350 dólares por lo menos, en un futuro no tan lejano. (FIN/IPS/tra-en/bw/cb/ceb/aq/if/99

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe