Una exitosa película de dibujos animados de la compañía estadounidense Walt Disney logró lo que los comisarios culturales de China buscaban desde hace años: la creación de héroes de historieta con ideales elevados atractivos para los jóvenes.
El filme "Mulan", que se estrena en Beijing la próxima semana, reinterpreta una leyenda china de 1.500 años sobre la heroína Hua Mulan, por siglos considerada un dechado de virtudes filiales y patrióticas.
"Mulan", que fue un éxito comercial en todo el mundo y rebasó las barreras culturales, es una de las películas que más ganancias ha generado en la historia de Disney.
Fue traducida a seis idiomas, inclusive el chino. Después de retener la película por razones políticas, los mentores culturales de China dijeron que permitirán el estreno de "Mulan" en el continente a fines de este mes.
Mucho antes de que la compañía estadounidense ni siquiera pensara en convertir un antiguo cuento chino en un éxito animado, otros conocidos personajes animados de Walt Disney, como el Ratón Mickey, ya se habían ganado el afecto de los niños chinos.
La lucha por la lealtad de los niños del continente llegó a su punto más alto hace dos años, cuando Beijing arremetió contra Walt Disney por apoyar "Kundun", una película sobre la vida del semidiós del Tibet el Dalai Lama, y amenazó con cerrar el vasto mercado nacional a las propuestas de esa empresa estadounidense.
Pero incluso en ese momento se vendían más de 100 productos Disney autorizados en todo el país. Los estrenos en China de películas de dibujos animados como "El rey león" y "Toy story" fueron éxitos de taquilla.
Alarmados por la invasión de la cultura popular estadounidense, los censores chinos lanzaron en 1996 el proyecto "555", en virtud del cual China decidió establecer cinco casas editoriales de historietas para niños e imprimir 15 libros del mismo género.
La meta final de los funcionarios chinos era la producción de héroes de historieta nacionales que desplazaran de la pantalla y de las revistas a los estadounidenses como el Ratón Mickey y el Pato Dondald, los preferidos por los niños.
El presidente Jiang Zemin apoyó el proyecto y escribió al Estudio de Películas de Dibujos Animados de Shanghai una carta en la que expresaba su esperanza de que "los niños chinos pronto tuvieran sus propios héroes".
Se necesitan "buenos trabajos con contenido ideológico saludable, gran calidad artística y atractivo", indicó.
En su búsqueda de historietas puramente chinas, el proyecto "555" dispondría de abundantes fuentes de historias tradicionales y personajes conocidos para los ciudadanos del país.
Nobles guerreros, astutos generales y hermosas princesas de los clásicos literarios chinos deberían batirse a duelo con la cohorte del Ratón Mickey.
Si la "Mulan" de Disney hubiera sido creada en China, los mandarines culturales de Beijing habrían sentido que lograron su cometido.
La película cuenta la historia de la valiente y hermosa Hua Mulan, que se disfraza de guerrero para ocupar el lugar de su padre enfermo y luchar contra las hordas invasoras de los hunos.
Sobrevive a muchos peligros y al final es honrada por el anciano emperador de China como una de las mujeres más valientes del país.
La película difiere mucho de los lanzamientos previos de Disney, como "Aladdín", que tiene una trama fuertemente romántica. "Mulan" es la historia del coraje y la integridad de una heroína que sólo al final sucumbe a los impulsos del corazón.
Como "Mulan" es considerada por muchos como la película de Hollywood que presenta la mejor imagen de China en años, los funcionarios de Disney esperan que su demorado estreno en China sea el anuncio de una mejora de las relaciones con Beijing.
Después del estreno de "Kundun", la compañía fue puesta en la lista negra y no se exhibieron más películas de Disney en China por más de dos años.
Sin embargo, poner todas las esperanzas estratégicas en "Mulan" podría ser un error.
Funcionarios conservadores chinos están disconformes con la gran participación extranjera en el desarrollo de las artes en el país, y temen que las películas de Hollywood erosionen la cultura nacional.
Si "Mulan" es un éxito en China como en todas partes del mundo podría provocar el sentimiento de que los extranjeros tienen aparentemente un éxito fácil en terrenos en que los nacionales luchan por sobrevivir.
Al percibir la inquietud que rodea al estreno de "Mulan", la agencia estatal de noticias Xinhua señaló la semana pasada que el gobierno chino no aceptó inmediatamente que se importara la película el año pasado.
"Está muy bien hecha, pero importar 'Mulan' es un tema complicado", dijo un funcionario de China Film, compañía estatal que monopliza la importación y distribución de películas extranjeras.
La declaración relacionaba vagamente la demora del estreno con "consideraciones políticas y culturales". Al ser contactado telefónicamente, Jin Zhongqiang, portavoz de China Film, dijo que "Mulan" se exhibirá sólo después de que finalice la temporada de vacaciones del año nuevo lunar, el lunes.
"Sólo exhibiremos películas nacionales durante la temporada de vacaciones del año nuevo lunar", dijo.
La decisión refleja la determinación de las autoridades para proteger a la industria cinematográfica local. Inclusive después del estreno de "Mulan" en Beijing, el gobierno todavía está "considerando" su exhibición en abril en casi 100 ciudades en todo el país.
Algunos observadores creen que la demora se debe al increíble éxito de la película "Titanic" en China, que recaudó 4,3 millones de dólares en entradas, casi la mitad de todas las entradas vendidas en Beijing durante la primera mitad de 1998.
Esto alimentó los temores de dominio cultural en las industrias cinematográfica y de animación. Descrita constantemente como uno de los mayores mercados cinematográficos mundiales, China permite la importación de sólo 10 películas estadounidenses por año. (FIN/IPS/tra-en/ab/js/at-dg/cr/99