La rivalidad entre la coalición de gobierno de India encabezada por el derechista partido Bharatiya Janata (BJP), censurado por el Parlamento el sábado, y el Partido del Congreso que espera reemplazarla en el poder, impidió hoy la aprobación del presupuesto estatal.
El BJP y sus aliados interrumpieron la sesión en reiteradas ocasiones en la cámara baja, obligando al presidente de la misma G.M.C. Balayogi a aplazar la aprobación del proyecto de ley para este jueves.
El presupuesto es fundamental para apoyar la industria afectada por la tendencia recesiva de los últimos años. La derrota sufrida el sábado por el primer ministro Atal Bihari Vajpayee provocó una caída de siete por ciento en la bolsa de valores y la rupia se debilitó frente al dólar.
Muchos observadores culpan a la política de este país por los problemas económicos.
El presidente Kocheril Raman Narayanan había persuadido a los dos grupos en pugna para que aprobaran las propuestas presupuestales presentadas en febrero antes de que se disputen el apoyo de 25 partidos regionales para formar el próximo gobierno.
La bolsa de valores y la rupia se recuperaron inmediatamente tras la decisión del Partido del Congreso de aprobar el presupuesto sin modificaciones ni discusión como lo exigía el BJP.
Pero el Partido Telugu Desam (TDP), agrupación que gobierna el austral estado de Andhra Pradesh y es un fuerte aliado del BJP, impidió la aprobación del presupuesto la mañana de este miércoles cuando uno de sus legisladores anunció que pasaría a integrar el Partido del Congreso.
Diputados del BJP y el TDP acusaron al Partido del Congreso de utilizar "dinero extranjero" para cambiar las lealtades de la bancada a favor del BJP, en lo que se consideró una referencia evidente a la presidenta del Partido del Congreso, la italiana Sonia Gandhi.
La cámara de industrias declaró este miércoles que la postergación del presupuesto "afectó de manera adversa el sentir empresarial y la imagen de India".
El problema en el Parlamento está vinculado al temor del BJP de sufrir deserciones que favorezcan a sus rivales. El gobierno de Vajpayee fue derrotado por un solo voto el sábado y ambos bandos observan atentamente a los legisladores cuyas lealtades están bajo sospecha.
Vajpayee desafió al Partido del Congreso a reunir una mayoría en el Parlamento y advirtió que podría llamar a elecciones anticipadas, algo que nadie quiere.
El primer ministro solicitó al presidente que no pida la formación del gobierno al Partido del Congreso u otros partidos hasta que puedan garantizar el respaldo de al menos 270 de los 545 diputados de la cámara baja.
El gobierno del BJP perdió la mayoría cuando un importante aliado regional, el partido AIADMK de la ex ministra de Tamil Nadu Jayaraman Jayalalitha, dio el apoyo de sus 18 legisladores al Partido del Congreso.
Aunque el BJP consiguió 269 votos, el Partido del Congreso y sus aliados de partidos regionales y de izquierda reunieron 270 votos para provocar la caída del gobierno.
Pero el Partido del Congreso tiene serias diferencias con muchos de sus aliados regionales a nivel estatal. Hasta el momento no logró armar una alternativa cohesiva para que el presidente Narayanan lo invite a formar el próximo gobierno.
Entre los grupos que el Partido del Congreso debe conquistar se encuentra el Partido Samajwadi, del ex ministro de defensa Mulayam Singh Yadav. Con sede en el estado más poblado del norte, Uttar Pradesh, el partido no tiene interés en que el gobierno tenga a la cabeza a Sonia Gandhi como primera ministra.
Yadav condicionó su apoyo a que el Partido del Congreso acepte la acción positiva a favor de las castas inferiores y las minorías religiosas en India, cuya población es mayoritariamente hindú.
Gandhi, quien respondió a las consultas del presidente para formar el gobierno la mañana de este miércoles, aseguró que tiene el respaldo de 272 diputados. "Soy optimista de que el Partido Samajwadi también brindará su apoyo al gobierno secular", declaró.
Pero el portavoz del Partido Samajwadi Amar Singh dijo que su partido prefiere un gobierno dirigido por el veterano dirigente marxista Jyoti Basu, quien lidera el gobierno comunista del estado fronterizo de Bengala Occidental desde hace 20 años.
Singh hizo sus declaraciones después de reunirse con Jayalalitha, quien también apoya que Basu sea primer ministro.
Pero el dirigente marxista rechazó la propuesta hasta el momento. El Partido Comunista Marxista que lidera y su aliado el Partido Comunista de India declararon que no se incorporarán a un gobierno encabezado por el Partido del Congreso, pero le ofrecen su "apoyo" en determinados asuntos. (FIN/IPS/tra-en/rdr/an/aq/ip/99