La captura en Perú de los presuntos mandos en actividad de Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) demostró que ambas fuerzas guerrilleras aún poseen estructuras militares, pese a las versiones contrarias .
El día 2 fue capturada en el Alto Huallaga, en la selva nororiental, Jenny Rodríguez, una psicóloga de 44 años conocida como "camarada Rita", fundadora de Sendero Luminoso en 1980 y considerada la principal dirigente en libertad de ese grupo guerrillero.
Versiones periodísticas aseguran que fue entregada, atada de pies y manos, por algunos de sus compañeros, que decidieron negociar su rendición, pero la policía no confirmó esta historia y adjudica el mérito de la captura a su labor de inteligencia.
Dos días despues, se produjo la captura del "comandante Yoel", a quién la policía se negó a identificar pero lo presentó como el número tres del MRTA, después de Víctor Polay, quien se encuentra preso, y de Hugo Avellaneda, supuestamente en el exterior, en Europa o en Bolivia.
Estas capturas, por los rangos atribuidos a los detenidos, contrastan con las promesas formuladas por el presidente Alberto Fujimori en abril de 1997, después del espectacular rescate de los rehenes en la embajada de Japón en Lima y el aniquilamiento total de la columna guerrillera del MRTA que los secuestró.
Fujimori anunció entonces que 1998 sería el año del exterminio del MRTA y admitió que la liquidación de Sendero Luminoso demoraría más, aunque aseguró no constituiría nunca más un peligro de importancia.
"Los senderistas que no han sido apresados han desertado en masa, desmoralizados y sólo subsisten pequeños grupos que vagan a salto de mata por la selva, escapando del ejército y la policía", dijo el mandatario peruano.
Pero a partir de recientes informaciones oficiales, analistas independientes consideran que las dos fuerzas guerrilleras no están definitivamente derrotadas.
"El gobierno y la sociedad han bajado la guardia y las encuestas revelan que la violencia política ocupa el lugar 25 como tema de preocupación ciudadana", dijo el sociólogo Raúl González, de Desco, la más prestigiosa organización no gubernamental (ONG) de Perú.
"Tal vez estamos frente al famoso paso atrás del que habla Mao en su famoso manual guerrillero, y Sendero Luminoso se agazapa a la espera del retorno de su oportunidad", opinó el general de la policía retirado Héctor Jhon Caro.
El sociólogo Gonzalo Portocarrero anota por su parte que "el fracaso de las expectativas despertadas por el modelo económico liberal impulsado por Fujimori, el persistente desempleo y la miseria rural aportan condiciones para el surgimiento y la expansión de la violencia".
"Uno de los escenarios probables para el año 2000 es un Sendero Luminoso focalizado, sin posibilidades de amenazar como antes la seguridad nacional, pero todavía en condiciones de desestabilizar algunas regiones", comentó el filósofo Jaime Antezana.
Todos concuerdan en que las capturas de la dirigente senderista Rodríguez en el Alto Huallaga y la del "comandante Yoel", jefe de una columna del MRTA, demuestran que ambos movimientos son vulnerables pero tienen vigencia.
Un mes atrás, una incursión sobre varias aldeas campesinas en la margen izquierda del río Apurimac, en la selva sur-central, desmentía la tesis de que Sendero Luminoso carece de iniciativa militar y política, y se limita a sobrevivir al amparo de la selva amazónica.
Según otra información, el MRTA posee todavía capacidad operativa, pues una pequeña pero agresiva columna guerrillera cerró por algunas horas una carretera y atacó edificios públicos en tres aldeas de la selva norcentral.
En opinión de los mencionados analistas, el MRTA se encontraría cerca de un definitivo colapso político y militar, pero Sendero Luminoso tendrá una supervivencia más prolongada.
Antezana y Caro sostienen que las dos organizaciones guerrilleras dependen ahora en gran medida del narcotráfico, un factor que debe tomarse en cuenta para evaluar sus posibilidades de supervivencia.
González y el historiador Eduardo Toche, a cargo del archivo sobre violencia política de Desco, afirmaron que las fuentes financieras de ambos grupos guerrilleros se convierten en significativas en sus movimientos de recomposición tras la caída de sus líderes.
El "comandante Yoel" operaba en Cutivireni, una región productora de coca, y reclutaba militantes para su centro de instrucción guerrillera entre jóvenes campesinos afectados por la caída de precios de la hoja. La región del Alto Huallaga en donde cayó Rita, es también una importante zona productora de coca.
Toche y González subrayaron que Oscar "Feliciano" Ramírez, considerado como el sucesor de Abimael Guzmán como líder de Sendero Luminoso, es un mito creado por la desinformación y los titulares de la prensa local.
Feliciano "no tiene peso nacional, dirige unos 80 a 100 hombres y mujeres en la zona de Viscatan, en la selva surcentral, pero no tiene control de los grupos que operan en la selva central, que son importantes por su proximidad con las fuentes financieras del narcotráfico», dijo González.
Según sus investigaciones, después de la caída de Guzmán y de Osman Morote, el histórico "número dos" de Sendero Luminoso, Margie Clavo ejerció la dirección política del grupo guerrillero hasta su captura en 1996, cuando fue sustituida por otra mujer, Rita. (FIN/IPS/al/ag/ip/98