(Arte y Cultura) MUSICA-SUDAFRICA: Género zulú gana reconocimiento

La región sudafricana de Kwazulu-Natal es la cuna del "isicathamiya", un estilo de canción y baile hecho famoso hace una década por el chispeante grupo Ladysmith Black Mambazo en su álbum Graceland, producido por el músico estadounidense Paul Simon.

El isicathamiya es una formidable forma de expresión negra en la cultura sudafricana, inequívocamente tradicional en las poderosas voces de los cantores zulúes.

Sin embargo, sorprende la contenida vocalización de sus intérpretes y el estilo danzante lento con movimientos felinos, muy diferente de los vigorosos golpes con los pies típicos del baile zulú.

El estilo isicathamiya emergió de una Sudáfrica segregada en un momento en que los negros convertidos al cristianismo no podían cantar temas tradicionales y se los alentaba a entonar himnos.

En los alojamientos para obreros, los hombres se reunían para cantar y quitarse la tristeza de estar separados de sus familias rurales.

Como señaló Patricia Achieng Odondo, una investigadora del Departamento de Música de la Universidad de Natal, "el género agradó particularmente a aquellos que no eran atraídos a los lugares donde corría la cerveza e imperaba la rudeza de las zonas segregadas".

El estilo constituyó una forma de vigorizar "el sentido fraternal" y evitar ser arrastrado por la bebida, la violencia y el crimen.

"Esa clase trabajadora, que formó grupos migrantes en los años 20 y 30, necesitaba un escape para sus frustraciones y así nació el elemento de protesta en el repertorio isicathamiya", agregó Achieng.

Hoy, los estilos varían considerablemente. Los grupos que conservan "el viejo estilo" tienden a estar formados hombres solos que adhieren estrictamente a la ética cristiana. Hamilton Mbatha, líder de un conjunto llamado NBA Champions, recibe a su audiencia en el nombre de Cristo.

"En todo lo que hacemos, creemos que Dios esta ahí", expresó en zulú. "Rezamos antes de cantar, antes de viajar y cuando terminamos de interpretar nuestros temas".

Mientras la mayoría de los grupos reivindica su cristiandad, muy pocos de los nuevos coros en la práctica son tan estrictos. Algunos beben cerveza, otros tienen mujeres cantantes y muchos incorporaron ondular de caderas, el zapateo de las danzas "Mapantsula" y la música "mbaganga".

Richard Machi, líder del grupo New High Brothers, afirmó que su audiencia disfruta mucho más con el nuevo estilo. "Los pasos son más osados y los vocalistas han lanzado un nueva forma de canto llamada 'bombardeo' ".

Si bien el isicathamiya se ha transformado en una forma de expresión cultural altamente competitiva y a veces recompensada, no siempre fue tan conocida. Mbata recuerda cuando sólo lo practicaban un grupo de hombres que se reunían a veces.

Mbata comenzó a cantar cuando era todavía un niño y trabajaba en una granja en la zona rural de Natal. Escuchaba en el gramófono la música de compositores zulúes y personalmente cantaba en casamientos y otros eventos especiales.

En 1967, fue a Durban a buscar trabajo y encontró algunos viejos amigos del distrito rural Babangango, de Natal. Juntos formaron el NBA Champions. El nombre no se debe a la Asociación de Básquetbol estadounidense, sino a la matrícula de los autos de Babangango, que comienza con las letras NBA.

Desde entonces, NBA Champions se ha mantenido aferrado al viejo estilo y actuando en centros municipales o comunitarios de la provincia Kwazulu, o en competencias en la Asociación Cristiana de Jóvenes.

"Cuando empecé a cantar era todavía bien parecido, sin esta barba gris" dijo Mbata. "Ibamos a todas las salas y cantábamos la noche entera. En aquellos días, el mejor cantante podía ganarse una cabra y el segundo cerca de cuatro dólares".

Muchas de esas canciones son evocaciones nostálgicas del hogar, una forma de vida dejada atrás o, muy a menudo, una canción de amor por una muchacha que el cantante jamás olvidará a pesar del casamiento y los hijos. Se trata de canciones del corazón.

"Cuando cantamos isicathamiya, no la escribimos antes. Simplemente viene de donde provenimos. Buscamos hechos y cosas y entonces hacemos una canción", dijo.

Las canciones en sí mismas son parte de una vibrante historia oral. Mbata se aferra al viejo estilo precisamente por ese motivo, para mantener esas narraciones. "Me gusta cantarlo porque así no desaparece", expresó.

Hay pocos intérpretes tradicionales de isicathamiya que se aferren de ese modo a las formales estructuras de estilo, aun cuando su nombre se deriva del verbo zulú "cathama", que significa deslizarse como un gato.

Odondo dijo que el isicathamiya es "una africanización del jubileo cantado afroamericano del siglo XIX ", que emergió de los distritos mineros del carbón de Natal en los años 20. Actualmente, sus comienzos provinciales se han transformado en una expresión a nivel nacional.

En 1988, con la ayuda de Joseph Tshabalala, de la asociación nacional Ladysmith Black Mambazo, se creó la Asociación de Música Tradicional Sudafricana para preservar y desarrollar el fenómeno isicathamiya.

"Comenzamos a ir de una fábrica a otra buscando un patrocinador. Nuestro sueño se hizo realidad y ya no cantamos por cabras: ahora tenemos premios para dar a los músicos. Este año, el premio asciende a 3.500 dólares", dijo orgulloso Theo Mtshali, miembro de la Asociación.

"Como estamos en recesión, queremos que con ese dinero los grupos sobrevivan. Nosotros preservamos la música para que no desaparezca y, al mismo tiempo, promovemos la bondad y la moralidad. Nuestros miembros no beben ni fuman y permanecen en el camino correcto", aseguró.

"Queremos que el isicathamiya pueda ser llevado a ultramar para que la gente de allá cante la misma música a su manera", añadió Mtshali.

Desde sus comienzos como una manera de mantener juntos a los trabajadores en sus alojamientos, el isicathamiya ha crecido como una significativa expresión cultural sudafricana y, a pesar de su fusión con elementos de la cristiandad occidental, es defendido como una forma de expresión cultural del pueblo zulú.

La tradición del canto zulú, que gana cada vez más reconocimiento internacional, sólo se ha visto aumentada con la sorprendente unión de coros con estilo felino. (FIN/IPS/tra-en/aw/mn/ego-ml/cr/98

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