Una encuesta nutricional sobre la población infantil de Corea del Norte arrojó resultados preocupantes, que obligan a las autoridades del país y a la comunidad internacional a enfrentar con seriedad el problema, dijeron funcionarios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La encuesta determinó que 60 por ciento de los niños norcoreanos entre seis meses y siete años de edad padecen grados de desnutrición moderados y severos, mientras que 16 por ciento presentan un estado más grave, de desnutrición aguda.
Esos índices de desnutrición ponen en peligro el futuro de las nuevas generaciones, advirtió Judy Cheng, directora de la oficina de Asia y Europa del Programa Mundial de Alimentos (PMA), una agencia de la ONU.
El PMA, el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y la Unión Europea (UE) realizaron la encuesta por muestras elegidas al azar, durante septiembre y octubre, en 130 de los 220 condados del país asiático.
Las tasas de desnutrición reveladas por el sondeo son las más altas de Asia oriental, superiores a las de Camboya, Laos y Vietnam. Sólo Bangladesh (18 por ciento), India (18) y Sri Lanka (16) presentan en Asia índices superiores de desnutrición.
La investigación, efectuada por 18 equipos dirigidos por personal de las agencias internacionales, arrojó una tasa de desnutrición crónica o raquitismo, medida de acuerdo a peso por edad, de 65 por ciento, lo que se estima muy elevado.
El resultado de las mediciones demuestra las consecuencias a largo plazo de la carencia de alimentos nutritivos, dijo Cheng.
En el caso de Corea del Norte, esos datos significan que la población infantil afectada ha sido alimentada inadecuadamente durante.
A diferencia de otros países en desarrollo, Corea del Norte no estaba habituada a afrontar esa clase de problemas. Los expertos norcoreanos capacitados en áreas médicas ignoran cómo manejar la desnutrición, precisó la funcionaria del PMA.
El mensaje que la encuesta deja a las autoridades norcoreanas, que participaron del estudio y resultaron sorprendidas y conmovidas por sus resultados, y a la comunidad internacional, es la evidencia de necesidades reales, comentó Cheng.
La necesidad no se refiere de manera exclusiva al suministro de un volumen determinado de alimentos, sino también a la atención de las carencias de determinados grupos vulnerables.
Una de las mayores urgencias en Corea del Norte es el área de la salud, especificó.
Los funcionarios internacionales admitieron que algunas señales empíricas, recogidas por observadores, personal del PMA y de organizaciones gubernamentales, dan cuenta de que el estado de los niños en guarderías y jardines de infantes mejoró el último año.
Pero se trata de evidencias anecdóticas, sin base científica, aclararon los funcionarios internacionales.
Las agencias de la ONU y la UE otorgaron "un volumen elevado de asistencia y naturalmente, se obtienen algunos resultados", explicó Kirsi Madi, jefa de la Oficina de UNICEF en Corea del Norte.
La encuesta arrojó un dato interesante relacionado con el tema del género: la tasa de desnutrición se ubicó en 20 por ciento para los niños, mientras que apenas llegó a 11 por ciento en las niñas.
En Corea del Norte no existe discriminación de género en materia de alimentación de niños y niñas, como se verifica en otros países. Todos reciben la misma ración, sin diferencias de género, notó Cheng.
El sondeo demostró que la desnutrición aguda varía de acuerdo con la edad de los niños norcoreanos, que presentan las tasas más altas, 30 por ciento, entre los 12 y 24 meses, un momento que coincide con la interrupción de la lactancia materna.
Se trata también de la etapa del desarrollo en que la desnutrición puede dañar en forma permanente el crecimiento físico e intelectual de los jóvenes.
Con índices tan altos, de 30 por ciento, la morbilidad y la mortalidad del país también aumentaron, advirtió Cheng durante la presentación de los resultados de la encuesta, este miércoles, en Ginebra.
El informe de las agencias internacionales destaca que la desnutrición aguda afecta a 18 por ciento de los ninos de un año de edad, lo que refleja que las madres tuvieron ingestión inadecuada de alimentos durante el embarazo y la lactancia.
Madi declaró que las agencia de la ONU y la UE reaccionaron con profunda preocupación al conocer los resultados de la encuesta.
La asistencia alimentaria es muy importante e indudablemente necesaria, pero no es suficiente, puntualizó la funcionaria de UNICEF radicada en Pyongyang.
Además de la cooperación con alimentos, en Corea del Norte se requieren cuidados médicos y atención para los niños, precisó. (FIN/IPS/pc/ff/he/98