El gobierno de Honduras logró desactivar la protesta indígena con la promesa de atender las demandas de las etnias, pero persiste la movilización de los maestros, que hoy cumplieron dos semanas de huelga contra la congelación de su salario.
Unos 2.000 integrantes de las etnias lenca y chortí comenzaron el viernes a retirarse de las vías de acceso al parque arqueológico de Copán, asiento en el occidente del país de ruinas de la civilización maya.
El desalojo de los predios que comunican con las ruinas mayas de Copán es parte del acuerdo firmado por el gobierno y el Comité Cívico de Organizaciones Indígenas de Occidente (Copin).
El Copin también anunció este sábado la suspensión de la huelga de hambre que varios de sus militantes mantenían en la Nunciatura Apostólica de Tegucigalpa, luego de que el representante del Vaticano, Luigi Conti, exhortara al gobierno a poner fin al problema.
El ministro de la Presidencia, Gustavo Alfaro, informó que el gobierno entregará a las etnias más de 1.220 hectáreas de tierras en el plazo de un mes, otorgará personería jurídica al Copin e investigará el asesinato de 41 dirigentes indígenas en los últimos cinco años.
Una comisión integrada por funcionarios y representantes de las etnias entregará el último día de este mes un informe completo sobre la situación de los indígenas en materia de salud, educación y vivienda, dijo Alfaro.
Pero otros asuntos, como la denunciada existencia de grupos paramilitares supuestamente contratados por el empresario Miguel Facussé, uno de los hombres más ricos de Honduras, para despojar de sus tierras a los garífunas o negros en la costa atlántica, quedan pendientes de "estudio e investigación" por parte del gobierno.
Facussé es tío del presidente Carlos Flores y es uno de los principales contribuyentes a las campañas electorales. Se le acusa desde hace varios años de amenazar y desalojar a campesinos de sus tierras, pero no hay pruebas que respalden esas afirmaciones.
Los indígenas se movilizaron para exigir el cumplimiento de promesas formuladas por el predecesor de Flores, Carlos Reina, (!994-enero de 1998), y sitiaron prácticamente la capital.
La protesta indígena tomó por sorpresa al gobierno, que enfrenta asimismo una huelga de maestros de enseñanza media que rechazan la tentativa de congelación de sus salarios.
Flores dijo este sábado que los maestros deben abandonar su postura intransigente si pretenden continuar las negociaciones, pues "bajo presión no habrá acuerdos ni diálogo".
El presidente instó a los maestros a "imitar el ejemplo de las etnias" y a dialogar "en forma razonada y consensuada".
Flores convocó para este lunes a su gabinete para evaluar la huelga de los maestros. Las negociaciones están empantanadas.
El estatuto del Docente, una de las principales conquistas magisteriales, indica el aumento salarial que debe otorgar cada año el gobierno. Pero las autoridades se niegan a conceder el incremento de este año, arguyendo la necesidad de estabilizar las cuentas públicas.
Un grupo de 17 maestros se mantiene en huelga de hambre desde el martes en los bajos del Congreso Nacional, y portavoces del gobierno advirtieron este sábado que se ordenará su desalojo por la fuerza si las protestas callejeras continúan.
Por su parte, los maestros anunciaron para la semana próxima el bloqueo de carreteras. (FIN/IPS/tm/ff/lb pr/98