Un corte de energía eléctrica en la capital de Argentina, que afectó esta semana a unas 250.000 personas, puso en tela de juicio el desempeño de las empresas privatizadas y los controles del Estado.
La interrupción del suministro movilizó el jueves a numerosos damnificados, que se manifestaron en las calles en contra de la compañía Edesur y reclamaron millonarias indemnizaciones.
Para las organizaciones de defensa del consumidor, lo grave del caso es el fracaso del control del Estado de los servicios públicos privatizados.
Guillermo Sucal, de la Asociación para la Defensa del Consumidor (Adelco) sostuvo en diálogo con IPS que la crisis pone en duda las inversiones comprometidas por Edesur, su competencia ante la emergencia y el control público.
Por su parte, la Alianza de oposición, que tiene en su agenda de temas prioritarios la necesidad de reforzar los organismos de control estatal de los servicios públicos, criticó la falta de garantías de los usuarios ante una crisis de esta magnitud.
Las denuncias por problemas con los servicios públicos – básicamente por tarifas abusivas- encabezan la lista de reclamos de los clientes, de acuerdo con los informes de una decena de organismos de defensa del consumidor.
Las empresas de servicios públicos privatizadas en los años 90 por unos 20.000 millones de dólares operan en mercados cautivos. Ochenta por ciento de los servicios que prestan son monopólicos.
Así mismo, 64 por ciento de las utilidades obtenidas en 1998 por las cien empresas más grandes del país proceden de los servicios públicos privatizados, de acuerdo con el estatal Centro de Estudios para la Producción.
"El ente regulador (de los servicios públicos) debería vigilar a las empresas para que cumplan sus compromisos, y simular la competencia inexistente mediante pautas, limitaciones y controles, ya que el cliente no tiene opción de cambiar de proveedor", observó Sucal.
El servicio de energía eléctrica, que hasta ahora era el que menos denuncias había merecido ante las organizaciones de defensa del consumidor, fue dividido para su privatización en dos áreas, que correspondieron a las empresas Edenor y Edesur.
En la madrugada del lunes pasado, Edesur, que monopoliza el suministro de energía eléctrica en una amplia zona de la capital y alrededores, dejó sin fluído eléctrico a unas 60.000 residencias y comercios y los costos ya son millonarios.
El corte alcanzó al Congreso -algunos legisladores se reunieron en los bares cercanos, porque no podían utilizar los servicios sanitarios ni funcionaban los ascensores- y al Departamento Central de la Policía Federal.
La interrupción del servicio afectó originalmente a siete barrios, pero el jueves se amplió a otros tres. La magnitud de la crisis puede medirse en una información de Fedecámaras, la entidad que agrupa a los pequeños comerciantes, que contó 10.000 comercios sin luz en sólo 25 por ciento del área de corte.
Las ventas de esas empresas cayeron 80 por ciento, agregó Fedecámaras. Los dos primeros días se perdieron 25 millones de dólares y a partir del tercero se estiman perjuicios por 36 millones diarios, aseguró el presidente de la entidad, Rubén Manusovich.
Sucal señaló que Edesur promete que restablecerá el suministro en plazos que después no cumple y no informa a los usuarios ni al Ente Regulador de la Electricidad.
El director del Ente Regulador, Fernando Devoto, se reunió el jueves con el presidente Carlos Menem para ponerlo al corriente de la grave situación y advirtió que el Estado impondrá multas y sanciones mayores si comprueba que hubo negligencia de la empresa.
Los usuarios protestaron el jueves en varios barrios de la capital. Denuncian que en numerosos edificios hay ancianos sin luz ni agua en los pisos más altos -no funcionan los elevadores-, soportando temperaturas de más de 40 grados.
El gobierno de la ciudad de Buenos Aires, encabezado por el opositor Fernando de la Rúa, tomó la decisión de hacer un operativo de atención de emergencia a los ancianos, con personal sanitario y de defensa civil.
De la Rúa, candidato a la presidencia por la Alianza de oposición, responsabilizó al gobierno nacional por el fracaso de Edesur y aseguró que si gana las elecciones de este año revisará los contratos con empresas de servicios públicos, y los renegociará para tener mayores garantías para los usuarios.
La crítica también se extendió al ente de control que, a juicio de la Alianza, actúa como "prolongación de la empresa" en lugar de ser su contralor, defendiendo primero a la compañía y sólo después a los clientes.
Devoto, del Ente Regulador, admitió que no se fía de la información de la empresa. "Dijeron muchas cosas que no cumplieron", dijo el funcionario.
El contrato de transferencia del servicio de electricidad prevé que por más de 10 horas de corte, la empresa debe indemnizar a los usuarios en residencias familiares y en comercios, pero no contempla el lucro cesante.
Sucal, de Adelco, consideró que esa disposición fue fijada para "situaciones normales de corte, no para un corte de más de tres días", e instó a los comerciantes a reclamar indemnización por ingresos perdidos.
Para ello, Adelco llamó a una audiencia pública que debería decidir cómo actuar en defensa de los consumidores, y recomienda a los afectados que reúnan pruebas notariales sobre las pérdidas que les ocasiona el corte de luz para presentarlas eventualmente ante la justicia.
El director de Relaciones Institucionales de Edesur, Daniel Martini, señaló que "en principio", la empresa no tiene obligación de reconocer el lucro cesante de los comercios perjudicados por la suspensión del suministro, que ese extremo no está previsto en el contrato que firmó con el Estado.
También dijo que el servicio que presta Edesur no sería económicamente "viable" si la empresa debe pagar 500 millones de dólares en indemnizaciones.
Edesur, integrada por las chilenas Enersis y Electra y la argentina Pérez Companc, factura 1.000 millones de dólares al año.
Por último, Sucal informó que 300.000 personas solicitaron en los últimos años el asesoramiento de Adelco por problemas de diversa entidad con empresas privatizadas. (FIN/IPS/mv/ff/pr if/99