El presidente electo de Venezuela, Hugo Chávez, afirmó que "no veo ninguna diferencia" entre el gobierno de Cuba y el de Estados Unidos, al anunciar un viaje a Argentina y otros países de América Latina.
Chávez, un teniente coronel retirado de 44 años que triunfó en los comicios del pasado domingo, remarcó que no existe diferencia entre el gobierno de Fidel Castro, el de Bill Clinton o el de otros de América Latina o Europa, ante una pregunta a la relación que mantendrá con La Habana durante una rueda de prensa.
También anticipó que el día 16 viajará a Argentina para entrevistarse con los presidentes de ese país, Carlos Menem, y de Chile, Eduardo Frei.
A ese viaje seguirán en las próximas semanas otras cortas giras a Brasil, Colombia y México, anunció Chávez, con el objetivo común de promover acercamientos estratégicos antes de su toma de posesión el 2 de febrero.
Chávez, quien en 1992 protagonizó un fracasado alzamiento, fue proclamado formalmente este viernes como presidente electo de Venezuela, para el periodo 1999-2004, al haber obtenido 56,2 por ciento de los votos, con una coalición de izquierda y antiguos militares golpistas.
El próximo mandatario anunció también el miércoles que "en las próximas semanas" visitará Washington para entrevistarse con autoridades de organismos financieros multilaterales y del gobierno estadounidense.
Esa visita marcaría la distensión con Washington, que le negó dos veces la visa por su calidad de ex golpista, pero que esta semana manifestó que tendrá derecho ahora a un visado de jefe de Estado, tras su resonante triunfo.
También se anunció la posible participación de la secretaria de Estado, Madeleine Albright, en la toma de posesión de Chávez, como otro gesto distensivo con su principal abastecedor de petróleo.
"Para nosotros la patria es América", dijo Chávez, al precisar su falta de distingos entre Cuba y cualquier otro gobierno continental.
Chávez aseguró que el gobierno saliente de Rafael Caldera mantuvo buenos nexos con el de la Habana "y no tengo la menor intención de dañar las relaciones con el gobierno y el pueblo cubano".
En 1994, después de que su causa fue suspendida por Caldera y salió en libertad con el único castigo por su rebelión que la baja anticipada, Chávez visitó La Habna, donde fue recibido casi como un jefe de Estado por Castro.
Ese viaje, y en especial su aguerrida defensa y elogios del gobierno socialista cubano durante la visita, fueron usados profusamente durante la campaña electoral por sus adversarios, para subrayar que impondría un regimen similar en Venezuela.
Chávez aseguró este viernes que su proyecto es "mejorar, potenciar, las relaciones con Cuba, al igual que con todos los países americanos y del mundo".
Su política exterior tendría como ejes fundamentales, según ha indicado, el profundizar la integración latinoamericana e impulsar los nexos con el sur del continente, a través de Brasil, con el bloque andino del que forma parte, a través de Colombia, y con el Gran Caribe, a través de República Dominicana. (Fin/IPS/eg/ip la/98