Gran cantidad de los 600.000 judíos marroquíes de Israel, tradicionales partidarios de la derecha, podrían cambiar su voto en las elecciones generales israelíes de este lunes y ayudar a derrotar al primer ministro Binyamin Netanyahu, pronosticaron analistas de Marruecos.
Los analistas esperan que los judíos rusos y de otras zonas del Medio Oriente tengan un papel de peso en los comicios, cuyo resultado será decisivo para el proceso de paz de la región.
La semana pasada, más de 200 judíos de origen marroquí procedentes de varios países se reunieron en la ciudad de Marrakesh para formar la Unión Mundial de Judíos Marroquíes, que abogará "por la paz entre árabes e israelíes".
En el clima político imperante en Israel, esa iniciativa podría interpretarse como una medida contra la política de Netanyahu, a la que muchos acusan de haber obstaculizado el proceso de paz.
"La Unión será una herramienta para promover la paz entre israelíes, palestinos y árabes, y garantizará la seguridad en Medio Oriente", dijo Raphy Edery, vicepresidente del parlamento israelí, elegido primer presidente de la Unión.
La reunión constituyente de la Unión contó con la presencia de una delegación israelí de 50 miembros, incluso ministros, legisladores y empresarios, encabezada por el ministro de Finanzas Meir Shitrit.
La organización "ayudará a volcar los votos de los judíos marroquíes a la izquierda, ya que el gobierno de Netanyahu no materializó los acuerdos de paz con los palestinos", declaró Mohamed Bennis, columnista de prensa en Rabat.
Los israelíes de origen marroquí conforman 15 por ciento del electorado, siendo el segundo bloque de electores después de los judíos rusos, que según las encuestas votarían masivamente a favor del candidato del Partido Laborista, Ehud Barak.
A los comicios se presentan cinco candidatos para primer ministro y 31 partidos que se disputan las bancas del Parlamento, por lo que se espera que la carrera sea peleada y que cada voto cuente.
Netanyahu hizo una fuerte campaña para conseguir el voto marroquí y del resto del Medio Oriente, al precio de alejarse de los rusos, que se sienten socialmente discriminados y también fueron golpeados por la actual recesión económica.
Lo más probable es que el voto marroquí, tradicionalmente de derecha, "se pase al partido Laborista, que se muestra más inclinado a adoptar un proceso de paz más rápido" con la Autoridad Nacional Palestina y con Siria, declaró a IPS un líder judío marroquí.
Los árabes israelíes también tienen un candidato, Azmi Bishara, y los analistas consideran que renunciará a la candidatura a favor de Barak o apoyará al líder laborista en la segunda vuelta de las elecciones, el 2 de junio, si ninguno de los candidatos obtiene más de 50 por ciento de los votos.
Las últimas encuestas de la empresa Gallup revelan un fuerte apoyo para Barak, con 49,9 por ciento, frente al 35,1 por ciento para Netanyahu.
La presión aumenta para que el centrista y ex ministro de Defensa Yitzhak Mordechai se retire de la carrera y contribuya con su 4,3 por ciento para asegurar la mayoría de Barak en la primera vuelta.
El rey Hassan II de Marruecos, quien patrocinó la reunión en Marrakesh, instó a los marroquíes israelíes que "voten por la paz" en las elecciones en Israel. "Estoy seguro que votarán por la paz en las próximas elecciones y por aquellos que trabajen por la paz", declaró en un discurso ante los delegados.
Hassan participó en gestiones de paz desde los años 70. Los ex primeros ministro israelíes Yitzhak Rabin y Shimon Peres visitaban Marruecos periódicamente para "consultar" con el rey cada vez que había una novedad en el proceso de paz.
André Azoulay, asesor de finanzas y economía de Hassan, instó a los israelíes a respetar la dignidad y la libertad del pueblo palestino.
"En Essaouira", el pueblo natal de Azoulay, "mis padres me enseñaron a respetar la dignidad y la identidad de mi vecino. Hoy mi vecino es palestino", dijo el asesor judío, también integrante de la Unión.
Cuando el pueblo palestino "recupere su libertad, soberanía y todos los elementos de su identidad, yo recuperaré todos mis valores como judío", agregó.
Pero algunos funcionarios israelíes aprovecharon la ocasión en Marruecos para hacer campaña a favor de Netanyahu.
En declaraciones a la prensa, el ministro Shitrit dijo que intentaría convencer al rey Hassan II de que Netanyahu es un hombre de paz.
"La imagen dada de Netanyahu es falsa. Netanyahu fue elegido porque era el único capaz de hacer la paz con los palestinos", afirmó Shitrit, fuerte aliado del primer ministro israelí. (FIN/IPS/tra-en/na/ak/aq/ip/99)
