Nueve jefes de gobierno del sudeste de Asia juraron solemnemente "no escatimar ningún esfuerzo" para recuperar sus debilitadas economías acelerando la liberalización del comercio y las inversiones.
El compromiso fue anunciado el miércoles, segundo y último día de la cumbre de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) en Hanoi.
"No ahorraremos ningún esfuerzo para restaurar rápidamente la estabilidad financiera y macroeconómica, ayudar a una inmediata recuperación económica y mantener un crecimiento initerrumpido", afirmó la declaración.
Ese fue uno de los tres documentos elaborados por los jefes de gobierno de Birmania, Brunei, Filipinas, Indonesia, Laos, Malasia, Singapur, Tailandia y Vietnam. Los otros dos documentos presentan un plan de acción para los próximos seis años y una "declaración de medidas audaces".
Los documentos dejan en evidencia el deseo de ASEAN de afianzar la integración de una región con una población de 500 millones, y su esperanza de que el aumento del comercio y las inversiones en el área ayuden a superar la peor crisis de las últimas décadas.
La declaración de medidas audaces anuncia que Brunei, Indonesia, Malasia, Filipinas, Singapur y Tailandia adelantarán al 2002 la reducción de aranceles prevista en el tratado de libre comercio vigente en Asia. El plazo de Vietnam es hasta el 2006 y el de Laos y Birmania, hasta el 2008.
"Reconocemos que la crisis económica y financiera que aflige a nuestras economías y sociedades retrasó severamente las metas que nuestros países y nuestras Asociación se habían planteado", dijo la declaración.
"Podremos superar esas dificultades económicas y sociales si cooperamos estrechamente y somos solidarios entre nosotros", agregó.
Más allá de la aceleración del tratado de libre comercio, la declaración afirma que ASEAN liberalizará las inversiones abriéndolas a interesados de la región e incluso ajenos a la ASEAN, con el objetivo de atraer capitales extranjeros y promover las exportaciones.
Las empresas que radiquen inversiones en los países de ASEAN en 1999 y el 2000 recibirán incentivos especiales, sobre todo las que apuesten al sector industrial.
El canciller de Filipinas, Domingo Siazón, señaló que una rápida liberalización obligará a las empresas de ASEAN a ser más competitivas, y que el grupo merece ser felicitado por sus "valientes medidas económicas".
"Si mejoramos la competitividad del sector industrial y si damos fuertes señales de adoptar una política más liberal, los inversores vendrán", sostuvo Siazón.
"Aseguramos al mundo que seguimos comprometidos con la liberalización del comercio y con la integración de nuestras economías. Este es un mensaje muy importante que dirigimos al mundo", declaró Surin Pitsuwan, canciller de Tailandia.
Expertos alertan que acelerar la apertura del mercado y variar las reglas con el fin de atraer inversores implica cambios en las políticas internas que redundarían en costos sociales difíciles de absorber, en un período caracterizado por la baja en los negocios y la pérdida de puestos laborales.
Ese aspecto podría dificultar el aceleramiento de la desgravación arancelaria y los cambios a las reglas de inversión.
El gobierno de Tailandia recibió duras críticas por modificar políticas de largo plazo con el objetivo de atraer a inversores extranjeros. Una de las medidas propuestas es permitir que los extranjeros posean tierras, algo que llevó a los opositores a decir que su país "se está vendiendo".
La declaración de "medidas audaces" anuncia una lista de "nuevas iniciativas" ofrecidas por los países que integran ASEAN.
Indonesia, el país más afectado por la crisis, ofrece a la inversión extranjera 100 por ciento de las acciones de los comercios mayoristas y minoristas, de las fábricas y de los bancos que se detallan en un listado.
Birmania extenderá su programa de promoción de proyectos de inversión por tres años. Filipinas ofrece su comercio minorista a la participación extranjera, lo cual es una medida delicada en un país históricamente cerrado a la inversión foránea.
Tailandia anunció que permitirá la propiedad de 100 por ciento de las acciones de empresas industriales en manos de extranjeros.
Los gobiernos de ASEAN acordaron también el inicio de una nueva ronda de negociaciones para liberalizar el comercio de servicios en 1999.
"Los esfuerzos para poner en marcha reformas a nivel nacional deben reforzarse con las reformas mundiales para reforzar la arquitectura financiera internacional", declararon los líderes asiáticos.
Los jefes de gobierno exhortaron a discutir las reformas financieras y se mostraron preocupados ante el daño causado por los especuladores y las rápidas fluctuaciones de los mercados financieros.
Los miembros de ASEAN decidieron analizar los costos sociales de la recesión, mejorar la capacidad de previsión del bloque respecto de los problemas financieros y promover una "liberalización ordenada del capital".
ASEAN estudiará propuestas de largo plazo tales como la creación de una moneda regional y los empréstitos a largo plazo en monedas nacionales, para reducir la extrema dependencia en la financiación bancaria y limitar los riesgos financieros.
Los líderes de ASEAN tratan de demostrar la unidad del bloque, existente hace 31 años, a pesar de las diferencias manifestadas en tensiones bilaterales y en el mantenimiento de distintas posturas respecto de la recesión.
"Demostramos nuestra determinación de fortalecer la unidad sobre la base de la tradicional 'unidad en la diversidad' y convirtiéndola en una fuerza directriz para elevar la cooperación de ASEAN a otro plano", afirmó Phan Van Khai, primer ministro de Vietnam.
Las diferencias de las políticas macroeconómicas y financieras de los países de ASEAN son evidentes, a pesar de las declaraciones. Algunas divergencias se deben a los sistemas políticos, otras, a las concepciones económicas.
El primer ministro de Malasia, Mahatir Mohamad, dijo que su gobierno no puede ver cómo su economía se hunde en manos de especuladores depredadores, mientras la comunidad internacional "holgazanea".
Tailandia y Singapur subrayaron en cambio la necesidad de mantenerse en el rumbo de la apertura económica para que ASEAN no desaparezca de la agenda de los inversores extranjeros.
La coordinación política respecto del pago de la deuda, por ejemplo, casi no se trató, así como ningún otro asunto que no estuviera referido a las inversiones y el tratado de libre comercio. (FIN/IPS/ap-dv/js-idc/ceb/nc/mj/ip if/98