El líder albano-kosovar Ibrahim Rugova, que busca una solución pacífica para Kosovo, instó hoy a Yugoslavia a aceptar la presencia de fuerzas internacionales en esa provincia para poner fin a la crisis de refugiados y a la guerra.
Rugova, que el miércoles llegó a Roma procedente de Belgrado, insistió en la demanda de "despliegue en Kosovo de fuerzas internacionales, de la OTAN y de otros países", y de "retiro de las tropas serbias".
"El primer objetivo es el restablecimiento de la seguridad en Kosovo", dijo Rugova, líder de la nacionalista Liga Democrática de Kosovo, en una conferencia de prensa que también tuvo participación del jefe del gobierno de Italia, Massimo D'Alema.
La presencia de una fuerza internacional de paz en Kosovo es "una condición esencial para crear seguridad" para quienes huyeron de esa provincia serbia de mayoría étnica albanesa y "para los que se quedaron" declaró.
Rugova, cuyo viaje a Italia fue autorizado por el gobierno de Yugoslavia, dijo que es indispensable formular un llamamiento a Belgrado para que acepte esa fuerza internacional.
La OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) intenta vencer con un incesante bombardeo la oposición del gobierno yugoslavo al despliegue de un contingente militar en Kosovo.
Todos los refugiados deben regresar a su hogar, para proceder luego a un proceso de "paz y reconciliación", afirmó Rugova, que fue elegido presidente de Kosovo en elecciones paralelas e ignoradas por Yugoslavia.
También señaló que mantuvo conversaciones con las autoridades de Belgrado para encontrar una solución política a la crisis de su provincia.
Así mismo, el Ejército de Liberación de Kosovo (UCK), enfrentado con las armas a las tropas yugoslavas, acepta una solución política y pacífica, aseguró.
"Yo soy un hombre de paz, de resistencia no violenta", dijo. "No hay conflicto étnico entre albaneses y serbios, sino sólo existe la represión de las fuerzas serbias contra los albaneses", agregó.
La mejor solución "sería la independencia de Kosovo, pero nosotros no hemos planteado la reunificación con Albania", dijo el líder de la LDK.
Por su parte, D'Alema afirmó que la paz está cerca. "No será mañana, ni esta tarde, pero hoy en día existe la posibilidad de una solución política sobre bases realistas" para la guerra de Yugoslavia y la cuestión de Kosovo.
"El hecho que Rugova viniera a Roma puede ser interpretado como una señal de Belgrado, una voluntad de negociación", conjeturó D'Alema.
El ministro de Relaciones Exteriores Lamberto Dini aseguró que "se abren posibilidades (de solución) que no se veían hace sólo algunos días", al referirse al resultado de la reunión en Berlín de los cancilleres de Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Italia, Japón y Rusia.
Los ocho ministros acordaron este jueves un plan de siete puntos para la crisis de Kosovo que promueve el despliegue en esa provincia de fuerzas civiles y militares apoyadas por la Organización de las Naciones Unidas. (FIN/IPS/jp/ff/ip/99