Campesinos marroquíes realizan una tarea de salvación en la planicie de Zaere: bajo la supervisión de especialistas, plantan cientos de ejemplares de argane, un árbol en peligro de extinción exclusivo de Marruecos.
Zaere, cercana a la capital Rabat, fue escogida por el Departamento de Agua y Bosques como el nuevo hábitat del argane para salvarlo de la desertificación que acorrala la sureña región semiárida de Hara, de donde proviene.
"El número de árboles se había reducido en forma alarmante", confirmó el decano de la Facultad de Ciencias en Agadir, Ahmed Mouhtadi, quien coordina el proyecto de salvación de esta especie.
Hace 2000 años, los arganes abundaban en un área de 1,2 millones de hectáreas. En la actualidad, el árbol sólo está presente en 823.000 hectáreas.
La planicie de Zaere fue elegida cuando los expertos determinaron que en el pasado esta especie de árbol crecía en la zona. Bou Bakr Rabej, de 70 años, recuerda que los oficiales de la colonia francesa contaban los arganes, mientras que sus padres se referían siempre a la longevidad de esta especie.
Se cree que esa presencia del argane en la parte central de Marruecos tuvo su origen en el traslado de especímenes por parte de nómades procedentes del sur, quienes llegaron hasta lugares como Zaere en busca de pasturas.
Sin embargo, hasta ahora no se ha conseguido la reproducción natural del argane en Zaere, y los especialistas aún no descubren cuál es el motivo. Ahora, parecen decididos a intentar la polinización artificial.
"Esta prueba es fundamental para reconstituir la población del árbol en esta zona", dijo el representante local del Departamento de Agua y Bosques, Mohamed Merzougui.
Mouhtadi insistió en que el proyecto es importante porque "durante los últimos siglos el argane contribuyó a detener el avance del desierto".
A medida que desaparece el árbol, también sufren los ecosistemas. Plantas más pequeñas que albergan animales mueren cuando se quedan sin sombra y sin las raíces del argane, mientras los suelos se erosionan y aumenta la aridez.
El árbol está presente en la historia de Marruecos, mencionado o descrito en las cartas que enviaban los primeros delegados de países como Francia o Estados Unidos hacia esta región del norte de Africa.
El argane es un sobreviviente y tiene capacidad para resguardarse contra catástrofes naturales.
Cuando hay sequía, pierde hojas y así disminuye sus requerimientos alimenticios. Y apenas caen unas gotas de lluvia, reverdece y vuelve a producir una especie de dátiles que sirven para alimentar ovejas y fabricar aceite.
El aceite de argane es conocido como "arganeia spinosa", y se usa en la fabricación de cosméticos y medicamentos.
Por otra parte, el árbol produce una madera de alta calidad que ha permitido obtener fama mundial a los artesanos de Essaouira, cerca de Haha.
El Departamento de Agricultura anunció el plan de cooperar con la recuperación del argane mediante la creación de un parque especial en el centro del país, que tendrá una superficie de 54.000 hectáreas.
"Pensamos que permitirá reintroducir especies vegetales y animales que habían desaparecido hace mucho tiempo", dijo Merzougui.
La profesora Zoubeida Cherrouf, de la Universidad Mohammed V de Rabat, organizó un grupo de mujeres campesinas para contribuir a la salvación del árbol plantando una pequeña superficie cada año. "No es suficiente, pero es un comienzo".
Según dijo, la deforestación de 600 hectáreas por año es un factor que amenaza al árbol y también una fuente de ingresos esencial para casi tres millones de campesinos. "Si no hacemos nada para regenerar este árbol, desaparecerá en 20 años", advirtió. (FIN/IPS/tra-en/aa/sas/lc-ml/en/98