El Banco Central de Brasil suspendió hoy la banda cambiaria que adoptó hace dos dias y dejó flotar libremente el real, rindiéndose a las presiones del mercado.
En pocos minutos, la cotización del dólar se elevó a 1,54 reales, 22 centavos por encima del techo de la banda, que había sido fijado el miércoles en 1,32 reales por dólar. Eso significa una depreciación de 16,6 por ciento de la moneda brasileña.
Las autoridades monetarias tratan de determinar la magnitud de la devaluación que requiere el mercado, y anunciaron para el lunes la divulgación de nuevas reglas de política cambiaria.
La Bolsa de Sao Paulo subió 19,5 por ciento dos horas después que los inversionistas fueron sorprendidos por la información de que el Banco Central no intervendría en el mercado cambiario este viernes.
El índice paulista habia iniciado el dia en baja de 5,14 por ciento, siguiendo la tendencia de los dos últimos dias.
El alza del índice de la bolsa corresponde a la corrección del valor de las acciones en reales, buscando volver a su cotización en dólares, explicó Paulo Yokota, un ex director del Banco Central y partidario de la devaluación de la moneda brasileña.
Por esa lógica, se podría llegar a un aumento de 25 por ciento, ya que el real se depreció en esa medida desde el miércoles, cuando el presidente del Banco Central, Francisco Lopes, anunció la nueva banda cambiaria, con una devaluación de nueve por ciento en la practica.
El dólar se cotizó a 1,21 reales en las operaciones comerciales el martes, cuando el cambio seguia rígidamente controlado, con una banda estrecha que permitia variaciones de sólo 1,16 por ciento.
Con la decisión de este viernes, anunciada después del inicio de las operaciones bancarias y bursátiles, el Banco Central volvió atrás en la desmentida que divulgó en la víspera, cuando desestimó rumores de que adoptaría la libre flotación del real.
La reacción en las bolsas indica que la medida de este viernes tuvo buena acogida, ya que se consideraba insuficiente la devaluación avalada por el Banco Central el miércoles.
El ex ministro de Economía argentino Domingo Cavallo recomendó pocas horas antes de la decisión brasileña de este viernes, en entrevistas concedidas a la prensa de Brasil, la adopción de la convertibilidad argentina, o la libre flotación.
Esas "reglas claras y creíbles" son necesarias para restablecer la confianza del mercado, de manera a bajar las tasas de interés y reducir los costos de financiación interna y externa del desarrollo, dijo Cavallo.
El régimen argentino de convertibilidad o de caja de conversión utiliza el tipo de cambio como ancla para la estabilidad de precios, y obliga al Banco Central a ajustarse en sus operaciones a la paridad uno-uno entre la moneda argentina y la estadounidense.
La depreciación del real contribuirá a reducir el abultado déficit comercial de Brasil, que en 1998 alcanzó a 6.300 millones de dólares. (FIN/IPS/mo/ff/if/99
