La oficina de ACNUR en Zambia espera una ola de refugiados desde Angola, donde recrudece la guerra entre las fuerzas del gobierno y la rebelde UNITA.
ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) anunció que los angoleños ingresarán a Zambia a través de la localidad de Luena, a 450 kilómetros de la frontera.
La agencia no pudo dar la cifra exacta de refugiados porque la mayoría del personal en Angola fue retirado el mes pasado a raíz de los disparos efectuados contra dos aviones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Más de 1.000 refugiados emigraron a Zambia desde que se reanudó el conflicto en junio, como consecuencia del colapso del acuerdo de Lusaka firmado por los beligerantes en 1994.
La mayoría de los que se dirigen hacia Zambia son hombres y mujeres jóvenes que se negaron a unirse a UNITA, según las versiones que circulan en Lusaka.
Los refugiados fueron presionados para ingresar a UNITA (Unión Nacional para la Liberación Total de Angola), pero optaron por no hacerlo y por eso sus vidas corren peligro ahora, explicó un funcionario de la ONU que reclamó reserva sobre su identidad.
ACNUR advirtió que los refugiados podrían tener dificultades para llegar a Zambia porque la frontera del lado de Angola está plagada de minas.
"El área que deben atravesar los refugiados es un campo minado. Se trata de la zona del este de Huambo, Bailundo y Andulo, escenario de intensas batallas durante los dos últimas semanas, y presentará obstáculos al paso de los refugiados", señaló la agencia.
Zambia recibe refugiados de Angola, Mozambique, Sudáfrica y Zimbabwe desde los años 60. Ahora, alberga a alrededor de 167.000, la mayoría procedentes de Angola, República Democrática de Congo, Ruanda, Burundi y Somalia, según ACNUR.
La mayoría de los refugiados están instalados en el noroeste, en Meheba, y en la provincia occidental de Mayukwayukwa.
El total de refugiados angoleños en Zambia asciende a 149.000. Pero esa cantidad, sin duda, aumentará por el reinicio de la guerra entre UNITA, organización liderada por Jonas Savimbi, y el Movimiento Popular para la Liberación de Angola que conduce el presidente Eduardo dos Santos.
La agencia de la ONU aseguró que cuenta con recursos suficientes para hacerse cargo de la ola de refugiados que se avecina.
El gobierno de Angola y UNITA libraron una guerra civil de 20 años hasta la firma del acuerdo de paz en 1994.
El proceso de paz se detuvo en junio con la muerte del enviado de la ONU Alioune Blondin Beye en un accidente de avión. Beye era considerado la persona clave en las negociaciones.
El conflicto entre ambas partes comenzó en 1975, cuando el país se independizó de Portugal. El gobierno recayó sobre el Movimiento Popular para la Liberación de Angola, que disputa el poder con UNITA desde entonces. (END/IPS/am/mn/ceb/mj/ip pr/99