El mercado financiero de Brasil continuó hoy presentando resultados negativos, ante la indefinición de mecanismos para cumplimiento de las nuevas metas acordadas entre el gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El anuncio de objetivos generales realizado por el ministro de Hacienda, Pedro Malán, y el vicedirector del FMI, Stanley Fischer, la noche del jueves, frustró a los inversionistas, que esperaban medidas más concretas, señalaron este viernes analistas del mercado.
Los criterios de intervención del Banco Central en el mercado de cambio cuando se registren oscilaciones muy rápidas, y los medios para aumentar el superávit fiscal primario, de 2,6 a 3,5 por ciento del producto interno bruto, "siguen estando en discusión" con la misión técnica del FMI, informó Malán.
Los escasos negocios registrados este viernes elevaron la cotización del dólar a 1,83 reales, contra 1,81 en la víspera, un alza de 51 por ciento desde el inicio de la depreciación de la moneda brasileña, el 13 de enero.
Este fue el cuarto día en que el dólar se mantuvo en cotizaciones cercanas a 1,80 reales, un comportamiento muy distinto de las dos semanas anteriores, de fuertes variaciones.
Una devaluación del real a ese nivel, si persiste cuatro o cinco semanas, generará una inflación que luego será difícil de controlar y reducir, estimó el economista Luciano Coutinho, de la Universidad de Campinas, ciudad ubicada a cien kilómetros de Sao Paulo.
Además tendría efectos graves en la deuda pública de corto plazo, echando a perder el esfuerzo que hace el gobierno para evitar un desequilibrio explosivo en sus cuentas, advirtió.
Tanto las bolsas como los títulos de la deuda externa brasileña volvieron a registrar bajas, también atribuidas a la decepción ante el anuncio de Malán y Fischer este jueves.
La Bolsa de Sao Paulo cerró el viernes con una caída de 2,51 por ciento y negocios que sumaron 443 millones de reales (242 millones de dólares), la mitad que en las mejores jornadas de las semanas pasadas. En Rio la baja fue de 1,9 por ciento.
En lo que va del año, el índice paulista acumula un alza de 24,3 por ciento y el de Rio de 26,2. En ambos casos, se está muy lejos de compensar la devaluación del real, una referencia siempre presente por la indexación al dólar de numerosas acciones, también negociadas en el exterior.
El Banco Central sigue sin actuar en el mercado cambiario, pero informa diariamente, desde el lunes, acerca del nivel de las reservas internacionales del país. El jueves se situaban en 35.911 millones de dólares, siete millones menos que el día anterior.
El flujo diario de recursos externos dejó, por el contrario, de ser divulgado diariamente, pasando a una frecuencia quincenal. Con esa iniciativa el Banco Central pretende evitar interpretaciones sobre pérdida de reservas que ampliarían el nerviosismo reinante en el mercado.
La relativa estabilización del cambio desde el martes se debe principalmente a otras medidas del Banco Central, que elevó su tasa de interés a 39 por ciento y autorizó a los bancos a endeudarse en divisas extranjeras hasta una suma equivalente a su patrimonio líquido.
Ello representa 55.000 millones de dólares en el total nacional, 16 veces el límite anterior, y permite un gran aumento de la oferta de divisas en el país. (FIN/IPS/mo/dg/if/99
