América Latina y el Caribe propondrán a la Unión Europea (UE) la firma de un acuerdo de libre comercio y pugnarán por profundizar los procesos internos de reforma y apertura económica, pues según entienden, son el mejor camino para lograr el desarrollo y derrotar la pobreza.
Tales fueron las conclusiones centrales de los presidentes y altos funcionarios de 14 países de América Latina reunidos este sábado en México para la XIII Cumbre del Grupo de Río, la primera en 13 años en que los mandatarios trabajaron a puertas cerradas y sin asesores.
Los presidentes Julio María Sanguinetti, de Uruguay, Ernesto Zedillo, de México, y Jamil Mahuad, de Ecuador, expusieron ante la prensa, al finalizar la XIII Cumbre, lo que ellos llamaron las "grandes coincidencias" de pensamiento y proyecto que hoy comparten los gobiernos latinoamericanos y del Caribe.
Sanguineti, encargado por sus pares de anunciar la postura de la región en la cita con la UE, anunciada para el 28 y el 29 de junio en Río de Janeiro, dijo que América Latina desea una negociación que permita abrir todos los sectores económicos sin excepción.
La apertura debe incluir el mercado agrícola de la UE, "donde hay un gran proteccionismo" europeo, señaló Sanguinetti
Agregó que el interés es hablar de igual a igual frente a los europeos en temas comerciales, políticos y de cooperación. Advirtió, no obstante, que si la UE no acepta discutir y abolir su proteccionismo, la cumbre de Río de Janeiro no tendrá sentido.
Cuarenta y ocho jefes de Estado y de gobierno de las dos regiones participarán de la cumbre América Latina-Europa. Será la primera de su género, en una historia de 500 años de encuentros y desencuentros, expresó Sanguinetti.
América Latina y la UE mantienen un intercambio comercial de 80.000 millones de dólares anuales y las relaciones son encauzadas a través de acuerdos bilaterales y subregionales. La UE se prepara para negociar convenios con el Mercado Común del Sur y con México.
La eliminación de subsidios agrícolas de los países del Norte industrial será también materia de discusión a fines de año en la llamada Ronda del Milenio de la Organización Mundial de Comercio.
Las subvenciones a los productores agrícolas del Norte sumaron 151.000 millones de dólares en 1997, según la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico.
Sanguinetti indicó que cada acuerdo puntual con la UE apunta a una apertura total entre las dos regiones.
Por su parte, Zedillo informó a los periodistas que en la cita concluida esre sábado hubo coincidencia absoluta en reconocer que los procesos de reforma económica y apertura son la mejor receta que puede adoptar la región.
A pesar de las dificultades ocasionadas por la crisis internacional, las economías latinoamericanas están mucho mejor que en décadas anteriores e incluso con menos pobreza gracias a los ajustes estructurales, aseguró Zedillo.
Los problemas financieros que los últimos años sufrieron o siguen sufriendo Brasil, Ecuador y México "no demuestran que el camino tomado no es el adecuado", agregó.
La perserverancia en las políticas de ajuste y disciplina fiscal, la apertura de los mercados y el libre flujo de capitales son recetas que todos los presidentes reconocen como válidas e irrenunciables, dijo Zedillo.
Antes del comienzo de la cumbre del Grupo de Río trascendió que el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, propondría a sus pares disponer restricciones al libre flujo de capitales "golondrina", pero Zedillo afirmó que ninguno de los asistentes manejó esa posición.
El presidente mexicano indicó que sus colegas coincidieron en señalar que algunos de los grandes problemas de los países de la región tienen origen en la debilidad de sus sistemas bancarios, por lo que cada uno habría prometido implementar decisiones para fortalecer ese sector.
Zedillo aclaró que todas las reformas económicas emprendidas tienen como fin principal combatir la pobreza, tema que le fue encargado presentar al presidente ecuatoriano Mahuad.
Este informó que los participantes en la cumbre manifestaron preocupación por el aumento de la pobreza y del desempleo y coincidieron en identificar la fórmula para superar esos problemas en el mejoramiento de la educación y la persistencia de la disciplina económica.
Sin duda "tenemos que sembrar en lo económico para cosechar en los social", comentó Mahuad.
Al final de la conferencia de prensa, Zedillo informó que los gobernantes resolvieron expresar públicamente su respaldo solidario al presidente de Colombia, Andrés Pastrana, por su plan para lograr la paz con la guerrilla, que ha sido cuestionado por un sector de las Fuerzas Armadas colombianas.
Asimismo, Zedillo destacó que los asistentes felicitaron a los gobiernos de Perú y Ecuador, que pusieron fin a una disputa territorial de medio siglo.
El Grupo de Río, foro de concertación política de América Latina y el Caribe, está integrado por Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Panamá, Perú, Paraguay, Uruguay y Venezuela.
También comprende a un representante de América Central, que en este caso fue Guatemala, y otro del Caribe, un mandato que corresponde ahora a Guyana.
Pastrana y los presidentes Eduardo Frei, de Chile, Janet Jagan, de Guyana, Ernesto Pérez Balladares, de Panamá, y Alberto Fujimori, de Perú, no concurrieron a la cumbre de México y fueron reemplazados por altos funcionarios. (FIN/IPS/dc/ff/ip/99