El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) comenzó la repatriación voluntaria de más de 2.500 etíopes que se encontraban en el Campo Daabab, en la zona nororiental de Kenia.
La repatriación se puso en marcha a menos de un mes que el presidente keniano Daniel Arap Moi culpara a los refugiados de ser la causa principal de inseguridad en la región y pidiera a ACNUR que los reubicara en otro país.
Hace tres semanas, bandas armadas sospechosas de integrar el Frente de Liberación Oromo (FLO), el principal grupo guerrillero que lucha en Etiopía, junto con kenianos locales, masacraron a 142 somalíes.
Los atacantes se apoderaron de miles de cabezas de ganado y camellos y capturaron a más de 50 aldeanos, en su mayoría mujeres jóvenes, en el distrito fronterizo de Wajir, 650 kilómetros al noreste de Nairobi.
Millicent Mutuli, funcionaria de información pública de ACNUR en Nairobi, afirmó que las repatriaciones no tienen nada que ver con las quejas de Moi. "La repatriación ha sido una práctica constante en los campos de refugiados", declaró a IPS.
El complejo de Daabab, constituido por los campamentos Ifo, Dagahaley y Hagadera, cubre un área total de 50 kilómetros cuadrados en un radio de 18 kilómetros de la población de Daabab. En octubre de este año contaba con una población de 108.809 refugiados.
Kenia tiene además otro campamento, Kakuma, con 175.000 refugiados, en la frontera con Sudán.
La mayoría de los refugiados que se encuentran en Kenia provienen de Somalia, Etiopía, Eritrea, Sudán, Ruanda, Burundi, Uganda y la República Democrática de Congo (RDC).
Las repatriaciones se iniciaron hace una semana con el transporte aéreo de 98 refugiados desde Daabab hasta la población fronteriza de Moyale en una operación que, según se prevé, deberá continuar durante las próximas cinco semanas.
"Muchos de ellos viajaron por primera vez en avión y expresaron su alegría porque finalmente podían volver a sus hogares", dijo Mutuli, quien supervisó la operación.
Dentro de Etiopía, cada refugiado recibe una ración de víveres para nueve meses consistente en cereales y aceite, así como una módica cantidad de dinero, para ayudarlo a viajar desde Moyale, 700 kilómetros al noreste de Nairobi, e iniciar una nueva vida después de años de exilio.
Más de 50.000 etíopes huyeron a Kenia en 1991 tras el colapso del régimen de Mengistu Haile Mariam y una severa hambruna. Según Mutuli, la mayoría de los etíopes de los campamentos de refugiados en Kenia han retornado sostenidamente a sus hogares.
Está previsto que otros grupos adicionales de refugiados sean repatriados a Gode y Jijiga, en Etiopía, a comienzos de 1999, añadió Mutuli.
Este año, ACNUR ayudó al retorno de 781 somalíes, 605 etíopes, 257 ugandeses y otros 148 de diferentes países africanos, lo cual eleva el total de repatriados a 1.815.
Otros 2.700 refugiados fueron enviados este año a terceros países como Estados Unidos, Australia y Canada. El primero lidera el grupo porque ha recibido a 1.465 personas, y lo sigue Australia con 429, Canadá con 231 y Nueva Zelanda con 215.
Más de 30.000 refugiados procedentes de Kenia han sido reinstalados en el exterior desde que comenzó el programa. Según Mutuli, esto ha convertido a Kenia en el único país que ha reubicado más refugiados en terceros países.
No obstante, la idea de reinstalar a los refugiados en nuevos países está dando dolores de cabeza a ACNUR.
Amina Bakran Aden, de Somalia, junto con sus dos hijas de cuatro y tres años, "desertó" del Campo Daabab hace una semana y se instaló frente a la oficina de ACNUR en Nairobi para exigir ser enviada a Canadá.
"Durante los últimos tres años he querido reunirme con mi hija mayor en Canadá, pero esta gente (ACNUR) no quiere ni oir hablar del asunto. Yo dejaré este lugar únicamente para ir a Canadá y ningun otro país", dijo.
Más de 30 refugiados somalíes, incluyendo Aden, han escapado de Daabab y desean ser reinstalados en otros lugares. "Esto ha pasado a ser un caso policial", dijo Mutuli. "Hemos hecho lo posible para mantenerlos a salvo en un campo de refugiados. Ahora, cualquier cosa que pase, no será culpa nuestra…" (FIN/IPS/tra- en/pn/mn/ego-ml/pr/98