Debido al fuerte descenso del flujo de recursos externos hacia Africa, la única opción que le queda a este continente es movilizar recursos domésticos para el desarrollo, declaró el primer ministro de Etiopía, Meles Zenawi.
"Los desafíos que enfrentamos aquí se basan en nuestra capacidad de fomentar el ahorro doméstico, en la administración y sabia utilización de nuestros recursos, brindando a nuestro sector privado el marco legal y político apropiado para alentar las iniciativas de inversión", dijo.
Zenawi habló en una conferencia de tres días que se realiza en la capital etíope y finaliza este sábado. La reunión "Desafíos para financiar el desarrollo de Africa" es organizada por la Comisión Económica para Africa (ECA).
La conferencia atrajo a 500 altos funcionarios africanos, y las altas figuras políticas presentes expresaron que es necesario reducir la dependencia sobre la ayuda, pero la asistencia en sí no debe disminuir.
"De hecho, los niveles de asistencia deberían aumentar debido a la mejoría del ambiente político en toda Africa", expresó K.Y. Amoako, secretario ejecutivo de la ECA. "Con el tiempo, la ayuda deberá ser una proporción menor del total de las necesidades financieras".
Vijay S. Markhan, subsecretario general de la Organización de la Unidad Africana (OUA) y de la Comunidad Económica Africana (CEA), expresó que se necesita "el urgente apoyo internacional a través de flujos oficiales y privados, así como una efectiva resolución de la crisis de la deuda, si la actual recuperación ha de traducirse en crecimiento y mejores niveles de vida".
"Tantos recursos han sido dirigidos por la humanidad en contra de la humanidad en destrucciones arbitrarias y masacres insensatas. Esos recursos, respaldados por una voluntad política, podrían ser movilizados para reducir la pobreza global para el 2015", manifestó Markhan.
Por su parte, Zenawi criticó la imagen de Africa que tiene el mundo occidental como un continente "permanentemente sumergido en conflictos e irrevocablemente sacudido por la inestabilidad, lo cual constituye el mayor impedimento para convertirse en confiable socio de negocios y atraer inversiones".
Si bien el gobernante etíope admitió que Africa padece numerosos conflictos, sostuvo que en general esa situación está relacionada con las condiciones socioeconómicas del continente, así como con el malestar y la desesperanza engendrada por ese problema.
"A menos que logremos establecer un ambiente político más seguro, no podemos esperar una movilización sostenida de recursos domésticos o externos para el desarrollo sustentable", expresó Zenawi. "Ya que los africanos somos el meollo del problema, debemos jugar un papel decisivo para resolver esa situación".
En su opinión, "la colaboración que recibió Africa de los donantes cuando surgió la necesidad se limitó a sermones vacuos, lágrimas de cocodrilo y superfluos lamentos sobre la situación del continente".
"Necesitamos socios para la paz en Africa. Pero esa asociación no puede estar basada en burlarse de los principios de la legislación internacional y de las normas de conducta civilizada entre los países", añadió.
En los últimos cuatro años, el producto interno bruto del continente aumentó en promedio 4,5 por ciento. Pese a que la cifra es inferior al siete por ciento necesario para contener la pobreza, es un paso adecuado para reducir la pobreza a corto y mediano plazo, y para atraer inversiones extranjeras.
El aumento de las exportaciones se duplicó de un promedio anual del cuatro por ciento entre 1990 y 1994 a casi ocho por ciento entre 1995 y 1997 debido a los esfuerzos de las naciones africanas para crear condiciones macroeconómicas estables, y adoptar ajustes estructurales para el crecimiento y desarrollo.
La corriente de inversiones extranjeras directas hacia Africa fue de 4.500 milones de dolares en 1997 y representó sólo tres por ciento del total de ese tipo de transferencias en el mundo.
"El mayor error de las últimas dos décadas fue poner énfasis en la estabilización macroeconómica en desmedro de los elementos de capacitación, estructuras e instituciones", subrayó Amoako.
"Aunque la estabilización es necesaria, también obligó a sacrificar recursos necesarios para crear las instituciones apropiadas y la infraestructura, e invertir en el desarrollo del capital humano", concluyó. (FIN/IPS/tra-en/lm/mn/ego/aq/dv-if/99)
