La reducción de la pobreza en Chile implica también una baja de los altos índices que mostraba la desnutrición hasta comienzos de esta década, según un experto con oportunidad del Día Mundial de la Alimentación.
Carlos Furche, director de la Oficina de Planificación Agrícola (Odepa) del Ministerio de Agricultura, afirmó que el país presenta más bien problemas de malnutrición, asociados a bajos ingresos y a inestabilidad laboral en los estratos de pobreza e indigencia.
El tema del hambre fue analizado este viernes en todo el planeta con motivo del Día Mundial de la Alimentación, con el cual se conmemora el aniversario número 53 de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
La ceremonia oficial del Día Mundial de la Alimentación en Chile se hará el miércoles 21 en la novena región de la Araucanía, unos 750 kilómetros al sur de Santiago, que tiene los problemas más graves y acuciantes de pobreza rural en este país.
Furche indicó que en la ocasión se lanzarán dos programas dirigidos a las campesinas, promovidos por la Fundación de Innovación Agraria en el marco del lema "Las mujeres nutren al mundo", adoptado por FAO para esta conmemoración.
El Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap) desarrolla también proyectos para mujeres de comunidades rurales pobres en áreas de secano de la cuarta región, en el norte, y en las regiones sexta y séptima, al sur de la capital.
Las áreas de secano son aquellas que no cuentan con sistemas regulares de regadío y solo reciben agua a través de las lluvias, afectadas ahora por la sequía que afecta desde comienzos de este año al territorio chileno.
Las mujeres tienen una activa participación en los programas de mejoramiento de las condiciones de vida en el medio rural que realiza Indap con apoyo de FAO y otras organizaciones, señaló Furche.
Chile se sumará también este domingo a la emisión internacional que hará la Televisión Española en el marco de la segunda TeleFood, una iniciativa lanzada en 1997 por el director general de FAO, el senegalés Jacques Diouf.
El objetivo de la TeleFood es hacer conciencia sobre la seguridad alimentaria y reunir fondos para luchar contra el hambre, señaló Germán Rojas, oficial de Información de la oficina de FAO para América Latina y el Caribe, con sede en Santiago.
El año pasado FAO recopiló con esta maratón televisiva dos millones de dólares, invertidos en 176 microproyectos rurales para comunidades pobres en 76 países con problemas de insuficiencia alimentaria, indicó Rojas.
En el mundo hay 840 millones de personas con desnutrición crónica, de las cuales 200 millones son niños menores de cinco años de edad. América Latina y el Caribe tienen ocho por ciento del total de desnutridos, o sea 67,2 millones de seres humanos.
La desnutrición afectaba en Chile a 17 por ciento de su población en 1971 y el problema se agravó bajo la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-90), debido sobre todo a la crisis recesiva de los años 80.
Según el Mapa de la Desnutrición de FAO, en 1990-1992 los chilenos con insuficiencias alimenticias eran 22 por ciento de los habitantes, lo cual evidenciaba la herencia socioeconómica de la dictadura que dejó como pobres a un tercio (cinco millones) de la población.
Los patrones internacionales sitúan en la categoría de pobreza a aquellos grupos familiares cuyos ingresos no alcanzan a cubrir el costo de dos canastas básicas de alimentos, y en la indigencia a quienes ni siquiera pueden adquirir una canasta.
Furche señaló que se carece de estudios actualizados sobre el porcentaje de desnutridos en Chile, pero que éste sin duda disminuyó en la medida de que la pobreza afecta hoy en torno a 20 por ciento de la población.
Explicó que con ese porcentaje, el número de pobres en Chile es del orden de los tres millones, con unos 700.000 indigentes, sector en que se presentan hoy por hoy los problemas más graves de ingesta insuficiente de alimentos.
Rojas acotó que el último informe de la Organización Mundial de la Salud muestra avances nutricionales para la niñez en Chile, con un índice de desnutrición global de 0,9 por ciento y una desnutrición crónica (talla insuficiente al nacer) de 2,4 por ciento.
El indice de sobrepeso es de 7,2 por ciento, lo cual refleja un problema de malnutrición o malos hábitos alimenticios, acotó Furche, quien recalcó que en Chile no hay déficits de nutrientes, aunque sí dificultades de acceso a ellos para los pobres.
El director de Odepa dijo que el Programa Nacional de Alimentación en Chile se desarrolla a través de tres áreas de proyectos, orientadas a las políticas sociales, al mejoramiento de la competitividad agrícola y al comercio internacional.
Los programas de competitividad, que incluyen desarrollo de infraestructura de riego, tienen fondos por 140 millones de dólares al año, para la recuperación de suelos degradados se destinan entre 35 y 40 millones y al desarrollo rural otros 20 millones de dólares al año.
Furche subrayó que estos programas contarán con más recursos en 1999, pese a la reducción general del gasto que el gobierno de Eduardo Frei dispuso para el próximo año con el fin de contrarrestar el impacto de la crisis internacional. (FIN/IPS/ggr/mj/dv/98