El presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, calificó hoy de "inaceptable" la propuesta de cese del fuego del presidente de Yugoslavia, Slobodan Milosevic, y sugirió que Washington podría cambiar su postura y aceptar la separación de Kosovo de la Federación Yugoslava.
Las declaraciones se conocieron tras una conversación telefónica de Clinton con el canciller (jefe de gobierno) alemán Gerhard Schroeder, quien se había reunido con el primer ministro ruso Yevgeny Primakov luego de que este hablara durante seis horas con Milosevic en Belgrado por la mañana de este martes.
El propio Schroeder rechazó la propuesta de Milosevic de reducir las fuerzas yugoslavas en Kosovo y permitir el retorno a la provincia separatista de Serbia de decenas de miles de refugiados que huyeron de sus hogares si la OTAN cesaba sus bombardeos, que comenzaron hace ya una semana.
"Esta no es la base para una solución política", declaró Schroeder, mientras su ministro de Defensa, Rudolf Scharping, dijo a la prensa que la aceptación de la propuesta de Milosevic traería "la paz de los cementerios".
No obstante, mientras la OTAN (Organización del Tratado del Atlántico Norte) concluía la primera semana de bombardeos contra objetivos militares yugoslavos, funcionarios en Washington reconocieron que la ofensiva aérea aún no controló lo que algunos ya describen como el "genocidio" de la población albanesa de Kosovo.
Más de 160.000 kosovares albaneses huyeron a las vecinas Albania, Macedonia y Bosnia-Herzegovina, y a la república yugoslava de Montenegro, desde que comenzaron los bombardeos el martes pasado, informó el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, y agregó que no se prevé la disminución del éxodo.
En una ceremonia de la cancillería estadounidense este martes, Clinton aseguró que esta semana ascendió a más de 500.000 las personas expulsadas de sus hogares desde que comenzaron hace un año los combates entre las fuerzas yugoslavas y el separatista Ejército de Liberación de Kosovo (UCK).
Desde que la OTAN lanzó su campaña, pueblos albaneses enteros fueron bombardeados o incendiados por militares o policías yugoslavos y fuerzas paramilitares serbias, con la intención de despoblar gran parte de la zona austral de Kosovo, donde antes de que comenzara la crisis 90 por ciento de los dos millones de habitantes eran albaneses.
Clinton también acusó este martes a las fuerzas yugoslavas de "asesinar a dirigentes kosovares que apoyaban una solución pacífica al conflicto".
Funcionarios estadounidenses este martes negaron que la ofensiva de la OTAN, que se decidió después de que Yugoslavia rechazara un acuerdo de paz diseñado por las potencias occidentales y de que enviara a 40.000 soldados y policías a Kosovo, en realidad agravó la situación.
"Ahora queda claro que mientras los dirigentes kosovares le decían que sí a la paz, el señor Milosevic planeaba una nueva campaña de expulsiones y ejecuciones en Kosovo", dijo Clinton.
Milosevic "comenzó a llevar a cabo ese plan mientras las negociaciones terminaban, aumentando nuestra sensación de urgencia de que debían comenzar los ataques aéreos con que la OTAN había amenazado durante cierto tiempo", agregó.
La OTAN presionó al UCK y a Milosevic para que firmaran un acuerdo de paz que habría devuelto la autonomía al menos durante tres años a Kosovo, la que Milosevic le había retirado hace 10 años en reacción a la ira popular serbia por la supuesta represión de kosovares serbios a manos de la población albanesa.
El acuerdo también estipulaba el destacamento de 28.000 soldados de la OTAN para mantener la paz entre las dos comunidades.
El acuerdo tenía el fin de poner fin a una guerra cada vez más violenta entre el ejército yugoslavo y el UCK, que lucha por la independencia de Kosovo, una meta que el acuerdo impidió en forma intencional.
Washington y otras potencias de la OTAN se oponían a la independencia de Kosovo por temor a que impulsara la creación de una "Gran Albania" que, a su vez, podría desestabilizar a Macedonia, república que tiene una gran población albanesa, y fomentar una mayor inestabilidad en los Balcanes. (FIN/IPS/tra-en/jl/aq/99