Las juntas ejecutivas del Banco Mundial y el FMI se reunirán esta semana para revisar sus esfuerzos por aliviar la deuda de países en desarrollo, mientras críticos afirman que cualquier felicitación será inmerecida.
Directores ejecutivos del Banco Mundial deberán reunirse este martes y del Fondo Monetario Internacional (FMI) el jueves, para evaluar la iniciativa para países altamente endeudados creada por las agencias en septiembre de 1996.
La revisión se hará en momentos en que crece la insatisfacción ante la iniciativa. Muchos que antes la respaldaron ahora exigen mejoras, y un creciente número de críticos busca alternativas.
"Dos años después, la iniciativa no satisfizo su potencial para reducir significativamente la deuda de los países más pobres", dijo la organización no gubernamental Oxfam International, que en un primer momento respaldó la medida.
Originalmente activistas y gobiernos deudores aprobaron la iniciativa porque daba esperanzas de que los prestamistas multilaterales incluyendo el Banco Mundial y el FMI, gobiernos donantes del Club de París y bancos comerciales pertenecientes al Club de Londres, harían un esfuerzo concertado y coordinado para reducir la carga de la deuda de los países en desarrollo.
Pero el entusiasmo pronto se desvaneció. Cada vez más, gobiernos y activistas creen que el programa está sirviendo a los prestamistas más que a los deudores.
Para calificar para la iniciativa, un país debe satisfacer al FMI con antecedentes sólidos de programas de ajuste estructural de al menos seis años. El alivio entonces se limita a una cantidad fijada por los prestamistas suficiente para reducir la deuda a niveles a los que los deudores puedan reanudar los pagos.
Sólo seis de los 41 países que cubre la iniciativa calificaron, y ninguno lo hizo el año pasado, sostuvo Oxfam. "No más de un puñado de países se beneficiarán, y para ellos el alivio no será suficiente para reducir la pobreza y estimular el desarrollo".
La insatisfacción con la iniciativa de alivio de la deuda provocó intentos de concretar alternativas. Uno de ellos es la campaña internacional Júbilo 2000, que se propone elimiar las deudas impagables antes del fin del milenio.
"Por cada dólar entregado en ayuda, 1.31 dólares se extraen de Africa en pagos de la deuda a los países ricos", dijo Júbilo 2000 en una declaración distribuida en la cumbre del Movimiento de Países No Alineados realizada la semana pasada en Durban, Sudáfrica.
"El mayor obstáculo inmediato al desarrollo sustentable en el mundo en desarrollo es de la deuda", agregó la declaración. (FIN/IPS/tra-en/aa/kb/lp/if ip/98