El gobierno de Kenia negó hoy haber prestado ayuda en la captura del líder separatista kurdo Abdullah Ocalan, que apareció de forma misteriosa en poder de las autoridades de Turquía, donde es acusado de terrorismo.
El ministro de Relaciones Exteriores keniata, Bonaya Godana, informó que exigió el retiro inmediato del embajador de Grecia a raíz del incidente e insistió este martes que Ocalan dejó Kenia el lunes a las 7.30 hora local (19.30 GMT) en un jet privado con rumbo desconocido.
Informes sin confirmar sostienen, en cambio, que el líder del proscripto Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), ahora preso en Ankara, fue capturado en Nairobi el lunes.
El gobierno de Kenia acusó a Grecia de la "difícil" situación actual.
"El ingreso del señor Ocalan en el país era, al parecer, bien conocida por el gobierno griego. El hecho de que Ocalan eligiera Kenia como destino nos deja perplejos", dijo Godana a los periodistas este martes.
"No esperábamos que un país como Grecia, con el que tenemos relaciones amistosas, someta a Kenia a una situación así, tan difícil, y nos deje librados a sospechas y posibles ataques", agregó Godana.
Las autoridades keniatas afirmaron que Ocalan, junto con otros dos hombres y tres mujeres, llegó al aeropuerto Jommo Kenyatta, en Nairobi, el día 2, a bordo de un jet privado.
El embajador griego, George Costorlas, se reunió con Ocalan y sus acompañantes a bordo del avión y se retiró con ellos sin llenar los formularios de inmigración ni pasar por las aduanas, según una declaración emitida este martes por el gobierno de Kenia.
"El pedido de acreditación diplomática para el avión fue formulado por la Embajada de Grecia, pero la nave aterrizó sin permiso pues el Ministerio de Relaciones Exteriores pretendía conocer el estatuto de los pasajeros antes de su llegada", indicó la declaración.
"Es posible que las autoridades griegas hayan tomado ventaja de las fuertes y amistosas relaciones entre nuestros países, lo cual deja en cuestión su sinceridad y confiabilidad", agregó el gobierno.
La declaración afirmó que el gobierno de Kenia reclamó por escrito al de Grecia que explique todas las circunstancias que llevaron al ingreso ilegal de Ocalan en Kenia, así como el inmediato retiro de su embajador.
El trayecto de Ocalan entre Nairobi y Ankara no fue revelado por el gobierno turco. Los separatistas kurdos en Europa afirman que los agentes de Turquía contaron con la complicidad de Grecia y Kenia. Ambos gobiernos lo negaron.
Ocalan, según algunos informes, estuvo oculto en la embajada de Grecia en Kenia y abandonó el lugar después de prometer a sus anfitriones que se dirigiría a otro país africano, pero fue secuestrado camino al aeropuerto.
El gobierno de Grecia admitió que otorgó a Ocalan "un lugar para quedarse en Kenia, a donde había viajado después de sus gestiones en procura de permiso de residencia en varios países europeos".
Atenas agregó que el líder kurdo dejó "su lugar de residencia" el lunes, y que carecía de "información de las autoridades de Kenia sobre su paradero".
"En vista de los hechos, ya no es posible confiar en el embajador", y el gobierno de Kenia "ha exigido su inmediato abandono del país", se consignó en el comunicado.
Una fuente de la residencia del embajador griego aseguró a un periodista keniano que Ocalan y otras cuatro personas fueron conducidos a bordo de cuatro vehículos Range Rover del gobierno y en una camioneta por funcionarios que habían mantenido una fuerte discusión con los ocupantes del edificio.
Otra versión extraoficial señaló que en la ruta hacia el aeropuerto, el automóvil en que viajaba Ocalan se apartó de la caravana y desapareció. Tampoco se conoce desde el lunes el paradero del embajador de Grecia.
Godana negó toda participación del gobierno de Kenia en la partida de Ocalan. También dijo que las autoridades no estaban al tanto de ninguna operación clandestina de Turquía en el país antes de la captura del líder kurdo.
El primer ministro de Turquía, Bulent Ecevit, anunció que Ocalan será juzgado por el "sistema de justicia independiente" acusado de traición y asesinato, delitos castigados con la muerte.
La prisión del líder del PKK es la culminación de varios meses de tensiones diplomáticas y políticas que comenzaron en Noviembre, cuando Ocalan fue arrestado en Roma, hacia donde viajó desde Moscú, y pidió de inmediato asilo político.
Unos 10.000 kurdos de toda Europa se dieron cita en las calles de Roma para impedir la extradición de Ocalan a Turquía. Italia rechazó el pedido turco, lo que afectó la relación entre los dos países, ambos integrantes de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Ocalan dejó Italia el 16 de enero, presionado por las autoridades italianas, que fracasaron en su intento de establecer una corte internacional que lo juzgara.
Mientras tanto, Ocalan renunciaba a la violencia y llamaba a un esfuerzo internacional para alcanzar una solución política en el Kurdistán turco.
El líder kurdo busca desde entonces un lugar seguro desde donde conducir negociaciones que concluyan con un acuerdo internacional y que consagre la autonomía del Kurdistán turco.
Presionado por Turquía, el principal respaldo de Ocalan, Siria, lo expulsó el año pasado, con lo cual se convirtió en un paria en la mira de numerosas agencias de seguridad.
De cualquier manera, uno de los efectos previsibles de la operación de la inteligencia turca en Kenia es la reanudación de la violencia en territorio kurdo, así como mayor atención internacional sobre la causa secesionista, atraída también por las numerosas denuncias de violaciones de derechos humanos.
Kenia, donde en agosto se perpetró un atentado contra la embajada de Estados Unidos, con el saldo de 150 muertos, teme otros hechos violentos como consecuencia de la captura de Ocalan.
"El gobierno de Grecia debe tener en cuenta que Kenia fue blanco de terroristas, que volaron la embajada de Estados Unidos en agosto, causando grandes pérdidas de vidas e incalculables daños a propiedades en Nairobi", dijo el canciller Godana.
"Por esa razón, la presencia del señor Ocalan en el país creaba serias preocupaciones de seguridad", agregó.
Kwendo Opanga, director del diario independiente East African Standard, puntualizó que Ocalan no fue el primer líder rebelde extranjero en buscar refugio en Kenia, pues otros grupos insurgentes también se ocultaron en el país.
Ocalan, que lucha por una patria independiente para los kurdos, encabeza desde 1978 una guerra de guerrillas contra Turquía y figura en la lista de los "terroristas" más buscados por las autoridades turcas.
Grecia aseguró este martes haber dado refugio a Ocalan en Nairobi en términos estrictamente humanitarios y como solución temporal, con el propósito de lograr luego su radicación segura en algún país africano.
Los seguidores de Ocalan luchan hace unos 15 años por la autonomía de territorio kurdo. Se calcula que el conflicto causó la muerte de unas 30.000 personas.
Entre 20 y 25 millones de kurdos están diseminados por Turquía, Siria, Irán e Iraq. Doce millones se encuentran en el sudeste de Turquía, una región de extremada pobreza fronteriza con Iraq. Se trata de la mayor minoría del mundo que carece de estado propio. (FIN/IPS/tra-en/ja-ak/mn/mj-ff/ip/99
