El ex dictador Augusto Pinochet, sometido desde hoy en Londres a un juicio de extradición a España, quiere ser identificado con el prócer de la independencia de Chile, Bernardo O'Higgins, fallecido en el destierro en Perú en 1842.
Un "amigo" muy cercano al ex dictador, cuyo nombre se mantuvo en reserva, dijo en Londres al vespertino chileno La Segunda que Pinochet no apelará a sentimientos humanitarios cuando comparezca el viernes ante el juez inglés Graham Parkinson.
El general retirado y actual senador vitalicio será notificado entonces del pedido de extradición del juez español Baltasar Garzón, acogido este miércoles por el ministro del Interior británico Jack Straw, que abrió curso así al proceso judicial.
El informante de La Segunda dijo que Pinochet, de 83 años, se mantiene con su ánimo firme y está "dispuesto a sufrir el destierro de O'Higgins si fuere necesario en la defensa de sus principios".
O'Higgins, quien derrotara a los ejércitos españoles junto al general argentino José de San Martín en 1818, fue el primer Director Supremo del Chile republicano, pero en 1823 fue obligado a abdicar y marchó al exilio en Perú donde murió en 1842.
Pinochet, quien encabezó un prolongado régimen dictatorial desde septiembre de 1973 hasta marzo de 1990, se considera el refundador del Estado chileno y en ese sentido sus partidarios lo comparan con los héroes de la independencia.
Garzón pidió a Gran Bretaña el arresto de Pinochet, materializado el 16 de octubre, y luego su extradición, como parte del juicio que instruye contra las antiguas dictaduras de Chile y de Argentina (1976-1983).
Sobre el ex dictador chileno pesan cargos de genocidio, secuestros, torturas y terrorismo de Estado internacional, vinculados a más de 3.000 crímenes contra los derechos humanos cometidos bajo su gobierno.
La Segunda, un vespertino de la cadena periodística El Mercurio, dijo en un laudatorio informe de una enviada especial a Londres que Pinochet "está dispuesto a sufrir el destierro de O'Higgins para pagar el precio de haber amado a su patria por sobre todas las cosas".
"No será la imagen de un hombre derrotado por las circunstancias", la que Pinochet exhibirá el viernes en el tribunal, sino que se presentará "de impecable terno azul y con el aplomo de siempre", aseguró el rotativo.
El ex dictador se negó, de acuerdo a La Segunda, a comparecer ante el juez Parkinson sin afeitarse o a usar cualquier otro recurso que le permita apelar a sentimientos humanitarios para que se permita su regreso a Chile.
El proceso de extradición, que se abre formalmente el viernes, puede prolongarse por varios meses y hasta un año, de acuerdo a los procedimientos judiciales que determinan períodos de prueba y permiten sucesivos trámites de apelación.
Pinochet viajó fuera de Chile el 22 de septiembre invitado por una fábrica de equipos militares de Gran Bretaña, pero en Londres debió hospitalizarse para ser operado de una hernia discal, lo cual permitió su arresto cuando inciaba la convalescencia. (FIN/IPS/ggr/hd ip/98