NACIONES UNIDAS: Washington podría ceder el liderazgo del PNUD

Estados Unidos parece dispuesto a ceder la administración del Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas (PNUD), una agencia económica clave creada en 1966 y manejada en forma casi exclusiva por funcionarios de Washington.

Todavía no se adoptó ninguna decisión al respecto, pero funcionarios estadounidenses informaron que es casi seguro que el sucesor del administrador actual del PNUD, James Gustave Speth, sea Poul Nielson, el ministro danés de Desarrollo.

La decisión de Washington fue anunciada la semana pasada al Congreso por la secretaria de Estado, Madeleine Albright, quien expresó que mantener el control del PNUD era "problemático porque, en conjunto, los europeos contribuyen más" que Estados Unidos a esa agencia.

"Creo que debemos aceptar que ellos deseen dirigirlo", agregó.

Las declaraciones de Albright contrastaron con la oposición manifestada en septiembre por funcionarios estadounidenses a un intento europeo de reemplazar anticipadamente a Speth, quien planea retirarse en la primavera (boreal) para apoyar la postulación a la presidencia del vicepresidente Al Gore.

Se consideraba que el candidato más fuerte de Washington para suceder a Speth era J. Brian Atwood, ex administrador de la Agencia Estadounidense para el Desarrollo Internacional.

Pero Atwood, que dedicó la mayor parte de su gestión en esa agencia a combatir los esfuerzos del Partido Republicano estadounidense para eliminarla, ahora es candidato a la embajada de Estados Unidos en Brasil.

La Unión Europea (UE) desea desde hace tiempo dirigir el PNUD, y alega que la contribucion conjunta de los 15 estados que la integran a esa agencia, y también a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), supera largamente el aporte de Washington.

En una carta al secretario general de la ONU, Kofi Annan, la UE señaló que el año pasado los países que la integran "contribuyeron con casi 60 por ciento del presupuesto básico del PNUD, si bien el despacho de su administrador nunca fue ocupado por un ciudadado de un estado miembro" del bloque.

Sin embargo, Estados Unidos es el país que realiza mayores aportes a la ONU, dado que contribuye con 36 por ciento de su presupuesto básico, 40 por ciento de los fondos para asistencia, entre 55 y 60 por ciento del costo de las operaciones de paz y cerca de 60 por ciento de la ayuda a los palestinos.

Si se consideran los países por separado, los seis principales contribuyentes al PNUD son Estados Unidos, Dinamarca, Japón, Holanda, Alemania y Noruega. En 1999 Washington aportará 100 millones de dólares a esa agencia y Dinamarca alrededor de 86 millones.

La posible decisión estadounidense de ceder la administración del PNUD se produce en un contexto de crecientes problemas para Washington dentro de la ONU, sobre todo porque todavía no pagó a la organización mundial cuotas atrasadas por un valor de 1.500 millones de dólares.

Esa persistente morosid provocó indignación y frustración entre los miembros de la ONU, incluyendo a algunos de los mejores aliados de Washington. En 1996 la Asamblea General de la ONU votó contra la presencia estadounidense en su Comisión de Presupuesto, y esto se interpretó como un signo de la impaciencia imperante.

En ese mismo año comenzó a manifestarse la disputa por el control del PNUD, cuando Dinamarca consideró seriamente la posibilidad de oponerse a la designación de Speth para un segundo período de cuatro años como administrador de esa agencia.

Para lograr el nombramiento Speth debió prometer que abandonaría el cargo en forma anticipada.

La lucha por el PNUD se agudizó a raíz de una fuerte disminución del aporte estadounidense a la agencia en 1996, cuando Washington contribuyó con 52 millones de dólares, menos de la mitad de los 113 millones de 1995.

Ese recorte fue impuesto por el Congreso estadounidense, liderado por integrantes del Partido Republicano fuertemente hostiles a la ONU.

El Congreso también ha puesto obstáculos al pago de la deuda de Estados Unidos debe a la ONU, al resolver que desde 1996 la amortización esté ligada a la prohibición de toda ayuda estadounidense a agencias en el exterior que presionen a sus gobiernos para que suavicen la legislación contra el aborto.

El año próximo Washington disminuirá también sus contribuciones al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).

UNICEF recibirá 105 millones de dólares este año y sólo 101 millones en el 2000, y el aporte al PMA descenderá de cinco millones de dólares a 3,5 millones.

Desde la creación del PNUD en 1966, sus administradores fueron, sucesivamente, Paul Hoffman, David Owen, Rudolph Petersen, Bradford Morse, William Draper y Speth, todos estadounidenses salvo el británico Owen.

Hay estadounidenses en otros tres altos cargos de la ONU además de Speth, y ningún otro país ocupa tantos puestos de responsabilidad en la organización. Joseph Connor es subsecretario general de Administracion y Finanzas, Carol Bellamy directora de UNICEF, y Catherine Bertini está a cargo del PMA.

El cargo de Speth es considerado el de mayor importancia entre esos cuatro.

El PNUD tiene un presupuesto anual de más de 1.000 millones de dólares. Aunque esto representa, por ejemplo, sólo una fracción de los gastos anuales del Banco Mundial (también dirigido por un estadounidense, James Wolfensohn), la agencia es la clave de la coordinación de toda la asistencia de la ONU al desarrollo.

Steven Dimoff, vicepresidente de la Asociación ONU de Estados Unidos, una organización no gubernamental, comentó que "la pérdida del liderazgo de Washington en el PNUD tendrá repercusiones sobre la continuidad del apoyo estadounidense a esa agencia".

John Sewell, director del influyente Consejo Exterior de Desarrollo, sostuvo en cambio que la actitud de Washington debe considerarse "la gentil aceptación de un liderazgo internacional compartido".

Sewell, a quien se mencionó como un posible candidato a la sucesión de Speth, afirmó que el desafío para cualquier nuevo administrador será definir una misión clara para el PNUD, cuyo papel como proveedor principal de asistencia técnica a los países en desarrollo fue eclipsado recientemente por el Banco Mundial.

La designación del administrador del PNUD corresponde al secretario general de la ONU y requiere aprobación de su Asamblea General. Pero Kofi Annan ha pedido que se le presente más de un candidato al cargo, y esto todavía podría ser un obstáculo para el nombramiento del danés Nielson, actual corredor de vanguardia. (FIN/IPS/tra-en/jl/kb/ego/mp/ip dv/99)

Archivado en:

Compartir

Facebook
Twitter
LinkedIn

Este informe incluye imágenes de calidad que pueden ser bajadas e impresas. Copyright IPS, estas imágenes sólo pueden ser impresas junto con este informe