Las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) atacaron la ciudad de Mitú, con un saldo indeterminado de agentes muertos y prisioneros, menos de una semana antes del previsto inicio del diálogo con el gobierno.
Luego del ataque a Mitú, capital del departamento de Vaupés 525 kilómetros al sudeste de Bogotá habitada por 15.000 personas, las FARC acusaron al Ejército de pretender sabotear las conversaciones de paz.
El informe oficial indica que el ataque, que se produjo este domingo, dejó totalmente incomunicada a Mitú, por lo que este lunes se desconocía el número de víctimas que habría dejado la operación insurgente.
El choque obligó al presidente Andrés Pastrana a adelantar su retorno de Caracas, donde había comenzado este lunes una visita oficial para analizar con su homólogo Rafael Caldera el comercio bilateral, el conflicto de límites en el golfo de Venezuela y el plan de paz del presidente colombiano.
Pastrana decidió regresar este mismo lunes a Bogotá después de su entrevista con Caldera, y no el martes, como preveía, "ante la delicada situación del orden público en el departamento de Vaupés".
El director de la Policía, general Rosso Serrano, afirmó que entre 800 y 1.000 guerrilleros de las FARC ingresaron a Mitú, atacaron la estación de policía y los comercios, ocuparon la sede de gobierno, dinamitaron el aeropuerto y dejaron la localidad totalmente incomunicada.
En la zona se encontraban cerca de 120 agentes de policía de los que oficialmente se reportaron cuatro muertos. Informaciones extraoficiales señalan que habría al menos 60 muertos y que la suerte de los agentes restantes se desconoce.
El general Edgar Lesmes, jefe de operaciones de las Fuerzas Armadas, dijo este lunes que las tropas encontraron dificultades para llegar a Mitú por el mal tiempo que reina en la zona y la destrucción del aeropuerto.
El ataque a Mitú y el posible secuestro de agentes de policía fue interpretada por algunos analistas como parte de la estrategia de las FARC para aumentar el número funcionarios de seguridad prisioneros para canjear por guerrilleros presos.
Las FARC propusieron al gobierno realizar antes del comienzo del diálogo un intercambio de los 248 militares y policías en su poder antes del ataque a Mitú, por 452 guerrilleros detenidos en varias cárceles.
En un mensaje enviado por el máximo comandante de las FARC, Manuel Marulanda (Tirofijo), al comisionado presidencial para la Paz, Víctor Ricardo, el jefe guerrillero criticó la actitud del gobierno en relación con la propuesta.
Según Marulanda, se acordaron con Ricardo dos fechas tentativas, el 25 de octubre o el 4 de noviembre, para "conocer con los tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial) los resultados de las gestiones" para el canje de prisioneros, que fueron desautorizadas por el gobierno.
En la misma carta, fechada el 20 de octubre y divulgada este lunes, el jefe guerrillero dijo tener conocimiento de que "altos mandos militares han creado comandos especializados para sabotear la instalación de los diálogos atentando contra el presidente (Pastrana) o mi persona".
Estos comandos "han difundido la versión de la existencia de paramilitares en San Vicente", localidad donde se efectuaría el diálogo, lo cual pone en peligro la seguridad de los asistentes, agregó Marulanda.
El diputado independiente y ex guerrillero del M-19 Antonio Navarro sostuvo que la carta de Marulanda demuestra que el proceso de diálogo "va a ser largo y difícil".
Pastrana ordenó, a pedido de las FARC, el repliegue de los militares de un área de 43.000 kilómetros cuatrados, que comprende cinco municipios del sudeste de Colombia, el cual debe concluir este sábado.
"El canje de prisioneros es un primer obstáculo en el diálogo", porque el gobierno quiere que sea parte de las negociaciones y "la guerrilla pide que se haga antes del inicio de las conversaciones", dijo Navarro a IPS.
Para el senador independiente Jaime Dussán, los señalamientos de Marulanda al Ejército tienen alguna validez porque "hay gente que no está hablando claro aunque consideran que con las negociaciones el gobierno se va a 'entregar' a la guerrilla".
En opinión de Dussán, las Fuerzas Armadas "deben hablar de frente al país y exponer sus criterios respecto al proceso de paz que se inicia".
El comandante de las Fuerzas Armadas, general Fernando Tapias, calificó de "imputación falsa" la afirmacione de Marulanda.
Según el jefe militar, la acusación "solo puede obedecer" a la intención de las FARC de dilatar el proceso de paz y de interferir en una decisión que ya el gobierno ha tomado.
Este domingo las FARC atacaron también la localidad de Planadas, en el departamento de Tolima (centro), con un saldo de dos soldados muertos, un guerrillero herido y otro capturado. (FIN/IPS/yf/mj/ip/98
