El socialista Ricardo Lagos venció al democristiano Andrés Zaldívar, según una encuesta, en el primer debate en televisión previo a las elecciones primarias del día 30, en que la coalición gobernante en Chile elegirá su candidato a la presidencia para los comicios de diciembre.
Lagos, precandidato de los partidos Socialista, Por la Democracia y Radical Socialdemócrata, fue considerado por 52,3 por ciento de los encuestados en Santiago ganador en el debate transmitido en la noche del martes.
Sólo 14,9 por ciento de las personas consultadas consideraron ganador a Zaldívar, presidente del Senado y precandidato del Partido Demócrata Cristiano (PDC). El sondeo telefónico fue realizado por la Fundación Futuro, vinculada al ex senador derechista y empresario Sebastián Piñera.
El presidente Eduardo Frei, militante del PDC, calificó este miércoles el debate de "un gran triunfo" de la Concertación por la Democracia, la coalición que gobierna Chile desde el restablecimiento de la institucionalidad en marzo de 1990.
El foro televisivo acentuó el optimismo del ala izquierda de la coalición, que confía llevar a Lagos a la presidencia tras dos gobiernos sucesivos de miembros del PDC: Patricio Aylwin (1990- 1994) y Frei.
El debate, transmitido por cinco de los siete canales de señal abierta del país, tuvo como escenario el antiguo hemiciclo de la Cámara de Diputados, en el edificio donde hoy funciona el Ministerio de Relaciones Exteriores.
La presentación televisiva fue "de guante blanco", según los medios de prensa, ya que Lagos y Zaldívar eludieron polémicas frontales e insistieron en la unidad de la coalición para las elecciones presidenciales del 12 de diciembre.
Las preguntas orientadoras del foro, planteadas por cuatro periodistas designados por los canales, permitieron sin embargo establecer diferencias entre los dos precandidatos en temas como las relaciones con las Fuerzas Armadas.
Los comandos de los dos postulantes acordaron realizar un segundo debate el jueves 27, tres días antes de las elecciones primarias, en las que votarían, según estimaciones preliminares, unos dos millones de chilenos mayores de 18 años.
Estos comicios son voluntarios y abiertos, lo cual significa que podrán sufragar en ellos, además de los militantes de los partidos oficialistas, todos los independientes que deseen hacerlo, incluso los miembros de las Fuerzas Armadas.
En 1989, Aylwin fue designado candidato directamente por los partidos de la coalición, en tanto Frei derrotó a Lagos en 1993 en comicios primarios restringidos a activistas y adherentes inscriptos en un registro ad- hoc.
Sólo están excluídos de estas primarias los militantes registrados de partidos ajenos a la concertación oficialista, como Renovación Nacional (PRN) y la Unión Demócrata Independiente (UDI), de derecha, el Comunista (PC) y el Humanista (PH).
Por razones de organización del padrón de votantes, tampoco podrán participar en esta elección los extranjeros, que en Chile tienen derecho a inscribirse en los registros electorales luego de cinco años de residencia en el país.
Unos 400.000 chilenos que viven en el exterior, sobre todo en la vecina Argentina, tampoco están facultados para ejercer el sufragio en elecciones de este país y están excluídos asímismo de las primarias al no figurar en el padrón nacional electoral.
La encuesta de la Fundación Futuro señaló que 52,3 por ciento de los santiaguinos dio el triunfo a Lagos en el debate, 14,9 a Zaldívar y 17,6 por ciento estimaron que hubo empate, mientras 15,3 por ciento se abstuvieron de opinar.
El sondeo telefónico otorgó igualmente ventajas al precandidato socialista en aspectos como credibilidad, capacidad, presencia, claridad en la exposición de ideas y calidad del mensaje entregado a los electores.
Todas las encuestas realizadas desde 1998 otorgan a Lagos la primera posición en la intención de voto, y si bien Zaldívar mejoró en las últimas semanas, se cree que no podrá absorber la ventaja de su rival.
El triunfador en las primarias oficialistas tendrá como principal competidor en diciembre al alcalde del acomodado municipio santiaguino de Las Condes, Joaquín Lavín, de la UDI, proclamado también como candidato presidencial por el PRN.
Lavín reclamó a los canales de televisión un tiempo similar al del debate de los precandidatos de la Concertación, que fue de una hora y 20 minutos, para promover una consulta presidencial que el pacto derechista Unión por Chile hará en junio.
La consulta opositora tendrá carácter formal, sin los aspectos competitivos de la coalición oficialista, ya que Lavín tiene consolidado el apoyo a su postulación de los dos grandes partidos derechistas.
El ex senador y candidato Arturo Frei Bolívar, primo del actual presidente, marginado del PDC, buscó infructuosamente buscar el apoyo del PRN y la UDI, pero consiguió sólo el respaldo de la pequeña Unión de Centro-Centro, populista de derecha.
La ex diputada Gladys Marín, líder del PC y candidata presidencial de ese partido y de otras fuerzas de izquierda, se considera, al igual que Lavín, discriminada por los canales de televisión.
Aunque aspira a aumentar sustancialmente el respaldo a su partido, la abanderada comunista no tiene ninguna posibilidad de triunfo en diciembre, al igual que Tomás Hirsch, candidato de los humanistas. (FIN/IPS/ggr/ff/ip/99
