Cheddi Jagan, hijo de la presidenta Janet Jagan y considerado "la oveja negra" de la política de Guyana, renunció a su banca parlamentaria y al gobernante Partido Popular Progresista (PPP), tras declarar que no quiere tener vínculos con un partido de obsecuentes.
Cheddi Jagan, cuyo homónimo padre fue presidente de Guyana hasta su muerte en marzo de 1997, calificó de "geriátrico y fosilizado" el liderazgo de su madre.
"Renuncio al PPP porque me he dado cuenta que no puedo tener con plena conciencia la tarjeta de un partido que me liga al marxismo-leninismo y actúa bajo los principios del centralismo democrático", dijo Jagan, de 49 años.
"El centralismo democrático ha creado una generación de líderes fosilizados y geriátricos que comandan a un grupo de políticos que sólo saben decir sí", afirmó.
Janet Jagan, madre del renunciante parlamentario, nació en Estados Unidos y ha vivido en Guyana los últimos 53 años. Tras casarse con Cheddi Jagan padre, a quien conoció en Chicago, llegó al país cuando era una joven mujer de 24 años. En octubre cumplió 78.
Janet Jagan aceptó que el PPP lanzara su candidatura para las elecciones en diciembre último, en reemplazo de su fallecido esposo, que había encabezado el partido desde su creación en 1950.
El PPP, en el que son mayoría los dirigentes de ascendencia india, nunca renunció oficialmente al socialismo, a pesar de que promueve la eliminación de la Constitución de toda referencia a esa ideología política.
En un claro ataque contra su madre, Cheddi Jagan dijo que el partido fundado por su padre está fuera de la realidad actual y se rehúsa a abrir la economía a la inversión extranjera, como ha solicitado repetidas veces el sector privado.
También declaró que su madre lidera una nación que se encuentra al borde de la división étnica.
"Tenemos un dado cargado", dijo a los periodistas al anunciar su renuncia al partido y al parlamento, en el que entró hace menos de un año.
Jagan está preocupado porque el gobierno parece alentar a los guyaneses a seguir votando según lineamientos étnicos. La comunidad india apoya al PPP y los negros respaldan al Congreso Nacional del Pueblo (PNC), la principal fuerza opositora.
A su juicio, la política de Guyana, fundamentada sobre bases étnicas, es "una bomba de tiempo". Recordó los disturbios de los años 60, que dejaron un saldo de 150 muertos, millones de dólares en daños a propiedades y una ola masiva de emigración hacia Estados Unidos y Gran Bretana.
Pero miembros del PPP restaron importancia a la dimisión de Jagan, por entender que se trata de un exabrupto sin importancia del radical y extravertido hijo de la presidenta.
Janet Jagan no comentó la actitud de su hijo y altos funcionarios se mostraron renuentes a tratar la cuestión.
Jagan hijo volvió a Guyana desde Queens, Nueva York, poco después que el PPP triunfara en las elecciones de 1992. Tal como hiciera su padre 30 años antes, instaló un consultorio odontológico en los suburbios de Georgetown.
En 1997 se presentó como candidato al parlamento y logró un lugar entre los 65 diputados.
Los primeros indicios de que Jagan podía amargar la vida al PPP se advirtieron hace un año, cuando irrumpió por la entrada principal en la compañía de electricidad para protestar por los cortes de energía, que dañaban su equipo quirúrgico.
Para muchos, esa actitud respondió al público malestar frente a una empresa del Estado plagada de problemas y puesta ahora en venta.
Ahora, su alejamiento del PPP pone bajo el fuego de la crítica a esa organización. "Hay clara evidencia de que la juventud es dejada de lado de la política partidaria", observó Mark Kirton, de la Universidad de Guyana.
Kirton, un experto en asuntos de América Latina y el Caribe, señaló que la renuncia de Jagan "podría ser vista como una brecha en la estructura del partido", que no atendería las aspiraciones de la juventud guyanesa.
"Ese es mi punto de vista y no me importa que algunos digan que no es científico", agregó.
Kirton se refirió también a la suspensión de Aubrey Norton, el secretario general del PNC, de 40 años de edad. Norton fue suspendido por discutir asuntos confidenciales de ese partido opositor en reuniones sociales. (FIN/trad/bw/cb/ego-ff/ip/98
