El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, viajará el jueves a Brasil para acentuar la "relación privilegiada" que ambos países desarrollan desde hace un lustro, y pavimentar la asociación venezolana y andina con el Mercosur.
Desde que fue elegido el 6 de diciembre, Chávez ha reclamado "audacia en la integración", pedido una rápida asociación con el Mercado Común del Sur (Mercosur), y colocado sobre la mesa una adhesión venezolana aún antes que la del resto de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú).
El mandatario, un ex comandante de paracaidistas de 44 años que se define como "bolivariano", reclama además "una integración mucho más allá de lo económico y comercial", lo que marcará apenas llegue a Brasilia, iniciando la Cátedra Simón Bolívar en la Universidad Nacional de esa capital.
Luego se entrevistará con su anfitrión, Fernando Henrique Cardoso, a quien ya visitó 10 días después de su elección en diciembre. Los presidentes instalarán mesas de trabajo sobre integración y negocios, y firmarán una declaración conjunta.
Brasilia y Caracas fueron vecinos "de espaldas", con Brasil integrándose con Argentina, Paraguay y Uruguay, y Venezuela con sus socios andinos, hasta que en 1994 los entonces presidentes Itamar Franco y Rafael Caldera dieron un giro a esa relación.
Se estableció un régimen de visitas presidenciales anuales, los gobiernos crearon una docena de comisiones para tratar temas de interés común, y cobró impulso el comercio, tanto el de petróleo a bordo de buques como el transfronterizo usando la carretera BR-74 que perforó la Amazonía.
El comercio casi se triplicó y en 1997 alcanzó 1.300 millones de dólares, con la balanza inclinada a favor de Venezuela debido a la venta de más de 100.000 barriles diarios de petróleo.
Gobiernos y empresarios han valorado el mercado de casi 30 millones de personas que viven en el norte brasileño y el sureste venezolano. Los grupos estatales Petrobras y Petróleos de Venezuela (PDVSA) han buscado asociarse en una "Petroamérica" que comience por operar una refinería en sociedad.
También avanzó un proyecto de interconexión eléctrica, para llevar el fluido hasta la ciudad de Manaos (norte de Brasil, a orillas del Amazonas) desde la represa venezolana de Guri, de 10.000 Megavatios de capacidad instalada, a 500 kilómetros de la línea fronteriza.
Ese proyecto ha tropezado con diferencias entre los precios propuestos por las partes y con la oposición de comunidades indígenas del sureste venezolano, con apoyo de ambientalistas, contrarios a que el tendido de líneas atraviese comarcas que son su habitat secular.
Chávez viajará acompañado del canciller José Vicente Rangel y los ministros de Energía, Alí Rodríguez, Ambiente, Atala Uriana, e Industria y Comercio, Gustavo Márquez, además de autoridades de PDVSA y 50 empresarios, entre los cuales dirigentes gremiales.
La cancillería venezolana informó que las mesas que trabajarán los empresarios, con sus colegas en Brasilia, versarán sobre petróleo y cooperación energética, y sobre el "espacio comercial binacional", con énfasis en oportunidades para pequeñas y medianas empresas que comercian bienes y servicios.
Esas mesas de diálogo y negocios se repetirán en Sao Paulo, a donde se desplazará toda la comitiva venezolana el viernes. Chávez visitará la Federación de Industriales del estado de Sao Paulo y el sábado regresará a Caracas.
En la capital paulista Chávez visitará la sede del Parlamento Latinoamericano, cuyas tesis sobre impugnación de la legalidad de la deuda externa regional ha compartido, y dará una conferencia de prensa en el auditorio Ulysses Guimaraes.
El viaje de Chávez a Brasil sigue a su encuentro en la frontera con su colega de Colombia, Andrés Pastrana, dedicado a la cooperación ofrecida por Venezuela para el proceso colombiano de paz y a la necesidad de reanimar el comercio bilateral, considerado la locomotora del intercambio andino.
En paralelo, el Grupo Andino negocia con los países del Mercosur preferencias arancelarias que permitan sellar una asociación, en el caso de Brasil, antes del 30 de junio. En abril se completó un acuerdo de principio sobre 1.375 productos, cerca de la mitad del universo de ítems bajo negociación.
Cuando Chávez visite Brasil, los ministros de Agricultura y la Comisión de la Comunidad Andina ya habrán adoptado las pautas de una nueva política común de comercio agrícola, que representa 20 por ciento del total del comercio exterior andino.
Mercosur es el segundo origen de las compras agrícolas de la Comunidad Andina (después de América del Norte). En 1997 los andinos importaron trigo por 719 millones de dólares, maíz por 576 millones, leche por 283 millones y aceite de soya por 195 millones de dólares. (FIN/IPS/jz-eg/ip-la/99