El mercado bursátil de Venezuela reaccionó hoy con un alza récord de 22 por ciento, a la pacífica elección como presidente de Hugo Chávez el domingo, y a sus mensajes posteriores de tranquilidad para los agentes económicos.
El optimismo se contagió al bolívar, que se apreció frente al dólar, al cotizarse este martes a 571 bolívares frente a 575 del viernes, mientras treparon acciones marcadoras como la Electricidad de Caracas, cuyo valor por unidad aumentó 30 por ciento al cierre de la jornada.
Ya el lunes, feriado financiero en Venezuela, los recibos americanos de depósito (ADR) de la telefónica local CANTV habían subido un punto en el mercado de Nueva York, al igual que los papeles de la deuda locales.
La Bolsa de Caracas cerró su sesión con su índice en 4.798 puntos, 870 por encima del viernes, en una estruendosa respuesta a "la revolución pacífica que se produjo en las urnas", comentó el presidente de la entidad, Alejandro Salcedo.
"Este es un mercado de expectativas, que reacciona favorablemente al despejarse la incertidumbre, gracias también a los mensajes conciliadores del presidente electo", añadió.
Chávez, teniente coronel que en 1992 encabezó una cruenta asonada, recibió el domingo más de 56 por ciento de los votos, tras una campaña muy populista, en la que le acompañó la izquierda y generó miedo en los inversores internos y externos.
Los temores siguieron el radicalismo de Chávez, su favoritismo entre los pobres que plenaron las plazas para oírlo, sus anuncios de alzas salariales y otras medidas de gasto público, y el temor a que un resultado electoral ajustado desatase la violencia.
Sus anuncios de mayor intervencionismo económico, el apoyo al ahora presidente electo de empresarios proteccionistas, la posible reversión de la apertura petrolera y las desmentidas versiones de una moratoria de la deuda, crearon lo que se llamó un "efecto Chávez", que puso en cautela a los inversores.
Salcedo afirmó que "el efecto electoral ya descontó los capitales y ganancias que tenía que descontar antes del domingo", en un año signado por la caída bursátil.
Sin embargo, la calma sepultó los temores de desórdenes o golpe, el escrutinio arrojó una victoria contundente, los vencidos y el gobierno reconocieron al ganador, las celebraciones fueron masivas pero tranquilas la noche del domingo, y Chávez llamó a la "unidad nacional".
También pidió calma y reconciliación, reiteró que sostendrá los pagos de la deuda externa aunque buscará su reformulación, dijo que no impondrá controles cambiarios ni creará nuevos impuestos, y agregó que reducirá la burocracia.
Asesores de Chávez como su colaborador en materia de petróleo Alí Rodríguez dijeron que el nuevo gobierno proyecta reducir a tres puntos del producto interno bruto (PIB) el déficit fiscal que actualmente trepa a nueve puntos o 9.000 millones de dólares.
Rodríguez reiteró la decisión de Chávez de respetar los recortes de producción acordados en la Organización de Países Exportadores de Petróleo para apuntalar los precios del crudo.
Añadió que se hará una "revisión" de los contratos de apertura petrolera, pero sin desmantelarlos, cuando en 1999 significarán inversiones por 5.000 millones de dólares.
De cualquier modo, el año 1999 deja pocas esperanzas para aumentar los ingresos por la vía de las exportaciones petroleras, dado el carácter estable de los bajos precios del recurso. Al cierre de 1998 quizá no ingresen sino 11.400 millones de dólares frente a 18.000 millones de hace dos años.
El nuevo presidente, quien se instalará en el poder el 2 de febrero, aseguró que su gobierno brindará mayores garantías a los inversores porque les ofrecerá "el bien preciado de la seguridad jurídica", mediante la reforma del poder judicial por su propuesta asamblea constituyente.
En su apoyo, el ex presidente estadounidense Jimmy Carter, cabeza de un grupo de observadores de la elección, recomendó a los inversionistas "descartar cualquiera de las evaluaciones negativas previas que fueron ampliamente divulgadas".
"Yo le diría a los inversionistas que hay que observar el desarrollo de las circunstancias cuidadosamente. Creo que las señales que dio Chávez luego de su elección fueron todas muy positivas. Deben mirar favorablemente a Venezuela", abundó Carter.
Salcedo destacó la valoración Carter hizo de la elección, a la que llamó "revolución pacífica", así como la escogencia inmediata que hizo Chávez de un prestigioso militar como futuro ministro de Defensa, congelando rumores de fractura castrense.
Los rumores son de que Chávez se acompañará también de "figuras de reconocida trayectoria y seriedad en el campo económico", recordó Salcedo, como el ex ministro de Agricultura Hiram Gaviria y el organizador del sistema tributario Ignacio Moreno.
"Las palabras del presidente electo recogen muchos elementos que van en la dirección correcta", estimó Luis Soto, director ejecutivo del Consejo de Promoción de Inversiones, quien se pronunció también porque Chávez afiance su mensaje tranquilizador con el rápido anuncio de su equipo económico.
El titular de la asociación de corredores de bolsa de Caracas, Luis Benshimol, dijo a IPS que "el discurso de Chávez fue muy positivo, y hay una luna de miel que puede durar hasta que tome el poder".
Salcedo coincidió en que "los ojos y el dinero en este momento se han vuelto hacia Venezuela", pero estimó que la bonanza mostrada con una jornada como la de este martes "se mantendrá en tanto y en cuanto lo haga la coherencia".
"Si las expectativas son falsas, también lo serán las ilusiones de ahora", añadió.
"En este momento entre los agentes económicos hay alegría", dijo el conductor de la casa de valores Italcambio, Carlos Dorado. "Esperemos que se mantenga a lo largo del año próximo".
Una muestra del clima de normalización poselectoral fue decisión de Chávez de participar en la inaguración de la asamblea anual de la Cámara Venezolana Americana, después que esa entidad de empresarios estadonidenses se pronunció en forma pública contra sus propuestas meses atrás.(Fin/IPS/jz/eg/la-if/98