El compromiso de países industrializados de financiar actividades de población y los derechos reproductivos dominan la agenda de las reuniones en curso en la sede de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El comité preparatorio para la quinta revisión de la Conferencia Internacional sobre Población y Desarrollo, celebrada en El Cairo en 1994, comenzó el miércoles una serie de reuniones que durará una semana.
El objetivo del comité consiste en forjar un consenso sobre asuntos como financiación y derechos reproductivos antes de junio, cuando tendrá lugar una reunión especial sobre población de la Asamblea General.
Nafis Sadik, directora ejecutiva del Fondo de las Naciones Unidas para la Población (FNUAP), expresó su esperanza en que las reuniones promuevan el cumplimiento del programa de acción acordado hace cinco años en El Cairo.
Sadik destacó el problema de la asignación de recursos en los próximos años y los esfuerzos para reducir la mortalidad materna, que no ha disminuido.
En cuanto al tema de la financiación, muchos países en desarrollo plantearon que su progreso en materia de actividades de población no ha sido acompañado por el cumplimiento de las promesas de las naciones donantes de incrementar su ayuda financiera.
La asistencia de los países donantes "se estancó en 1996-97 y comenzó a disminuir", advirtió el embajador de Bangladesh Anwarul Karim Chowdhury, presidente de las reuniones preparatorias.
Según el FNUAP, las naciones donantes aumentaron su contribución a las actividades de población inmediatamente después de la conferencia de El Cairo. Sólo en 1995, los fondos sumaron 2.000 millones de dólares.
Pero desde entonces, la ayuda oficial para el desarrollo del Sur cayó a apenas 0,24 por ciento del producto interno bruto de los países industrializados, muy por debajo del objetivo de 0,7 por ciento fijado por los donantes.
De esa cantidad, la proporción asignada a actividades de ayuda a la población también se redujo, y en 1996 representó menos de 2,5 por ciento de toda la ayuda para el desarrollo.
Una forma de incrementar los recursos sería la asignación de cuatro por ciento de toda la ayuda al desarrollo para actividades de población, como se propuso hace una década, señaló Sadik.
Algunos donantes -incluido Estados Unidos, el mayor donante individual- prometieron esforzarse por reducir el déficit financiero.
"No hay duda de que los recursos para el desarrollo en general son limitados", manifestó el miércoles Julia Taft, subsecretaria de Estado de Estados Unidos para asuntos de población, refugiados y migración.
"Debemos asegurarnos de que los recursos existentes sean utilizados con la mayor eficacia posible", agregó.
El otro asunto dominante en el debate del comité es el de los derechos reproductivos. Varios países se preparan para impugnar la amplia interpretación del concepto detallada en el acuerdo de El Cairo.
Algunos estados "sienten que perdieron en El Cairo" y podrían impulsar interpretaciones del programa de acción más restrictivas sobre el tema de los derechos reproductivos, explicó Chowdhury.
Sin embargo, "la redacción del acuerdo no se reabrirá a la discusión. Costó mucho lograrla y vamos a respetarla", enfatizó.
En todo caso, señaló Sadik, las discusiones no tienen por finalidad impulsar ninguna interpretación en particular del acuerdo de la conferencia. "Cada país decide por sí mismo", explicó.
No obstante, Sadik señaló varias áreas en las que delegaciones conservadoras, incluida la del Vaticano, impulsan restricciones.
Por ejemplo, algunos estados promueven limitaciones al uso de "anticonceptivos de emergencia", que incluyen píldoras utilizables en las 72 horas siguientes al coito. Funcionarios de la ONU las han distribuido en campamentos de refugiados para prevenir embarazos indeseados.
Así mismo, ciertas delegaciones objetan el uso del condón femenino, argumentando que no es confiable como protección contra embarazos indeseados.
"Si no se usa nada, no existe ninguna protección. La oposición (al condón femenino) es incomprensible", replicó Sadik. (FIN/IPS/tra-en/fah/mk/mlm/pr/99